El color de las flores me recuerdan tus amores y su delicada elegancia me recuerda tu fragancia. Su danza en el viento me recuerdan tu vientre suculento Las flores con su forma y con su ritmo me recuerdan tu erotismo Las flores y su aroma me llenan de tu encanto y hacen que pierda la calma recordando tus labios libando el polen y pistilo. Los encantos de las flores me recuerdan tus colores y tus deliciosos sabores. ECM 24112012
Alarma el alma el armadillo pintando.Elefantinas hormigas culebreando, el armadillo pinta, el arma pacífica, al sombrero en el meñique, al gigante diminuto viendo.La paja desgranarse de la tarde. Una sonaja, un acordeón, una flauta. ¡Alarmada!. Del armadillo pintor, pacífico viendo su meñique.La hormiga musical. miel pasión del oso. meloso amigo en soledad. ¡Culebrea elefante!. La trompa que pinta.El armadillo Bajo el ombligo Inspirado En el sombrero Diminuto.Del gigante tocando una flauta ¡Una sonaja enrojecida sueña!. El alma Desconocida del armadillo.. Alarmado solo un poco y desarmado casi.
El río llueve de amarillo. Al corazón del girasol. En la orilla. Tierna vida. Vida, vida, vida. El verde se atropella. Con el río. ¡Qué llueve de amarillo!.
En el viejo otoño. Bajo el mismo cielo. Y a su lado. Amarillas, amarillas, amarillas. Las estrellas. Tiernas. De vida. Lucen. Con el azul secreto.
Sincero entre las noches. Noches días y noches. A su lado amarillando. Reverdeando enternecidas. Por el mismo cielo. ¡Qué anuncian las estrellas nuevas!.
A Lo Lejos De amarillo, amarillo. El río.
Llueve al vaivén del sueño. ¡Húmedas las calles!. Floreando mariposas esmeraldas. Y... De luz la brisa cuelga. El frescor entre los troncos. Del parque conmovido. Del ocaso qué llena. Con el gris. Las secas hojas del eco. Solo, solo.
¡Ay, ahí, hay!. Tierno el verde amarillando. Porqué... ¡Qué miedo el silencio deja!. De la sonrisa primaveral. Extinta... Acaso en tintas pálidas. ¡Ocaso, natural, acaso, acusa!. Por... El viejo azul del cielo enrojecido. ¡Qué fácil el rojo olvida!. El nuevo sol del río. ¡Qué llueve al girasol!. Dónde el verde se atropella en secreto.
La tempestad se convirtió en espectacular paisaje, gélido, puro blanquizal pintado en lienzo natural, cristalizando los tonos enmarcados de una obra perfecta, creada por el poder imbatible de la naturaleza.
¡Qué belleza inimitable, parece velo celestial! El hombre no le presta atención, solo está pendiente de la fuerza destructora que la creó, pues su temor no le permite mirar más allá de los acontecimientos.
Un escenario mágico deleita los ojos sorprendidos por tan magnífica creación, sacada de las entrañas del vórtice extraordinario del invierno, que se avienta como dragón de mil lenguas sobre la temporada.
Esta hermosura pasajera dejó huellas al espectador, quien las atrapa con el lente de una cámara, este miedo fantasmal lo podremos ver ¡tantas veces! hasta no olvidarnos de su poder.
La niebla oscurece el cielo violeta Da paso a la nieve con su reflejo blanco Cruje al pisarla rompiendose en millones de cristales su cuerpo amalgamado El sonido irrumpe a pecho desnudo Agitado y descontrolado A velocidad desciende ladera abajo Bañando y resbalando el néctar de las cigarras que polénizo en verano Belleza sin fin cuando entre nubes aparece el vacío y las cumbres resabidas con sus cuñas te advierten de no pisar su orgullo y encantó El sol oculto entre bastidores del que solo reflejos emanan igual que como por temor a la envidia se niega la dicha Recuerda a los pobres que corto se les queda el brazo Cuando se dan vuelta al mirar ha desaperecido el pan de sus labios como si a otro mundo paralelo hubiesen pasado Enigmático porque no pudieron ver de dónde procedía el cambio Así que aprovechemos el paso del inmortal instante Cambiemos el significado para estar menos asustados y vivir el presente que no podemos sostener con nuestras manos Pero indeleblemente respiramos en nuestro exitir continuamos Gritemos con fuerza que vivos moramos Bengalas de esperanza al cielo lanzamos Pues náufragos nos toca reconocernos en nuestro acontecer diario Y sobrellevar la espada de Damocles con la que vamos acompasados
Señor clima: ¿Porqué no entra el invierno y se resguarda del frío verano amable en extremo y barato?.
¡Hummm!__ ¿De qué sirve ya la prima vera impulsada?. Dijo, la nieve pasada. Es Es el rencor calcinado, de la derrota, cruelmente, ¡Satisfecha en la sorpresa!. ¡Qué surge, peldaño a peldaño!. Del crisantemo ejecutivo. Del farol al frente. Porqué no hay remedio. Mejor, es abrir el favor, al viento, las velas con un poco de miedo, enseñorada canoa y opulencia.
Amarillando tarde y otoñal. Reverdeciendo temprano, primaveral hielo al tomar, la voraz decisión___¡Un meteoro!. Lógico___ ¡Sacaplata!.
Señor clima cuando cambia. ¡Un termómetro de vista!.
Solo unas letras para informaros que debido a múltiples compromisos tanto literarios como de otra índole, no podré participar de forma tan asidua como hasta ahora venía haciendo en todos los portales que compartimos, es por ello que intentaré seguir publicando mis obras en la medida que el tiempo me lo permita.
Debo hacer frente a diversos proyectos que exigen de prácticamente la totalidad de mi tiempo disponible y es por ello que no podré seguir participando en el tiempo y la forma como hasta ahora venía haciendo.
En función de la finalización de estos proyectos, me iré reincorporando a la actividad normal seguida hasta ahora.
A Ti dulce encanto celestial… A Ti Mujer que fascinante vas… Cada criatura se encanta contigo, Tú único ser que transforma destinos; Tu que vuelves al hombre como un niño, Cuando sonríes contagias tu cariño.
A Ti Tesoro Deslumbrante… A Ti Mujer Tan Desbordante… Eres una rosa en áridos desiertos, Floreces como primavera y Vino; Reposas como Ángel en mis Pensamientos, Eres tal Estrella que irradia abrigo.
A Ti Sinónimo del Amor y la Vida… A Ti Mujer que has teñido el Alma Mía… Me dejas apasionado por tus besos, Como viento llevas los malos momentos; No simula mi Espíritu lo que por ti Siento ¿Dime qué hombre sin Ti será un tentetieso?
A Ti Bombón Inolvidable A Ti Mujer sois Incomparable ¿Cómo amarte sin nunca herirte? ¿Cómo olvidarte sabiendo recordarte? Me engaño si finjo odiarte, Pero no negaré ni secretamente, Que te Quiero Cada Instante.
Personalmente creo que debería ser más extenso pero se necesita ser conciso cuando se trata de destacar lo dulce e inevitable que es una Mujer, un maravilloso ser que siempre nos guardará mil y un sorpresas pero al final siempre en cada persona habrá cierto ser tan especial que debe memorarse cada día de su existencia.
Con todo el cariño y respeto que tengo a cada ser especial de la Obra de Dios realicé este poema en el día de la Mujer espero os guste Saludos, Diego♣
Una garza blanca va volando sola en vuelo lento mientras pasaban las horas lentas en un reloj de arena.
De repente,en el recorrido de su vuelo vió un gran toro cimarrón, él también la vió y le enamoro su gracia al volar.
La garza blanca se posó suavemente en el estero para descansar del largo vuelo el toro mugió para llamar su atención pero la garza ante la presencia del cimarrón alzo vuelo.
Pobre torito muje su penar de amor la ingrata garza blanca por creerse mejor que el cimarrón se fué dejando al torito herido de amor.
Los mujidos del toro, se oían en todo el llano, y toda la naturaleza se unió y dieron consuelo al gran cimarrón, agradeciendo tal acción, volviéndose el guardián de los esteros.
Hacha filosa, sierra veloz… Las manos que las empuñaron ¡no saben cuánto están matando!… los miles de días que se amasaron a fuerza de sol y agua y viento… los tantos centímetros logrados, en tantas otras lunas no contadas, esforzando nuevas ramas y hojas para alcanzar ese globo hermoso, para evitar el incendio voraz de las lenguas caniculares del astro rey.
Cortes terribles rompiendo inmisericordes esa arquitectura, que abriga vida, que alberga vida… es que tras tan recia contextura, un universo inmenso convive, se recrea, crece y vibra junto, pero libre, como lunas, cometas… como puño apretado pero sin cerrarse como alas que se despliegan sin plan, como convite siempre dispuesto… como hogar nomás… acogedor, generoso.
Depredar a golpe de filos cortantes y cadenas girando dementes… parecería lo último y definitivo para un árbol tan majestuoso que aún mientras caía mal herido, la vida continuaba volando, reptando, en impotente éxodo no derrotado… falacia esta muerte artera, que no puede acabar fácil, como creían los innobles que rompieron años de crecimiento, de derroche de vida.
Es que aún en los estertores… la vida sigue entregando jugos, savia, fibras, calor, innúmeras simientes, sempiterno árbol que nunca se irá… la naturaleza no es gris, no lo será, la vida no es tan solo imágenes, no es sólo delirante paisaje, es un cosmos vibrante, inmenso… aún después de recibir feroz mutilación nos queda toda tu esplendorosa vida, entregada magnánima, sin límites…
Tropezaron en la oscuridad Unas con otras, y sin vacilar Todas se pusieron a caminar Hacer, hacer , hacer es el verdadero placer la vida es corta, la vida es un soplo. Construir y abandonar Lo construido Vivir y abandonar lo vivido Que no hay amor Más grande que el amor Sufrido. Viviendas de terrón Viviendas de algodón Hormiguero y hormigón Trabajan sin paragón
Era yo un gran árbol tan lleno de vida, tan seguro y firme me sentía dueño del suelo donde había nacido y crecido, con mis raíces , gajos y tallos fuertes, mis hojas verdes con bellas flores que realzaba mi condición de árbol.
Las semillas que caían de mi enorme cuerpo, sobre el suelo Fértil del bosque donde vivía, con su brote daban testimonio, de lo poderoso que era y que no me iría a extinguir pero no todos los cuentos tienen un final feliz.
Una mañana de verano me despertó los ruidos de camiones y maquina Que llegaban por mí, no sirvió de nada toda mi belleza, todo mi verdor, la sombra que los gajos saliente de mi cuerpo daban a mi alrededor, o el oxigeno que mi existir brindaba a los pulmones de aquellos que me estaban destruyendo sin importarles .
Arrasaron con todo sin dejar nada de lo que fuera mi especie en todo el bosque o lo que fue algún día un bosque, destruyeron mis pequeños brotecitos y todo a su paso hasta llegar a mí, de mis hojas caían gotas enormes ,pensaron que era agua acumuladas de lluvias pasadas, no entendías que sus cortes me dolían y que yo estaba llorando.
Tanto sufría en mi despedida de esta vida, que la savia emanada de tallos y gajos no era mas que sangre verde que desprendidas de mis venas de árbol salían. Pedazo a pedazo me fueron cortando y por completo me destruyeron hoy quizás nadie ya recuerde que estuve allí en ese bosque que tampoco esta y los que aun me recuerda ya se acostumbraron a mi ausencia . Adiós verde bosque, adiós cielo azul, adiós a aquellos que se refugiaban, bajo de mi sombra y disfrutaban de la belleza de mis flores en primavera y adiós a aquellas parejitas de enamorados que jugaban a esconderse detrás mío, en fin a dios a todos los que hice feliz con mi existir.
cuidemos a la naturaleza si queremos vivir mejor y amamos a nuestro planeta.
Envuélveme en tus brazos virginales en tus noches misteriosas y embrujadas, acúname en la inmensidad de tu existencia.
Cuéntales y cuéntame tus secretos mas oculto, a las aves refugiadas en tu cuerpo verde, Selva abrázame como a la fértil tierra que te acuna.
Abrázame con toda tu fuerza de naturaleza pura, Y te juro que nunca te dejare sola, te daré mi luz, mientras que tu existas tendrás mi luz ,mi luz de luna.
Revélame tus paciones y emociones no me ocultes nada, háblame de la humedad de tus hojas por el roció en las madrugadas, de tus noches estrelladas y animales alborotados correteando en ti.
Siempre mantuvimos una estrecha amistad tu allá abajo, Con tus árboles enredados como hermanados cuidándose, sin importar especie por miedo de extinguirse .
Y yo acá arriba desde el principio de la vida y de la creación, Sin perder detalle de todo lo sucedido con tigo, Y a veces me miro en las aguas de los ríos que te rodean.
Fiel amiga y compañera de mis largas noches como luna, y son pensamientos que me abruman cuando descanso de día, ojala nunca nadie robe tu virginidad selva querida .
Tu que eres la señora mejor vestida y protectora, de todo lo que estuviere en tu hogar verde viviendo el pulmón mejor dispuesto para que todos sigan respirando.
conservemos nuestras selva como el mayor de nuestros tesoros
El mar elevó sus olas a la luz del día intentó tocar, no se daba cuenta de que apaciguándolas iba a ser más fácil su esfuerzo lograr.
Y la intensa luz que el mar reflejaba nunca tuvo miedo de lo que pudo pasar, con su magnitud colores le daba a las intensas olas que le querían alcanzar.
Levantó el mar su efervescencia hasta el cielo topándose en las nubes con enorme blanquizal, que en la altura se convertía en hielo transparente, reluciente; todo un caudal.
Y rugió el mar trastornado, enfurecido rugía tan fuerte que del sol la aureola salió, y entre fuego y brillantes amansó aquel atrevido que de su feudo hermético a la deidad sacó.
Ante el acuerdo de que siempre luz tendría desde sus profundidades hasta el orillar, procuraba el mar disfrutar la luz del día aunque esta nunca por él se dejó tocar.
Salieron bellezas serenas y tibias de luces sombreadas tiñendo el paisaje, guardando del sol el tejido de encajes de fuego dorado que el ocaso entibia.
El astro cayendo hacia el horizonte despide a la bruma de un mar sosegado, se acoge al reposo tanto deseado, y apaga la luz antes de que atonte.
Las sombras se tienden en el panorama con hábil pericia forman a la noche, quedará tendida hasta el desabroche de la madrugada salga entre las ramas.
Toda esta lindura de transformaciones del día a la noche nos da atardeceres, son la creación que con sus poderes la naturaleza tiene entre sus dones.
El amor se enamoró de la seda fina, hilando, hilando... El agua de un lago. ¡Al besar la voz del viento!. En un recuerdo... Al mirarlo.
___Escribió suspirando___
Al áureo fruto...En la sonrisa. Del Tiempo ¡Blanca nieve!. En La lluvia de los sueños, nubes rosas. En Los cabellos, polen de las pupilas. El Amor se enamoró, de un lago de viento.
El Amor, estremecido. Transparente. En la quietud... ¡Fácil mudanza!. Encendiendo una manzana. Al fuego de la más leve centella.
En la humedad, desnuda, luego. ¡Frente al tiempo, del reloj, frágil!. Al verdor, mortal, de la miseria. Es El amor, guardado. En el capullo. De la seda. ¡Al secarse!.
El Amor... Del tiempo. Hilando lágrimas. Al vapor de los recuerdos. Hielos, lagos olvidados, alguna vez renacen.
Donde Está ¡El amor durmiendo, al áureo fruto de una sonrisa!. Y Luego La voz del viento besa, al regresar.
Natural Mente.. Mira el verde brillo de los campos azules los cielos en las retinas de la primera esperanza en la suerte bondadosa qué naturalmente mueve al sol en su cielo azul en su amarillo en la dulzura del agua del viento en la tierra del corazón de la vida de las hojas escritas del árbol viviente ramas raíces y frutos en la memoria guardados en el futuro qué aguarda el verde brillar de la esmeralda al diamante... ¡Encarnado!
Manto azul sobre la montaña Dibuja el idílico paisaje de mi infancia Cuando bailar y cantar erán todas mis ansias Los días pasaban Y no me preocupaba El ayer ni el mañana El hoy consumía todas mis ganas Dónde quedó aquella niña Que sin zapatos andaba Y nada le molestaba Ágil como un saltimbanqui con las cabras danzaba En aquellos veranos las cumbres afiladas atravesaba Sin miedo ni conciencia que la molestará Libertad en sus pies compartia las estrellas Y crecía unida a la naturaleza No había calendario ni saberes extraños En sus recónditos bajos Absorta en los perfumes de hierba cortada Flores silvestres Y leche de cabra Que su nata sobre pan con azúcar Y moras con vino regadas eran manjares de dioses Sin necesidad de golosinas edulcoradas Cuando vuelvo a mis cumbres nevadas y puedo tocar el cielo con la palma Aquella pequeña renace de sus cenizas Saberme más cerca de los dioses que alivian y acunan mi alma