Velándome sigo
Velo por mí en los cementerios,
de los siglos fermentados,
y calcino soles pobres,
como lodo rojo...
Camino vestido de sabores amarillos
Los anillos repetidos
Las sortijas melodiosas
Y contigo entretejida con distancias.
En la humedad de una sonrisa viajo,
palpando libres y latido,s
atrás de cien destinos.
¡Arriba de mañanas interminables!.
Abrí mi cripta presuroso.
¿Dónde quedó mi ceniza?__ ¡Pensé!
¿Dormirá aún mi polvo?__ ¡Me dije!
¡Estaré siendo tiempo!__ ¡Creo!
Cerré la cripta lentamente...
¡No hay ceniza, ni polvo, ni tiempo!
¡No pienso, me dije, nada creo!
Solo-Seré-Siendo-Poco de nada.
¡Hoy me velé, me sepulté, me dije!.
En el ahora que no existe.
En el eterno mañana.
¡Lleno de constantes instantes!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez