Poemas :  El valle intranquilo
El valle intranquilo
Autor: Edgar Allan Poe
Estados Unidos 1809-1849


Literato notable, nació en Boston, huérfano desde sus primeros años, fue ensayista, novelista y poeta. Ésta es versión de Andrés Ehrenhaus

Hubo un tiempo en que el valle sonreía,
silencioso, aunque nadie allí vivía;
su gente había marchado hacia la guerra
confiando el cuidado de esa sierra,
por la noche, a la mirada fiel
de las estrellas desde su azul cuartel
y de día, a los rojos resplandores
del sol que dormitaba entre las flores.
Mas ahora para todo visitante
el valle triste es inquieto e inquietante.
Nada allí se detiene un solo instante...
nada salvo el aire que se cierne
sobre la soledad mágica y perenne.
¡Ah, ningún viento agita los ramajes
que palpitan como el glacial oleaje
en torno a las Hébridas salvajes!
¡Ah, ningún viento empuja el furtivo
manto de nubes que, sin respiro,
surcan durante el día el cielo esquivo
sobre las violetas allí esparcidas
como ojos humanos de mil medidas...!
sobre las ondeantes azucenas
que lloran junto a las tumbas ajenas!
Ondean: y en sus pétalos más tiernos
se juntan gotas de rocío sempiterno.
Lloran: y por sus tallos claudicantes
bajan perennes lágrimas como diamantes.


Una referencia interesante es...
https://www.youtube.com/watch?v=6r62QXdbYIo
Poeta

Textos :  Enjugascarse durmiendo... (Neosurrealista)
Enjugascarse durmiendo
(Neosurrealista)


Atardece este sueño lejano
del pueblo florecido
recuerdo indeleble... Cristalino.
¡Que nunca ha de volver!.
¡Vive, sí, en el tiempo detenido!.
En el sueño que la tarde sueña.
Como...Se captura la esencia más allá de lo que se ve,
o lo que se toca, y lo que se defiende afirmando,
que para conducir esos caminos se debe saltar
de nube a nube, en especial por el desarrollo de
zonas desconocidas, sin el tabú de las relaciones
de propiedad, con toda la reconfiguración rosada
que insiste en ignorarlo, haciendo los mismos actos
estereotipados de avispas alegres y abejas tristes,
especializadas en los mínimos cambios.

Este emocionante y radical conjunto de perfumes,
provino de una fuente de volcanes tímidos, más allá
del último fulgor de los primeros soles solos, como
semillas letales que salieron de su jaula para volver
a su habitat... Las pruebas, como las mira el camaleón,
se agrupan básicamente en cuatro jirafas, según lo
revelan las condiciones atmosféricas antes de salir
del cascarón, y del mismo diseño corporal. Tómese
como ejemplo, la última pastilla infatigable y la base
tecnológica del pecado más avanzado con su perdón
seguro con un pequeño click.

El resto de los televisores por lo general están de acuerdo,
y sus molestias son parecidas a las almas en ascenso, en
algún momento durante los últimos diez mil años, por la
total confusión e ignorancia de las hojas del otoño, en la
creación de alternativas para la nieve, que ofrece un sinfin
de inicios digitales más allá de la región de los colmillos.
Pues cuando el agua se calienta, y la máquina de escribir
ya no funciona, el coral expele las algas simbióticas que
brincan las cortinas, y buscan las respuestas en las patas
del canguro, a pesar de los celos de los patos.

Como resultado de la interminable búsqueda, el golfo
turbulento se tranquiliza, y cubre la hierba con piedras,
y sombras del prado y la floresta, con la fe panteísta de
visiones extrañas con sabores bien dispuestos, que van
con el misterio que hila el grillo con su canto al silencio,
para encontrar el verdadero amor con todos sus ingresos
siempre funcionando. A veces la búsqueda termina dónde
nunca ha empezado ningún verano, y sólo si sus efectos
buenos sobrepasan con exceso a los malos como nunca
ha sido, ni lo será jamás. Por lo que sólo en la individualidad
auténtica , existirá en vínculo absoluto con su ignorancia.



Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta