Poemas :  Eco Introyectado
Eco Introyectado

Porqué mentiré con mi máscara de viento,
al corazón del mar en ésa estatua,
equilibrista del fuego sin remedio,
sin el título de ciego por el tiempo,
con la venda de relojes en la espalda.

Eco, eco, eco...
Más allá de los recuerdos inventados,
en los lirios fantasmales asustados,
en la obscuridad bañándose de sol,
en la esquina temerosa de los ojos.

Por la piel de otros ecos amarillentos,
sembrando sueños en las tormentas.
¡Porqué el eco de la prisa, la sonrisa, eriza!.
Al silencio perplejo, perdulario, perdurable,
en la raíz del insomnio de un cráter craso.

Eco, eco, eco...
Tejiendo espejos a una espina,
en el metal sudoroso de los perros,
en el sonido rojo de la espuma,
en el córneo coro corcovado.

Arrastrando grutas en las hojas,
del cristal que trepa al tren entrelazado,
en el vagón que oculta los instantes.
¡Del humo brillante, de la espiral filosa!.
Por matar con la mentira las verdades indefensas.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Arraigada nitidez... (Experimental)
ARRAIGADA NITIDEZ

Con la memoria,
paternal.
De la madera.
Creían atarse cien sentimientos.
Azulados desnudares alentados.
En
Aquéllo
Qué
Húmedo el nogal observa.
Por el aliento.
Claveles rosados,
en la piel verter,
después del alma,
jadeantes.
Del después...¡Quién sabe!.

Entre
La sombra carcomida en mansedumbre.
Pechos y latidos.
¡Relámpagos!.
Del agua.
Entretejidos.
La lumbre que al llorar pudre.
Agua y fuego.
En la barba de los lirios.
Creían atarse.
Lo que fueron.

Campos florecidos, simultáneos amoldares.
Atónita la frente, estelares las rodillas.

¡Escriben en criptas en copto,
copos granates y tabacos despreciados,
al rumor amenazando!.

Arraigada nitidez.
Las memorias del espejismo aventureras.
Las señales sin patria del alabastro.
¡Sórdidos terciopelos incoloros!.
Al ritmo clandestino.
De los tórridos relojes.
¡Nitidez arraigada!.
En las noches sonámbulas de lunas.
Nitidez.
En las brumas escarpadas del canguro.
Arraigada.
En las blandas arpas del antílope.
Nitidez.
En los nidos sonoros del pino.

Esgrimires.
Del anfibio cañas.
Dulces moviéndose.
¡Más agudas las cicatrices!.
Limpias se ofrecieron.
Al verter.
Después del alma.
Nuevamente.
Sus ritmos.
Naturales animosos alentando.
Por...
La honda superficie de las cúpulas patéticas.
Por...
Las almas ambulantes del arrecife.
Por...
El iris de la sal teñida lágrima.

¡Qué lo fugaz delata inundando!.
Las arterias... Vertiginosas de la espuma.

Al
Romper
El
Viento
Con
Las
Plumas.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta