No es más hermoso el amor Que acariciar se puede, Que aquel que a lo lejos, De su vida, ha entregado lo mejor.
Un beso, una caricia con dulzura La realidad confunde, Pero no es la llama que al corazón Inflame con el fuego de ternura..
En sus alas perfumadas lleva el viento Cantos de amor y despedida.. Así mismo la esencia trae Del amor, que por amar espera.
Mientras la que sueña en sueños Borda, el ajuar de ensueños Que nunca lucirá en la boda; Pues despertará al llegar la aurora.
Los pajarillos lanzan trinos, que en el Corazón de alguna pajarilla cala. Después hacen sus nidos y sus críos reciben amor.
Mas miles de versos el poeta escribe, Gritando a voz en cuello, sin que nadie Escuche, lo que su alma palpitante dice, Casi sollozante: “Yo también sé amar”-
Busqué la palabra Compuesta del corazón Glorioso, Lo busqué inmaculado En tus ojos azulados, Junto a mi piel. “Ghaurrarriez”… De corazón, Aries, mi signo y reflejo, Soy persona, soy yo. Busqué una noble palabra Que me identificase… “Ghaurrarriez”… Y hubo dolor, Bella canción, Burla, Sin importarme, Risa, Es así, así es y ya es. Ghaurrarriez… Soy yo, Bueno o malo sea, Ghaurrarriez… Soy yo.
A pesar de los años Yo no he perdido las esperanzas De realizar mis anhelos Como todo buen escritor…
Y quisiera contigo Dejar la huella que todo hombre debiera A su paso por esta tierra… Es decir: plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro.
El árbol hace tiempo yace plantado En el centro de mi jardín Eterno vive rodeado De flores bellas, escogidas para tal fin.
A mí, de pronto que se me diera Las ganas de un libro escribir Pero no es mi mayor anhelo, ni es ese mi desvelo Yo quiero algo más íntimo, más nuestro.
Así, aún poder escribir espero… “¡el poema!” Uno que te haga vibrar de emoción Para que lo guardes en tu corazón Y lo alimentes con devoción…
Y se me ocurre que Tal vez no provenga el poema ansiado De mi pluma, algo cansada ya Ni de mis letras gastadas por el dolor…
Será quizás que el poema venga De ti, de mí, de este amor… ¡Será la envida de unos… Y el sinsabor de otros!
Tal vez, te decía, amor El poema que busco Lo tenga en la punta de la lengua Y en el último trazo de mi esfero…
¡Será una sirena augusta que nadará en el tintero De tu vientre florecido Madurado entre fragantes pétalos de buen amor! ¡La niña que yo quiero, quiero que me la des tú!
Te quiero mucho mi osito, colibrí, mocosito y corazón
Besos.
..
Yo pudiera si así quisiera… Escribirte versos, los más bellos que jamás tú leyeras Hacerte dueña de un gran amor Excelso y verdadero, que más nunca conocieras.
Podría poner en tus manos Pétalo a pétalo mi corazón deshojado; Y si en el desierto sedienta te viera, darte a beber De mi sangre… hasta la última gota, para tu sed mitigar.
Si yo quisiera y el tiempo lo permitiera Llenaría de rosas el firmamento, y en cada una tu nombre Eternalmente grabado quedaría Para que el mundo de ti supiera y de cómo te ha amado un hombre.
También podría en el mar sembrar Aquellas fragantes y blancas flores que un día me regalaras Diciéndome que era más que amistad Dándome en ellas el corazón, y prometiéndome amor sincero.
Yo pudiera si así quisiera Cubrir de verde, uno a uno los desiertos del mundo entero Llenarlos de primavera… de flores, colibríes y mariposas ¡Y pedirle a un manojo de ellas, que me acompañen cuando yo muera!
Delalma 27/01/2013 10:41 p.m.
Personalmente este poema me ha gustado mucho, me parece que encierra mucho amor. Lo brindo para ustedes con todo el corazón.
En total disyuntiva me tienes Quieres dejar lo que amas Por amar lo que amo Y subirte a mi barca Que cambia de rumbo Constante Cuando a buen puerto se acerca.
Yo no sé si es la vida O es Dios nuevamente que juega conmigo Llenando de flores mis ansias ya muertas En un laberinto del que no puedo salir Trayendo un camino Nunca antes andado Uno, que nunca pedí.
Quédate, si es lo quieres Tal vez eso sientes… ¿yo que puedo decir? Sólo que esperes el tiempo preciso Que florezcan las ramas De un árbol maduro, si nada se opone La miel de los frutos dulces y frescos Serán para ti.
Delalma 04/01/2013 12:25:51 p.m.
Tratando de escribir nuevamente algo leíble. CANCIÓN E.VAENGA - No voy a dejar que me pierda (usted)
¿Fe?, yo no tengo fe… yo tengo hambre de pan y sabiduría… fe tiene los que regentan iglesias los curas, los rabinos, los pastores¿?...
fe tienen los que con Dios hablan… aquellos que esperan los domingos por tu diezmo, mientras hablan del apocalipsis y te venden el cielo, entre tanto, vives un infierno…
Fe tienen aquellos que levantan muros de ignorancia, y se llenan la panza con tu hambre y el hambre de tu hermano, porque dicen que eres parte de un rebaño…
Ellos tienen fe, porque con tu dinero edifican lujos templos y caros colegios y te dicen que es tuyo, para que sigas aportando mientras tu hijo asiste a un colegio fiscal.
Ellos tienen fe, porque en orgiásticos banquetes atiborran sus vientres de vino y manjares, y te hablan del ayuno y sus beneficios mientras doña TBC… carcome tus pulmones.
Yo tengo a Dios, por eso no tengo fe porque Dios es mi trabajo, con él me acuesto, con él me levanto… y tengo todo, si tengo a Dios.
delalma. 23/01/2010 07:04 p.m.
Ahora llegando la navidad se me dio por recordar este poema que no lo había publicado aquí. Un abrazo para todos aquellos padres que se rompen la espalda para darles a sus hijos la mejor educación; también para todos aquellos que en su debido momento lo hicieron. Mis felicitaciones para todos y que este año venidero sea el triple de fructífero que el que se va. Un mal año para mí, definitivamente; y no en lo económico, que es en lo único que siempre me va bien. será porque no doy diezmos ni limosnas? Yo no regalo el pescado, enseño a pescar.
Se pierde la voz en los confines del tiempo -que sientes no pasa- confundida y enredada como hiedra de lamentos; se pierde la voz y con ella la vida que se sufre entre los laberintos del interior que se sueña, imaginando azules huérfanos de cielos radiantes y soñando con noches de Lunas por amor robadas..
Se pierde la voz y no queda nada, no queda la fuerza, perdida en la insistencia, ni la paz, arrebatada en la batalla, tampoco la razón que esclava de la ceguera del corazón huyó sin destino buscando otro justo y noble motivo.
Los pasos del hombre oyendo su voz, mirando cada día el amanecer que no llega, soñando despierto entre nubes de promesas y acompañado de todas las creencias; los pasos del hombre por sentir y vivir su interior sin terminar de comprender que vivir en una cárcel, aunque suya y de oro, es la peor de todas las condenas.
Cuando el hombre pierde la voz comienza a hablar con el corazón; cuando desiste de luchar por la razón comienza a ganar la batalla que lo hace grande, maravilloso y único en ese mundo que tanto buscó.
Alguien ha dicho hoy, en el metro: - Ella sabe quién soy! Con espanto, así pensé: ... ella no sabe quién no soy, ella sabe y no sabe, ni yo ... Esto es porque no sé lo que es saber, en la medida en que pienso que sé! Ayúdame, oh Sócrates!
Es difícil ver los capullos florecer sin extrañar tu sonrisa, tu terso rostro, tu alegría. Extraño ver crecer tus auroras, cálidos amaneceres… entre los balbuceantes matorrales.
Reclinado a la sombra de aquel soto con el pensamiento puesto en ti, voy rumiando mis recuerdos… con alguna hoja seca en mi boca.
El aire fresco me golpea la cara y siento frio hasta en los huesos, extrañando tú presencia, que allá en la distancia, quizás ya no se acordará de mí.
Siento la angustiosa necesidad de cultivar más flores, irónicamente, sonriendo pienso que tal vez en una de ellas, de pronto, he de verte aparecer.
Todo es ilusión y esperanza pasajera si bien sé, que lo que se va… ya no regresa como el tiempo, como la vida, inapelable, como la clepsidra.
Me levanto pensativo oteando el paisaje sólo el canto de las avecillas, y el brillo de coloridas mariposas, rompen la monotonía del hastío.
En la brisa estás presente, pero de mi vista estás ausente, yo que te quiero tanto deseo que encuentres el amor, que no supiste hallar en mí.