Poemas de amor :  MUSA ENAMORADA
Cada vez que te veo,
estas en mis sueños,
en mi mente,
en mi vida.

Te observo cada luna llena,
te veo en mis memorias,
cada segundo pasa,
para seguir observándote.

Musa de la luna llena,
mi fiel sirena,
mi cómplice de tus locuras,
eres la ninfa de mis sueños.

Cada vez que te sueño,
cada momento que quiero estar a tu lado,
no dejo de pensar en ti,
me tienes atado a tus encantos.

Erick. R. R Torres
(Angel Negro)
Poeta

Poemas :  LAGRIMAS DE SIRENA
Pobre y desolada sirena,
Quedaste sola,
Siento lástima por ti,
Al ver tus lágrimas de sirena.

Fue algo que hicieron,
Fue algo que lastimó tu corazón,
Por eso lloras,
Quiero estar a tu lado,
Quiero protegerte,
Quiero cuidarte cuando estés enferma.

Bella sirena,
Fuiste abandonada,
Te hicieron daño,
Siento lástima por ti,
Al ver tus lágrimas de sirena.

Lágrimas de sirena,
Lágrimas de dolor,
Has sufrido sirena mía,
Has sufrido cruelmente,
Deja que te cuide,
Deja que te de consuelo,
Aliviaré tu corazón herido,
Aliviaré tus cicatrices.


Deja de llorar,
Deja que te ayude,
No te preocupes,
No te haré daño,
Todo estará bien,
Estaré a tu lado.

Erick R. R. Torres
(Angel Negro)
Poeta

Poemas de amor :  EN BUSCA DEL CORAZÓN PERDIDO
Oscuro es el horizonte,
se acercan a mí,
y la magia será mi clave,
voy a viajar a través de la puerta,
ser el descubridor de mi destino.

Desiertos siniestros,
abismos infernales,
nada me detendra,
nada impedira cumplir mi destino.

La luna es mi guia y refugio,
es mi cobijo la noche misma,
me refugio en su morada,
hasta llegar al alba.

El tiempo sigue su curso,
seguire mi camino,
hasta encontrar al amor de mi vida,
a mi noble musa y amada sirena.

Erick R. R. Torres
(Angel Negro)
Poeta

Poemas góticos :  EL CANTO DE LA SIRENA NEGRA
El canto de una sirena,
me tiene paralizado,
es un bello encanto,
que me atrae a tu belleza siniestra.

Sirena negra,
mujer seductora,
ninfa silenciosa,
eres mi inspiración.

Canción prohibida,
melodía tentadora,
tu cuerpo me seduce,
tus labios me matan.

Serás mi inspiración,
eres mi bendición,
eres mi tentación,
eres todo para mi,
bella sirena negra.

Erick R. Torres
(Ángel Negro)
Poeta

Poemas surrealistas :  Mundo del pasado
Mundo del pasado

...Hoy pretérito...
Mi mundo se ha ido.
¡Sangre seca!.
Por el tiempo hueco. ¡Aliento helado!.
Conmigo voz y carne. ¡Abatido lirio!.
Niño del terror. ¡Manto ceniza!.
Licor mordido sin futuro.


...Hoy perdido...
Mi mundo ya no existe.
Fue nube equivocada.
¡Mi mundo murió sin mí!.
Soy espada sin punta. Sin filo.
¡Solo tejo paja!.
Ruina del ayer mutilado.
¡Sólo polvo de esqueletos!.
Pretérito perdido.
Mi mundo es.
Madrugada neutra y muda.
Tarde de látigo y sirena.
Vidrio de ataúd y agonía.
¡Hijo del olvido!. ¡Vidrio amargo!.
Amargos ayeres, presentes secos.

Del olvido y la amargura.
Hoy perdido entre pretéritos.
Mi mundo
se marchitó.
¡En fragmentos de muerta fe!.
¡En pedazos
de oraciones vanas!.
¡Mi mundo se fue por siempre!.
¿Hasta cuándo?... ¿Hasta cuándo?.
Hoy estarás perdido en tu
pretérito.

Mundo,
mundo del pasado.
Hueco ha quedado todo.
Todo
vacío de mundo.
Huecos de vacíos.
Atrapados.
¡Ahoras!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de naturaleza :  Romance marino
ROMANCE MARINO

Caminaste, sirena, por mi alcoba,
con pies de plata, curvilínea y sobria.
No había en tus párpados artificios,
cubrían tus pechos púdicas gracilarias.
frente a mujeres de voluptuoso talle
traías la ventaja del silencio.

Posaste para mí tu desnudez exclusiva.
Aspiré tu aura de corales,
intenté retener tus ojos milenarios.
No pude tocarte,
apenas si musité cuatro requiebros.
La seducción fue mental:
por tus pestañas vibraba el clímax
de un acuoso hemisferio violentado.

Te deseé sin tapujos.
Con escalofríos te pensé a mis anchas,
quise fertilizar tu vientre de pez, mutar hacia tus misterios polares,
ser concubino de esos senos formales.

Busqué la Atlántida hasta aprender tu idioma.
Me habló de espumas y garcias
tu blonda imagen.
Te quejaste nostálgica del acero,
desatino de torpe ribereño.

Posabas para mí tu desnudez exclusiva,
me permitías memorizar cada milímetro,
pero, al fin y al cabo, humano,
busqué de prisa mi cámara fotográfica
para archivar en mi vanidoteca
la conquista del siglo…
Se escurrió en un instante el mito.
Volviste presurosa a la musicalidad ahogada
de un caracol marino.

Entonces, el mar, celoso,
con su bofetada fría y su resaca
se llevó mis sueños y mi soberbia machista.
Las carcajadas mundanas anunciaron
que, disgustada, te habías llevado
mi pantalón de baño.
Poeta