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AL DIVINO COLIBRÍ IZQUIERDO (Experimental Náhuatl-Español).
Otipitzaloc otimamaliuac in mochan In Omeyocan in Chicunauhnepaniuhcan. Fuiste fundido. Fuiste labrado en tu casa. ¡Sitio de la dualidad!. Lugar donde hay 9 compartimentos.
¡Oh!. Colibrí, colibrí, colibrí. El del trino izquierdo. ---Huitzilopochtli--- ¿Tlenon mitzmaca? ¿Itlah mitzcocoa, itlah oticpolo? ¿Qué te da?. ¿De qué estás malo?. ¿Qué has perdido?.
Tiahui nenecuai. ¡Vamos a beber aguamiel!. Amo tle mopano chihuaz, cabo zan Atontli toconconizque. No te pasará nada, al cabo solo, agüita vamos a beber. X´huallauh, ca tli. ¡Ven bebe!. X´camachalo. Abre la boca.
¿Otimozauh? ¿Ayunaste?. X´camachalo. Abre la boca. X´huallauh, nimitzcamapopaz. Ven: te limpiaré la boca. Xi mochia zantepitzin, Amo zanzan xi mapuraro. Espérate tantito, no más no te apures.
Noyolo: ticmati abel nimitzelcaba, Iban yon iga aman nimitztabilolia. Corazón mío: Sabes. Yo no te puedo. Olvidar, y por eso te escribo ahora. Xic mati yecti, tajca iban tayobal nimitzpia noixtenco. Sabe bien, de día y de noche te guardo, ante mí.
Amo xic nechelcaba, totoga timotasque… No me olvides, nos veremos enseguida. Ye motech on quiza, in ihuintixochitli. De tu interior, salen flores embriagadoras.
In quetzal poyomatli ic icuilihuic noyol ni cuicanitl. Con flores de embriagante belleza. Se pinta mi corazón: ¡Soy cantor!.
In xochitl aya tzetzelihui, ya an huel icuiya, Ma xon ahuiacan. Flores. Se esparcen. Ya las oléis. Gratamente. ¡Gozaos!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez Referencias útiles... es.wikipedia.org/wiki/Náhuatl es.wikipedia.org/wiki/Huitzilopochtli
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Poeta
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INVESTIDOS TRES
Aparecen desnudando la noche, bajo la cama, saltan, profundamente quietos, invisibles, en la soledad tras la puerta.
Desaparecen vistiéndose de mañana, sobre la cumbre, enterrada, inmóvil, en el tumulto boquiabierto.
No estarán presentes, tal vez, como ayer.
Dicen, palparon su ausencia, en el aire silencio y lejano. Dicen, que cada día es diferente. Y parecen no ser los mismos. ¡Nadie, ya lo duda seguramente!.
Aunque alguien verde lo siente, tocando el enigma del cuaderno, tocando la sed de sus raíces, tocando el perfume del olvido.
En la honesta moneda, que perdió el valor, al volar confiada por el brillo oculto, del mayor abandono en cualquier sitio.
Porqué, porque, por... ¡Qué!.
Tres veces dos vestidos caminaban, sin ser vistos. Tres eran solo ahora dos, sin ser iguales. Ni antes de conocerlos. Ni después de ser olvidados. Completamente.
¡Fragmento a fragmento!. Desnudos dos veces desvestidos. Inmersos en el exterior frío. Expulsados en el interior calcinado. ¡Fueron sin serlo rápidamente borrados!.
Tres veces dos acaso, solo una, voz que lo haya callado, voz que nada dijo, voz que nadie escuchó.
Cuando el silencio creció, cuando el silencio fue excesivo, cuando el silencio fue escuchado, cuando el silencio creció.
__¡Al bajar el cielo a la tierra, ___donde nadie estuvo atento!. Siendo así, investidos tres veces, ignorados uno a uno.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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COMO ENDURECIDO SEÑUELO...
Entre mi sueño en la almohada, y rompa, el dormir de los silencios guardados, y el cofre olvidado por la fuerza, y rompa, el tiempo de aquel sitio perdido, derramado por el aire respirado, y rompa, el sonoro movimiento de los astros, vistos por el mísero lamento de la tierra. Pues al duelo duele ignorársele, ignorársele rápido, ignorársele muy fuerte.
Como endurecido señuelo. Que no con grande esfuerzo en el monólogo, se callan las ausencias escapando, y lloviéndonos pestañas de rodillas, sin zapatos, sin caminos, sin aliento. Solo sombras de las noches escondidas. Solo luces de los soles extinguidos. Solo mapas de las nubes nuevas.
¡Qué nada recuerdan de lo que yo he olvidado!.
Y en poco cielo de fuego sienten la nieve fría. Como esta almohada dormida, que ahora despierta mis sueños, y teje las pesadillas bajo el cielo.Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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ODA AL SIGLO
En El Siglo tejedor nacen los años hojas calendarios en el bosque sangrando los años rotos gotas desiertas pajas invisibles que fecundan muriendo los suspiros de pobreza de latidos obscuros en su raíz sin que cambien los trozos de otoño en algún sitio de luna hirviente por la sombra que suena que vaga de nube a nube las campanas cayendo entre los ríos espinas, de carne salpicando el granito encendiendo periódicas guerras delirando monedas del camaleón en la bandera salvaje...
No del cielo para ellos son años inclementes años inventados sin memoria entre los hombres los muertos del alma del aroma agua desnuda nacida en la arena tejiendo meses con años mesas con hambre casas sin hogares vidriosas enlagrimadas en la tierra sin derecho sin seguro en el siglo flor del tiempo perdida la memoria con toda la voluntad año tras año que naciere ciego a la evidencia del calendario.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Líquido Temblar
Por el sudor devorado en las noches, deshojan lunas el mundo vacilante, en los dientes de nieve despedida, del perfil dónde siembra el mandril, copas del torso ardiente despacio, en el declive abandonado del tigre, un elefante ansioso planta mariposas, en la penumbra batiendo alfombras, en la espina bordando cristales.
¡Oh!.Líquido.¡Oportuno!.¡Ah!
Porque a veces comen los platos helados, las cenizas de las manos una rama caliente, con el pulpo bajar del muslo a la mirada, en los labios humedades fijando dulzores, por las arpas del fulgor del mástil firme, del puro ramaje gimiendo laureles cerezas, de la espiga punzante temblando espumosa, las sábanas de la sed inundada del perfume, en la fiebre de las gacelas sin sueños.
¡Ah!.La fortaleza inspira.¡Oh!
De la dicha párpados límpidos, aquietando el algodón resonante, ávido antes de erguido al cierre, de las puertas al ritmo bailable, por la noche del nogal sonriente, hablando del dátil turgente la esquina, siente la cabeza el tibio vaivén miel, de la entrada el roble doblando lunas, cada lábil sueño de manos despiertas.
¡Oh,sí!.Más trepidante que trémulo.¡Sí,oh!.
Del espasmo ardiente del durazno, al vapor del aliento alumbrar, el fondo de la piedra alegre, donde la mirada gime de ganas, al dormir burlón del mármol, rosado recuerda el reloj parado, al impulso en rayo de luna, por todo el interior de la fragua, y del acometer fosfóreo celeste.
¡Líquido, líquido!. ¡Oh, sí, ah!
Con la humedad de la selva delante desnuda, entre el momento que vibra cercano ligero, quedando del brillo triunfante anhelando, la nítida fuente profunda silente bordando, y estando quedando la noche en su sitio, y guardada la luna meciendo su cama descansa, por los vuelos de la seda del torrente tibio, dónde el tiempo inolvidable se atrapa fácil, en el próspero temblar afortunado líquido afán.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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CON EL CORAZÓN
Con el corazón plenos norte y sur están inquietos, sin el conocimiento, que no se atreve, a tenerles rencor en las limpias aguas, del otoño, en el lago, donde la luna es más blanca, del verano, en el río, donde el sol es amarillento, del invierno, sin nieve, donde el hielo le llora. Con el corazón
Como el mar, en su flauta de viajero, refleja, insondable en su brillo de suspiro, regresa.
Así es el amor, el fuego, el viento, de color idéntico, infinito, el cielo, el aliento, de sabor idéntico.
Helo aquí, alcanzado, profundamente entremezclado de pureza, en la verdad, del honor, humilde, soledad, amistosa.
Y una vez divina paz, alfileres de oro, jade musical, quietud, joyas preciosas, raras bellezas, sonrisa que vuela y no quiere ser misterio, sonrisa que sueña y si quiere ser, presencia vista. Y una vez divina paz. Una vez, divina paz.
Mas, ayer, menos, mañana, en el hoy profundo. ¡Otra vez qué vuelve, y se queda, otra vez!. Sin el mundo, el tiempo, el espacio, el hombre. Sin sufrimiento, ni el cielo ni la tierra.
Hacia un mañana donde pasado y futuro sean, simultáneos, y el tiempo y espacio uno solo, y la humanidad sea tan divina como su creador en todo lugar y sitio de la voluntad eterna.
Con El Corazón...Sin él, ó, a pesar de él.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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