Poemas :  Futuro
Estou desperdiçando energias...
Estou estraçalhando sinfonias,
tal e qual um musico desafinado.

E o passado
(sombra que manipula o presente)
pula a barreira do tempo
e, de repente,
os erros nos entristecem...

Às vezes deixa
uma coragem no presente,
e uma interrogação
no futuro:

O que estará escrito
na palma da minha mão?

A.J. Cardiais
18.11.1983
Poeta

Poemas surrealistas :  En la noche verde...
En la noche verde...

Me soñé soñándome desayunando noche,
agria risa que descendía de la nube espinas,
del placer de las campanas sordas grises,
y el grito amarillo y ligero de las cavernas.

¡Dormí, siglos en pedazos, distintos al ojo,
rojo, el aliento al esconderse de los bosques,
débil sabiendo que los lagos lamen secos,
los ecos ahogados por alfileres desnudos!.

¡Creí añejar las delirantes montañas,
en las alas de los barriles de polvo!
¡Sinfonías de lágrimas bajo la tierra,
y la sangre de las estrellas en el río!.

Ya nadie sueña en los relámpagos violetas,
de tigres, humo lloviendo como voces,
sobre la vertical de los años mudos,
vistiendo las tinieblas de manchas blancas.

Hubiera preferido devorar las brasas,
como peces de maderas embriagantes,
el ácido quemar de las ausencias sin fondo,
seguir las mariposas decorando la tristeza.

Pero lloví demasiado en el pasado algodones,
inermes las plumas furiosas de paja indefensa,
en mis necias pesadillas de plástico emplomado,
y acerando el huracán de los frenéticos gusanos.

Tal vez, la noche joven la red enrojecida arruye,
el palpitar de la ceniza en el pálido sollozo,
que lleva los moluscos al desayuno de las tardes,
por las albas del verde amargo atardecer perdido.

Dicen que las serpientes hablan rectas dulces,
en medio de los vidrios sembrando ebriedades,
ocultándose las rodillas con el festín del fango,
por el que se disipa la memoria del resto frágil.

Soñé que me soñaba la sangre seco y nocturno,
en el verde de esa noche que la llave abría,
los hoyos sin cesar de escoltar al éter frágil,
en los dedos de las sillas hecho olvido.

¿Habré sido acaso el sueño atroz de un año,
del ocaso desprendido del futuro suelto y roto,
o los huesos del aliento perdido en la camiseta,
del polvo que estalló en una lágrima humillada?.

Nada sé ahora del aire ciego sordo y mudo,
de piel en el pesado abrigo del servil grupo,
de la carne seca de los botones indiscreto,
del festín en donde todo es cruel abuso llano.

Porque en la noche el rumor se acuesta casto,
volviéndose verde vértigo vasallo vilipendioso,
donde me dicen me sueñan por horas los gatos,
verde joven verde coraje verde noche verde.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Por el acantilado fantasmal
POR EL ACANTILADO FANTASMAL

Suspiros extendían al viento sinfonías,
porqué me fui haciendo destino,
destejiendo los otoños de una hoja,
en la hora del invierno fuera,
de la blanca noche de la nieve,
en las flores del vaivén desventuradas.

Ilusionado clamo candoroso de la joya,
ramas de sol astillas de luna,
cánticos de estrellas y recuerdos,
en el himno enamorado de los sueños.
¡Qué tiernos se borran y deshacen!.
En el vuelo de una almohada adormilada.

Cristalino exclamo temeroso de la espera,
hecha del delirio de un suspiro,
con el idioma de un latido luminoso,
en la fuente palpitante del instante,
eco entre la luz enmudecida,
humedecida mariposa que calla lento.

En éstas que te escribo, páginas doradas.
¡Qué se adhieren al olmo herido!.
¡Qué marcan las ventanas impaciente!.
Incandescente del sonoro color frío,
están las violetas de vírgenes alas,
con la tempestad que se marchita.

Por aquéllos que dibujó, mieles paisajes,
con el alba perfumada de murmullos,
que pintaron al agua con sed amantes,
sedas sanguíneas del alma sanas,
latidos detenían al pecho enamorado.
¡Del hambre cándida del infinito ilusionados!.

Por
Ser
El
Acantilado
Fantasmal
Acantilado.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Melodioso
MELODIOSO

Voy
Tocando
Sinfonías
En pinturas.
Lejanas cuerdas.
Las nieves blandas.
Entre los otoños primaverales.

Al encuentro de los versos esculpidos.
En la música de mariposas y escorpiones.
En el mismo corazón de una sonrisa.

Me
Lo
Dioso.
Caía como el mar.
Entre los párpados.
¡Al soñar líquido!.
¡Al cristal enamorado del vitral!.
¡Almendrado del cárdeno destino!.
Me
Lo
Dioso.


Amar al último mar herido.
Al horizonte clavado bajo.
Entre las espumas indecisas.
¡Qué la madera hace de acero!.
Tangible.
Moldear.
Del

tiempo, las campanas pensativas.
Del pentagrama sepultando la seca senda.


Melodioso, sí, así como también en el fondo, lo eres, me lo dices, al escucharlo del trueno,del infinito silencio del allá agridulce. En una noche perdida.
¡Encendiendo las estrellas!. Y una luna instantánea.


Voy, me dices, casi humano.
En la efervescencia de un edredón.
Redecorando sueños por venir, elaborando perlas.
¡Más allá de las conchas, en el alma del aliento!.

¡En la obscuridad qué fosforece!.

Como...
Pintando melodías al viento.
Estando.
Cincelando tintas, las palabras dúctiles.
En

La música atravesada por la luz.
Rodeándome.
Marejadas, glaciaciones y volcánicos latidos.

De mariposa y escorpión. ¡Silencio!.


El mal parece miel, y el odio el dios oso.
¡Melodía mortal del silencio involuntario!.
Cuando... Melodioso. Es el subsuelo olvidado.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas surrealistas :  Apesadillado
Apesadillado

Una vez volví del futuro,
debajo de una mañana,
iba y dejaba mil soles, mil muertes, mil vidas,
yo cargando solo desconocidos rostros,
por los dedos de cien estrellas,
la luna en el espejo,
como una pedregosa carretera,
iluminaba mínimos cometas,
cuando
espada en mano, nacía solo mi niebla,
y llegó
al cielo solitario
el Rey del soplo extraño,
en su carroza, sol del siempre y del nunca.
¡Me vendo!. Obscurecían deslumbrantes sinfonías, diciendo.

Antes del original principio,
antes del honor mausoleo,
antes regio de cualquier mañana.

La luz te vendo,
la misma risa.

Pero...
A la vida monstruosa suplica,
azules venas vanas, porqué así, así deber ser.


Y
Así cadavérica quedó,
la consciencia del barro barato, del aliento ajeno, del hoyo.
Nada gime,
igual,
y...
Grité...
¡Silencio, silencio, calla por piedad!.

Y en la cercana lejanía,
el Rey sol cogió de la mano nubes atormentadas
y me dijo: "Escucha, luz hay en la ceniza, luz de noche congelada "
y el astro con sus estertores mortales, volvió renacido fuego.


Pero sólo había enmedallado la negra noche del inconsciente humano,
de nada lleno, ni pleno, al ritmo del quinqué desahijado deshojando auroras,
de nada le valió todo celeste centelleo, de la frágil y temblorosa razón,
y su poderío yace mezclado dentro del vientre de la moneda sangrando,
y se volvió,
sin mí, sin rostro, ni rastro, mi muerte, tu vida.

Como
cualquier pesadilla
en su carroza.

Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  El tiempo vergel
EL TIEMPO VERGEL

Desprendiéndose longevos los jardines.
Del prematuro latido.
Terciopelo.
Esperan los amados mágicos deleites.
Los terrones azucarados ciervos.
Suaves.
Flechas.
Celestes horizontales.

¡Tiempo, tiempo, solo tiempo!.
Vergel, tan vergel como nunca.
El tiempo vergel, vergel.

En los labios acordes liras.
En los pechos vaivenes alternos.
Con alabanzas enigmáticas sublimes.
Con esplendentes trinos amarillos.

¡Vergel vergel, el tiempo vergel!.

Amores hermosos incendios.
Escultóricas sinfonías en tropeles.
¡Colindantes febriles espacios!.
¡Simbióticos y telúricos!.
Diamantes longevos jardines.
Triunfales.
Partículas.
¡Latiendo, latiendo, vergeles!.

Y las orillas del tiempo.
¡Contemplando!.
Madurando pétalos sueños.
¡Melancólicas batallas inmortales!.
Polen cáliz
Y
Tallos. ¡Ásperos!.

¡Vergeles, vergeles, los tiempos!.
Tiempos del vergel del tiempo.
El
Tiempo
¡Vergel de vergeles!.

En las conchas flexibles.
Una tarde.
Una vez, híbridos destinos fundidos.
¡El tiempo se detuvo diamantino!.
De pasión. Participante.
¡Conmocionado!.
Al ver los terrones.
Mágicos. ¡Deleites!.

En
Los
Jardines
Las flores longevas.
En el tiempo vergel de las flores.
En su tiempo, en otro tiempo.
Vergel del tiempo de los tiempos.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta