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No es producto del alcohol esta dulce borrachera ni la resaca postrera, no fue whisky ni zotol, Baco no ejerció su rol, fue el elíxir de tus besos el que ha embriagado mis sesos alterando seis sentidos con temblores desmedidos que me hacen sufrir tropiezos.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Ciudad de México, a 27 de febrero del 2024 Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
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Poeta
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Escrevo como um louco, procurando uma razão de existir; buscando um elixir para beber um pouco.
Escrevo com o desapego de querer ser escritor. Como quem carrega um andor, escrevo para ter sossego.
As ideias me torturam e, ao mesmo tempo, me ninam. Às vezes, para me atrair, rimam.
Então prendo-as no papel, para que elas descubram o caminho do inferno ou do céu.
A.J. Cardiais 27.12.2016
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Poeta
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O que há de vir, virá. Como a noite vem escura, como esta moldura que acabo de exibir...
Como o elixir que serve pra loucura, como a candura de um poderoso sorrir...
Tudo de bom há de vir, se você deixar.
Tem tudo de bom no ar... Mas tem também tudo de pior que há.
A.J. Cardiais 28.02.2010
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Poeta
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O poeta escancara a imaginação, sem medo que a emoção possa entrar, e a razão resolva sair.
O poeta quer um elixir para rejuvenescer a palavra em sua mente escrava.
A.J. Cardiais imagem: google
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Poeta
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ACOLIBRADA ESGRIMA
Arte Justo Como gema. ¡Vuelo y pluma!. Al florete y mandoble. Por el vivir genuino, punta y contrafilo. Del zafírico Colibrí en lucha. ¡Más y más estoque qué espadín!. Entre vegetal gemal esperanza. ¡Más allá de cimitarra!. En El Jardín Hace Su esgrima.
El Colibrí Encarnado Humanizado. ¡Sin ser geométrico ni gemebundo!. Sable blando y noble justiciero. Combate. Dulce Suave Vuelo.
¡La espada perenne del colibrí!.
Del Lomo Al filo. En la montura. ¡Florea gemífero!. Del arte encarnado. Alfanje, tallo y polen. Del pétalo y pistilo, capullo en libertad. Afilado el vuelo. Esgrimiéndose. Falible siendo.
Es... Planta vivaz el aire bajo su vuelo. ¡Vaina boquilla y anillos!. Escribiendo, lustros brilla. Y no es, espada de ceñir. En el ápice del tiempo. En tanto montante. ¡Aún carnoso!. El colibrí zafiro es.
En la esgrima. Arte y vuelo. Pluma y ave. Espadachín hasta con el alma lucha.
Sí. Sí se puede. Con el arte puro. En la esencia y la existencia. ¡Deshacerse de la pluma!. Y ser. ¡Vuelo solo!. El vuelo mismo, de la libertad elixir, justamente.
Se puede, sí. Sí con el arte, se combaten las cadenas crueles. Y se puede con este arte, desligarse de ataduras.
¡Sensual, deseo y apego a la materia!. Desligarse puede. Con el arte, esgrimiendo el colibrí.
¡Interior!
Desligarse Puede Con El Arte. ¡De las concepciones, limitadas, erróneas, ignorantes!. En lo más profundo. Del abuso agusanado Del fuerte sobrel débil. Del rico sobrel pobre. Del grande sobrel chico.
Se puede deshacer. ¡Entre esgrima un colibrí!. ___Azul cielo mar y tierra___ Cultivándose Un Jardín En El Propio corazón solar del firmamento. Corazón dorado, girasol, del alma humana.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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LICOR DE DURAZNO
Al beber la purpúrea mano blanda. Al sueño inspira suave. En las alturas amorosas. ¡Quejas!... Las caricias del pecho llamas. En las delicias justos bienes. Con lindas alas diestras. Aguardando al sueño. ¡Qué vuela, benigno, tantas veces!. No siempre, continente. La sacudida, inspira. El brillo, bañando, un lecho.
Con raudales, bálsamos y ungüentos. De la piel debajo, un instante. Del aliento la voz acierta. ¡Al corazón qué se derrite!.
Tan verde, campanear en las campiñas. ¡Cuándo las horas, pasan, evaporadas!. Y...La...Memoria ardía. ¡Estimulando!. La graciosa copa. ¡Del árbol, en copos blandiendo!. La espada rosa. ¡Vestido, qué despierto, soñaba!. Al bosque acariciando fresco. Joven, brisa, las olas fugitivas. ¡Qué la espuma mece!...En cada burbuja. La mano blanda y dulce.
Licor, licor, licor de durazno.
Dulce y blanda, la mano. Mece sueños. Al durazno. Licor y elixir. Huerto. ¡Vivo!. Dentro. ¡Sobre humedecido huerto.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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LA VÍA ONIROIDE
Abajo del sueño de límites dorados. Adelante del mundo de cielos prometidos. Adentro del desnudo de mil ventanas. Afuera del desfiladero de arañas tibias. Arriba del viaje de silencios diminutos. Atrás del mundo de huesos dichosos.
La Vía Oniroide. La vía, la vía.
¡Oh, cómo hemos sobrevivido!. ¡Hay, hay. Cientos de guantes de goma!. Y la luna resiste. Y resiste a los corazones negros, negros. Y los humanos hechos añicos. ¡Oh, hermanos me duelen las raíces!.
¡Tanto han cambiado, olvidando mares y cadenas!.
Cerca del girasol y las leyendas de algodón. Debajo del amarillo y los aleluyas asesinos. Delante de infinitas manzanas enroscadas. Dentro escucha el mundo toda la derrota. Detrás encarnado el espíritu perece. Cerca del helado ambiente y mil amenes.
¡Olvidando mares y cadenas, han cambiado tanto!.
¡Quizá el aire ha perdido sus vestidos!. Será un tal vez delante de los niños. ¡Tarde ruedan los rumores espinosos!. Enseguida de cien licores y elefantes. ¡Puede ser una cadera sedienta y prisionera!. Puede ser, puede ser. ¡Cualquier cosa!.
Oniroide la vía, la vida, era vida vida, hoy ni vía.
Tomémonos el corazón. En cada dedo, aunque sea un instante. En la esencia de un elixir. En todas las arterias compartidas. Floreciendo cualquier pétalo en mil rocíos. ¡En la mina láctea en fiesta!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Amor primordial
La llama exhausta círculo interno y externo. Es en el todo un mismo verdad y secreto. Sin inquietud... Sin Disgusto. Una lámpara, un anhelo libre. Un allá de tristeza derrotada. Al final de la partida desprendido.
La vida sin nuevos deseos. Sin nuevos egoísmos. Con un párrafo sin estrofa escondida. Era la idea y la persona. Con aquél que ya no existe. Un exhausto círculo.
Círculo posesión y dispersión. Círculo dispersión posesiva. Amor...Amor de realidad en soledad. Soledad terrena y celeste. Brillo de referencia y coincidencia. Con un...Un sin embargo. Y sin embargo se abalanza El equilibrio de supremo gozo. Gota a gota y a grandes tragos. Todo depende...Todo depende. Amor de límites, de causa infalible. Amor de extremos y atributos. La llama original de imposibles fallas. Y detalles inaplicables al jamás. Un todo mismo en sí mismo. Lo mismo, misma mismidad. Siempre siempre ciclo continuo. Un perpetuo cambio, inmóvil saltando.
El amor completo y perfecto. Lenguaje condensado del origen. Elixir sin principio ni final. El amor. ¡Oh!...El amor que mueve universos. Crea y destruye, preserva y desarrolla...¡Siempre eterno!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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