PACÍFICO ATLÁNTICO
No velas en los barcos.
Las lunas, los domingos.
Cada semana... Semilla.
Un mes, una milla... ¡No nudos desnudos!.
No veles las flamas.
Velando los rostros.
Las caras son risas.
¡Son cantos, sonatas, sinfonías!.
No flamas en velas sin barcos.
¡Novelas!.
Del mar, ballenas, delfines.
¡Principios submarinos!.
En el mar tez de pescado.
De verduras baratas y gatos.
¡Qué quita un jarabe por el aire!.
Una vez.
Cada seis horas cucharadas.
O gotas de lluvia, trenzada.
En el bosque.
Mudo el mar, tez de miércoles.
Y lechugas.
No velas, ni flama.
El gas inflamado. ¡Ceniza, cenizo!.
Ceniza, ceniza, ceniza.
La bandera como la paz de novela.
Bandera
Como
La
Paz
De... No vela... No barco.
Ni en la paz de lengua. ¡Paloma!.
Blancasi no, fuera gris en el mar.
Atlántico, pico, pacífico. ¡Solo muerto!.
Candado, el dado cadenear cualquier barco.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez