Poemas de reflexíon :  Nada hay que festejar
Nos acaban de dejar
en la más plena desgracia
el país sin democracia
nos acaban de alejar
del orden, ¿qué festejar
este día de independencia?
si cruelmente, sin clemencia,
la patria fue secuestrada
la nación fue avasallada
por la tirana indecencia.

Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Ciudad de México, a 15 de septiembre del 2024
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
Poeta

Poemas de reflexíon :  A Gertrudis Bocanegra
“La luz de una época negra.”

México forjó cimientos,
Pátzcuaro, mil setecientos
sesenta y cinco, cierto año,
once de abril ya de antaño.

Nació insigne soñadora
María Gertrudis Teodora
Bocanegra Lazo Mendoza,
digna heroína, una Diosa.

Época de oscurantismo
que nos llevó hasta el abismo
aquella del Virreinato,
de recuerdo tan ingrato.

No obstante estar impedida,
por costumbre mal habida
de prohibir el desarrollo
a mujeres, cero apoyo.

Ella estudió, sin recato,
aprendiendo cada dato
de la Ilustración, lectora
como toda gran Señora.

La historia jamás nos miente
respecto a tal insurgente,
precursora feminista,
pionera nacionalista.

Católica luminaria
socialmente visionaria
de su futura Nación,
ansias de emancipación.

De rancia España indecente
transmitidas a la gente,
como espiritual remanso
su lucha fue sin descanso.

Prócer de la independencia
muy rebelde, por esencia,
sembró tenaz su semilla,
formo parte en la guerrilla.

Lideresa siempre hermana
que, de forma vil, insana,
fue sometida a tortura
y no perdió la cordura.

Ni sus grandes ideales
todos ellos señoriales
de libertad, de igualdad,
de paz, de fraternidad.

Valiente a carta cabal,
sufriendo juicio formal
no traicionó el movimiento,
su fusilamiento cruento.

La patria entera celebra
a Gertrudis Bocanegra,
distinguidísima dama
para orgullo michoacana.

Pónganse de pie señores
debemos rendirle honores,
con adalid tan fraterna
estamos en deuda eterna.

Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Ciudad de México, a 11 de abril del 2019
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
Poeta

Poemas de reflexíon :  La muerte del gran Morelos
“Si yo tuviera un Morelos conquistaría hasta los cielos.”

En mil ochocientos quince
la patria sufrió un esguince,
día veintidós de diciembre
en la memoria se siembre.

La muerte del gran Morelos
que, entregado a sus anhelos,
nos brindó su corazón
cual “Siervo de la Nación”.

Primero lo excomulgaron
de su Dios lo despojaron,
la cruel Santa Inquisición
dejó “torcido un renglón”.

Lo que tanto se temía
se le acusó de herejía
en público degradado
se sintió muy desgraciado.

Mas, fue fiel a sus valores
rindámosle mil honores;
después de un juicio sumario
enemigo, victimario.

Calleja dictó sentencia
con maldad e irreverencia,
Salazar el confesor,
De la Concha ejecutor.

Redoblar de los tambores
en Ecatepec tremores,
vendados fueron sus ojos
lágrimas, mustios abrojos.

Lo inmolaron a mansalva
hincado, dando la espalda
al pelotón de soldados
con fusiles pertrechados.

Fieras descargas sonaron
las balas lo saturaron,
metralla tronó horrorosa,
cara en tierra pedregosa.

Se hizo presente la muerte
dejando aquel cuerpo inerte
al crucifijo aferrado
teñido en rojo sangrado.

Triste quedó el paredón,
¿cuándo llegará el perdón?,
¡qué lamento, qué tragedia,
almas llenas de miseria!

La Nación en la penumbra
sus sentimientos no alumbran
martirio del insurgente
cimbró todo el Continente.

Lo digo sin ser insano,
¿tal calvario ha sido en vano?,
¿dónde quedaron los planes
de Morelos sus afanes.

Campañas, logros, victorias,
sus ideales, credos, glorias?,
¿a tantos años de su ausencia
qué fue de la independencia?

Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
México, D. F., a 22 de diciembre del 2015
Registro SEP Indautor No. (en trámite)
Poeta

Poemas :  EL OCASO DE UN AMOR PERDIDO
Hermana pequeña,
jugando al escondite,
aunque mamá te dijo que realmente me he ido,
si se olvida de mí,
echa un vistazo a mi diario,
o lee un poema,
el cielo que ilumina la noche.

Un paso mas,
hacia la noche,
mi pequeña hermana,
cuando me fui,
dejé un libro de poemas,
que escribí para ti,
y otro para mi amada doncella.

Voy a decir esto una vez:
la luz de la noche
los polvos de estrellas,
cuando duele por dentro.

Lee todas las indicaciones,
sigue adelante,
está bien sentirse adolorida,
y sólo recuerda,
que nada está hecho para durar,

Sé que estás triste,
que también pasará,
aunque ya no esté aquí,
estaré en los brazos,
de mi amada fiel prometida.

Erick R. R. Torres
(Ángel Negro)
Poeta