|
“Fuente del ser más sapiente . . .”
Cálamo de hueco pecho, grafo, letra, signo estrecho, negro, azul, que se desliza con inspiración precisa.
En las hojas de blancura corre tinta limpia, pura, la escritura es una liebre que deja huella indeleble.
Bolígrafo que le agrada a una mano consagrada versando con elegancia odas, rimas, consonancia.
Como las de aquella pluma cuyo estilo no se esfuma, esencia, punta bendita que el poeta necesita.
Portadora del repuesto que estará siempre dispuesto a imprimir los pensamientos que no se llevan los vientos.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda México, D. F., a 21 de marzo del 2016 Reg. SEP Indautor No. 03-2016-070109301200-14
|
Poeta
|
|
CONSEJO AL ORTEJO (Experimental)
Vivan tal para cual. Y la cal sin miedo, ya nada más de prisa. Por eso, el buque, ya no razona como tiburón y ballena. Y solo parece inoportuno el fantasma al asma escondiendo invisible. Y si por error acierta. Eso ya es otra cosa, lamentablemente falsa, un poco más.
Las reglas y protocolos ignoran al trigo, al ser indiscreto con el arroz, y la sopa caliente, con el sombrero, en la sombra de la noche, los lentes más obscuros hacen, todas las noches. Igualmente en la caverna, una cara vana una reunión crepita crótalos en criptas.
La ciudad donde está, sabe, a viento en la arena en el muerto de risa, del pescado pescador de anzuelos, y las cosas torcidas parecen buenas al ácido nucleico helicoidando y dándole en la cama una cana al aire, aire y calor, desempleadas manualidades al volante, ya manejan en el lago submarino…
Y nada pasa. Nada sin zapatos. Nada nada. Es tan natural tan hábil tan suave. Habla con el retrato y sonríe al lápiz. Vuelve y desenvuelve al regalo galgo. Y todo tan natural y digital. Ni duda el dedo. En tanto la fuente salte y no muera. Como mueren las mañanas y no muera, como viven las noches y no viven, como viven cada cual por su rumbo.
Pues, ha nacido, solo un poco menos, al ver la pluma vestida de paloma. Y al grillo de alacrán con muletas, Y al perro bañándose con gatos, Y la gallina engallada con gestos. Gastando cuando no tiene pena que pene y pene el dolor volando cuando crece al pararse en cada esquina, el algodón en el parque, y nadie pasa.
No posa, ni bajo el pozo, al esposo con la espalda antes de ser topo. Ya topa, ya tapa cuando solo se destapa. Si, si, por eso, la tinta seca cada pluma. Y el viejo lápiz se arrastra por las pantallas. Déjame al partir el pastel, morir menos, aunque haya más velas en los barcos… Y la tierra implante plátanos plácida, siendo como siempre ha sido la montaña que montan los años y entran aclimatándose al volcán que lava y lava con la saliva como planta el pié cada rodilla en ese jardín en ese jarrón digital incomprendido.
¡Óyeme ortejo, si así lo deseas!.
*****
|
Poeta
|
|
INDESCIFRABLEMENTE (Polipoesía)
Se cura del honor la herida. Ida/y…dá. La verdad profunda. La desconocida. Brillante opacidad=justo silencio. Quién. ¿Quí…qui?... No es tan… Cu cu. Insonoro afónico esculpe inculpado. Al sahumar salaz salivazo saltimbanqui. S-a-t-i-s-f-e-c-h-o... Horrísono fragoso.
Errátil esbeltez Dela...Dela... prudencia con calma consonancia conspicua consternada conspiración y chispa… Con con…Poco…Coco.
Donde tocan melodías malhadadas maleables. De blablar de murmur de gar gar. Los peces se ocultan dulces dislocados dislates. Encorsetados encopetados encubridores… ¡Hey!. Zaheridor zaino zalamera zalagarda zambra. Za-za que za-za… Sicalíptico y elíptico. ¡Tico-tico!.
Y sonrientes en las profundidades… ¡Plas…plas!. Plácidas plagas plagian… Pletórica pobretería del seso. Exo-exo… Dixen-dixen… Exto es texta… Texto a texto. Exto ex texta… Y extexta es. Sososolo el pescador como símbolo Simpático silvestre… ¡Sí…sí…sí!. Salado alado ralo ruge. Ru-ru-ru.
Llaves... Ya vas... Dale soso/zopenco y al… Estorbo escarba… Del tardo trueno raspa rayano. ¡Ah!...¡Eh!...Kikirikí…Cucara-mácara… Yo no fui. Y colorín…C-O-L-O-R-A-D-O... La. V.I.D.A. no/no/no E.S.A.S.I.
El ósculo ha de sacarlo fuera volando en violines, del agua. Guá-guá…¡Wow!.
Con el fieltro fiero fiasco fisgón flagrante. ¡Oh!...Fí-fí… ¡Oh!...Fo-fó… Bodrio/bolonio. De la pluma. Plus pliegue plañidera. Pu-pu-pi-pi… Pus pinto… Del cus-cus… El ave la tinta la mano el papel. Absceso barrabasada carcoma decolorada enzarzada fluctuación mimosa mirtífica misántropa…
Mi mí… Múa múa… Bóbo…Bobó. Del verbo ardiente. Mu/mú/ela/ela. Serena luz. Iluso. Zigzag del zipizape.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Información útil es... https://es.wikipedia.org/wiki/Polipoes%C3%ADa También... http://www.altamiracave.com/polipoes.htm
|
Poeta
|
|
ENVILECIMIENTO DESMESURADO
Azulada sombra asombra al temor vano, porque al aire arranca su misterio, que de tenebrosa tinta la luz sale, del esplendor conservando las huellas. ¡Entre las plantas que duelen al cielo!.
Lento el suspiro, las ventanas adoran, donde la eternidad palpita y se agiganta, en el ángulo del silicato doble. ¡Tan lindo espejo en su ardor!. ¡Por el llanto que consterna a un búho!.
Las aves de la huerta se fatigan. ¡Ya no cabe más blancura!. Ni hay huevos. El corazón desayuna el olvido. Y calla. Con la manzana del gusano bendita. ¡Y los manantiales se quejan solos!.
Amarga es la limosna de sonrisas, por las humanas carrozas del estiércol. Se difunde grata y se desata. ¡Hábil!. Y ningún desenfreno es igual a otro. ¡El sordo golpe camina de espaldas!.
Los retos solo lanzan los retratos, donde el foso se agiganta jugando, en la noche de férreas lámparas, al venturoso vuelo del martirio. ¡La piedad y la injusticia vomitan juntas!.
El suelo malhumorado mal muere, reclamando la imprudencia al agua, con la voz del vegetal desgreñado. ¡Un cordero se afana!. Y ríe un pescado. Las velas ofrendan al barco. En la arena.
El sueño duerme sin sombrero. En la luna. Un breve instante corre. De cabeza. Y la luz herida olvidó la sombra, el himno encarnado en la tristeza. ¡En una legión de nudos ágiles!.
La bruma abruma el pecho abierto, y la cuchara devora el hambre. ¡Injusta!. Por el rostro melancólico del Tic-Tac. ¡Las piedras preciosas no son dulces!. Y las ausencias buscan donde instalarse.
*****
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
Trapisondear urdemales (Neodadaísta)
Sobre la mesa que silenciosa expira, la huella y ella son funeral fallido, que la esperanza ha devorado amarga, enlagrimada túnica e indignación descarga, mordiendo al viento la indiferente tinta.
Nieve pura donde el silencio crece, metálicas fragancias de inexistencia absuelto, viril martirio en la eternidad convierte, mudable, indomable, estóica lealtad antigua, al ritmo de la idea y las estrofas peregrinas.
Arcana calma que despedaza el alma, espiga espuma en la suprema silla, la sombra del silencio derrama la mirada, en el menudo sueño con lava hirviente, mil tumbas áureas el cielo habitan.
Allá el hierro de la congoja mudo, teje con viento al monocorde instante, del futuro los fantasmas hoguera fría, aprisionan los antojos de la espera núbil. ¡Árido huracán yerto!.. Rigor y roble.
Fervoroso el fuego en la ceniza vive, los muslos de las grutas del mármol dulce, rasgando la escoria del sensualismo torpe, leyendo pintoresco las blancas hojas, el rojo que envenena, condena y redime. Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
Apergaminado
Y fue un papel que deseó escribir, sobre la tinta. De la luna enamorada. De la noche del fracaso. Del silencio del miedo. ¡En la esfera menos espinosa e incolora!. En el sol pájaro en el viento medusa, terso pétreo arisco erial acre insano.
¡Apergaminado destintarse vano!.
Lloran, lloran las piedras lúbricas lavas. Con la furia lujuriosa del perdón enamoradas. ¡Como el hombre que debe ser alabado!. Pues a su mismo creador ayuda. Con la tinta con la lengua con la mano. Álabe creyéndose importante. ¡Dándole su humedad al agua!.
¡Vano destintado apergaminarse!.
De la misma naturaleza humana evacuatorio, dando conferencias de la muerte al cementerio, descubriendo al iluso ser sabio. Y ¡Oh, milagro !, inventando el agua tibia. Implorando a las rodillas que se arrodillen. Y al jardín de los cristales amar su silbido, azul de ausencia, rojo débil, amarillo humilde.
¡Destintado apergaminarse vano!.
Porque fue papel en trance líquido, de la tinta peregrino en el desierto, fabricante de ojos para vigas ajenas, enseñando al asno a hablar de orejas. Y a las aves a volar y a las flores perfumar. Y a cualquier dios inventarle poderes infames. Por ser ayudante del creador débil que le implora, culto, y promoción.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
PÓCIMA CARA
El Rostro De papel Tiene hambre De tinta fuerte ya Que persigue una calle Por el espejo débil drama Licuando al fuego de casa y cuchara De cama y tenedor de puerta y tristeza Pintando de noche las ventanas sedientas De la vil justicia sanguinaria con el tedio raudo Adulterando al auditorio del armario lento Estrechando los aplausos del cementerio En la obscuridad erguida que inventa En la frenética copa que teje latidos En la caja monedas que afiebran Odios horizontales honorables Pésimas piedades pintables Laudables lenguajes lanza Papeles entintados Licuados caros.
El papel mortecino del humo ha sido piedra en la cabellera del silencio caballero pardo con la tormenta de las algas en las pupilas y la danza de los musgos en la mano suave De miel y fuego, de piel y jugo, en la luz hoy Que sabe a higos con los pechos de alabastro entreabierto en la distancia que estremecida mira la intimidad ardiente de la hormiga alada con la mariposa que arrodillada canta córnea en la cándida montaña bajo el puente papelero
Estando El brebaje Decorando La siesta débil Con la boca seca Inseparablemente Acuática en la memoria De la carne de las tumbas Salvajes reminiscencias ricas Rindiendo rejuvenecidos cultos Al insensible suelo sacrificando zupias.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
Sueños de un zapato
Caminos gastados por el tiempo Infancia dormida en los cabellos de plata Otoños amarillos... Hojas verdes de noche Un sueño. Una sonrisa. Una lágrima. ¡Niños de esperanza!... Sueños rosas. Un zapato... Sueños nuevos... ¡A veces!.
¡Un día como un siglo de sueños!.¡Sueños del suelo y del cielo!. Noches dormidas bajo la cama. Días de piedras y polvos. A veces. Una dulce bota... Grasa y tinta. Húmedas grietas por la vida... ¡Olor a talco... Otras veces!.
¡Un día como un año de dolores! Algodones dormidos en el suelo. Las noches prolongadas. Días rápidos. Frescos perfumes de flores. Brillantes pieles... Serenos pies... Lentos. Un camino plano. Cielos en cada suela. Un niño feliz. Hombre. Trabajo. Descanso.
Un zapato. Como un hombre libre... (Absoluta fantasía) Sueña caminos ¡Vive gastando tiempos! Una vez si, si, sííí... Otras muy poco, poco muy poco. Vive un pequeño mes, un enorme momento. Un día pesado, perdido, perdurable... ¡Periférico perífono! Un año eterno... ¡Mil muertes diarias, ocultadas, provocadas! ¡Sueños dulces y extraños!... Del olvido increíble. De los labios Por el camino del zapato... ¡Que ahora camina solo! La consciencia del cuerpo que lo habitaba se ha esfumado... ¡Cómo sus sueños!... Como sus... Como... Co... C...
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
ALBANEGA ESFEROIDAL
Porqué Así Se Rehilarían Los Recuerdos.
Cuan risueños están los ruiseñores. Y las señoras en sueños ríen; Ruines. Los ríos irrisorios cantan; Raudos. Los cuencos contando cuentan; Sueños. De cisne en cisne cien cenizas; Albas. Heridos hierros hechos humo; Negado.
¡Pensando que hubimos rehilado sabores!.
En las arenas del cementerio alegre. Porqué la muerte cavó su tumba. En el cielo cubierto de sangre. Por los caminos que la tinta borra. En las palabras por nadie dichas. En el límite dónde el espejo descansa.
¡Cómo si rehiláremos ilusiones nuevas!.
Donde se mastica y entrega__Tiernas ausencias. Donde se traiciona y abandona__Hojas secas. Por cuatro minutos que piden socorro solo. En el cuello de la mirada minada miserable. En el tiempo de la noche ebria embrutecida. Con las culpas que huelen a eclipse en fuga.
¡Esferoidal es... Rehilad las esperanzas albas!.
Por la estatua que cambió de piel persuasiva. En la brisa de la zozobra zarabanda que muda. De cuerpo desplomado botarate en bronce. ¡Qué pronto desgrana y desengaña el olvido!. ¡Qué al agua desnuda y siembra la sombra!. En esta albanega esferoidal... ¿Qué haremos?.
¡Sí. Rehilaos entre los sueños. Sí puedes!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
SUEÑOS DE MARIONETAS
Son Porqué
En los ojos grises de luna lleven soles Por el canto Dónde duermen los hilos de madera Hilos del soñar, piedras y algodón ¡Del humo hecho murmullo! Sueños, sueños, por el bambú qué llueve Su primer blusa de nieve cálida tejida ¡Palpitando la retina artificial! En la gruta del café... ¡De los pingüinos!.
Son Porqué
¡Sobrantes unos tótems gimen! En la tinta sentenciada a ser araña. Al dormir de la ceniza una serpiente. Cuando habla del pescado por el techo. Del fascinante amor enmascarado... ¡Sueños de marionetas!... Desnudos. Pendientes de la espuma de los pisos. En la píldora del buzo comiendo sopa. Y se despluma de la jaula los barrotes.
Son Porqué
Son creyentes momias de consciencia. Empapelada al bolsillo de las pestañas. Del vientre bajo el zapato pierna ágil. Siendo verdes los ojos al cruzar un clavo. En los precios instantáneos del silencio. Como las espinas del unicornio dulce. Los milagros del polvo un congregar mortuorio. ¡Qué la escritura de la carne tritura encadenada! Sueños de marioneta son de marioneta sueños.
Son Porqué
Nada saben de la mínima razón de la pradera. Ni de los mil ojos de agujas en un camello. Dónde la paja viste un millón de vigas hoy. Dónde hay pianos recalcitrantes y crispados. En la estrella congelada del vampiro piadoso. Marionetas qué sueñan marionetas dormidas. Al cuidado de los mendigos de leucémico peluche. En la máquina hemofílica de gato, artificial ceniza. Dejando al sol encuadernado con guantes en las sienes.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|