Grita por el zorzal...
...Gritar, gritar, gritar...
Schreien
Gridare
Crier
¡Cry out!
El grito triturado en bicicletas.
La pelota.
Con la rectitud de las guitarras.
La muñeca.
Con los cereales de las sirenas.
La canoa.
Grita enamorada del cofre.
Como un grito gratis del acrobático colegio.
Dónde...
Hay ecos eclipsados del optimismo.
Ensimismados.
En la integral, kermés del kiosko, gimnasta,
suave y profundo trapezoide.
Evaporado.
Cuando estalló de labios la palabra desmayada, exigente, exigua.
Y nunca tuvo, lo que hubo confesando, persuasiva, mas sonrisas,
más atomizadas, profusión de profesiones,
ni hubo nunca más ya basta,
en el vuelo,
en el velo,
en la vela,
acerada...¡La sonrisa por el buque!.
Siendo sombra, siembra de otras sombras.
Siendo infértil la baraja cicatriz del cesto.
Siendo artificial la pausa solución sombría,
en la yesca,
en la yema,
en la yarda al zarpar la zarza,
el zumo del zoquete.Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez