Lluviosa brevedad
Y
La
Lluvia
Encontró
Vacía, el jardín.
Tejiendo
Flores
En
Las
Casas
Un pañuelo al viento
Un anhelo gris
Sombrilla
Fresca y saludable la tarde.
La
Lluvia
Milenaria.
¡Del patio bajo vientre al atrio!.
Como
A
Lo
Mejor
Son
Las
Cosas
En su brevedad,
en la lúcida abulia superpuesta.
¡De cuatro libros angustiados!.
Después de flotar húmeda,
la ronca voz de la distancia.
El delgado mar sacudido,
En la horfandad enervante.
¡Edredón!.
Enredado al carmesí insinuante.
Alfombra
Pobre
Al
Dueño.
¡Acostumbrado al desembarco!.
¡Arrastrando al fondo!.
Tímido y agrietado,
el jardín lloviendo casas.
¡Pañuelos saludables de la tarde!.
Un.
Anhelo.
Bajo.
¡Lúcida brevedad, vacío asombrado!.
Lluviosa al desesperanzarse.
Lluviosa, a ser, momentánea.
¡Parte!... Parte de la vida.
¡Enlutado atuendo, diario, de años!.
¡Breve y terreno!. Pasajera porción somos,
y seremos, transitorio lote, lo que a veces se puede destorcer, lo que no se menosprecia, lo que desgarra enmarañado... ¡Breve y terreno!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez