Los dorados días
Los días corrían vestidos de sueños dorados
Por las máscaras de largos vientos musicales
Por las floreadas auroras de cada semana
Los días seguían de prisma prisa vestidos.
Los
Dorados
Días
Las horas cazadoras en la sombra del amor
Perecedero fuego desnudo desierto de pureza
La belleza de laureles invisibles ama
Perecer en un inmenso latir eterno siempre.
Los
Dorados
Días
El alma blanca luz qué se desgrana
La piel inmaterial del alma blanca
El piadoso palpitar diamantino pleno
La rizada pintura partitura del amor.
Los
Dorados
Días
Una vez ardor efímero y perfecto
Otra vez dolor prolongado y volátil
Nada pierde chispa fantasmal aspecto
Todo gana pleno de conciencia suave.
Los
Dorados
Días
Clara luce la luminosa tarde
Vestidos de sueños dorados días
Los latidos laureles partituras
La tarde clara luce luminosa.
Los dorados días
Los días de prisa vestidos
De prisma seguían vestidos
Las máscaras desnudándose
¡De conciencia suave y plena!
Los dorados días
Días dorados
Amor de amores
Floreando aurora
¡Amor de amores!
Los dorados días
Corrían, corrían, corrían.
Los días
¡Corrían dorados!
Los dorados días.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez