Poemas infantiles :  La niña que no quiso crecer
Quiero contarles el cuento
de la pequeña mujer
que ya no quiso crecer,
lo digo con sentimiento
es como un triste lamento,
vio a los adultos en riña
en actitud tan dañina
que a Dios elevó sus ruegos
para continuar en juegos
y seguir siendo una niña.

Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Ciudad de México, a 30 de abril del 2024
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
Poeta

Poemas :  A Nakawé...
A Nakawé...

La divina gran abuela Hichol.
Hoy recuerdo.
¡Gran abuela crecimiento!.
Nakawé...Nakawé.
Hoy recuerdo.

Con el escribir del ojo.
Hilos de plata____Caminos del oído.
En el día qué decrece.
Hilo qué se rompe.
Y
Es lo demasiado interiormente.
lo qué se transforma interiormente.

A Nakawé...A Nakawé.

En ese día críptico, de la más remota noche,
de la visión en ruinas, del rasgo absorto.
Abuela crecimiento.
Divina grandiosa.
En la naturaleza.
Con la semilla madre, de la mano, de la cosecha,
parpadeando el agua, sobre fuegos de nubes.
Y
Por el interior abierto del umbral.

De pronto el alma descubre.
Al volátil plomo desnuda.
¡Jungla de collares viajeros!.
Por aquél día.
¡Qué empieza el final haciendo!.
Por aquél día.
¡Inmensa gota con mil océanos dentro!.
De la sangre inocente.
¡De lo intangible y de lo invisible!.
Sepultado___Con___El___Plomo.

Nakawé.
De forma primitiva y pura.
Abuela crecimiento.
Del interior solemne___Recinto solitario.
¡En el mundo____El mal se extiende!.

Mira.
Escucha.
Abuela crecimiento.

Mira, escucha, y como hoy, te recuerdo.
Al entrar en la leyenda.
Y ver.
Bajo la sombra dorada, al sol arrodillado.
En el techo interior al salir del campo.
En el pico de la cólera al galopar del mango.
Y ver.
Sin poder. (Los soles de las noches solitarios).
Luz de obscuridad.
Relámpagos grises.
Sin poder.
¡Ni salvar los amaneceres del eco!.
¡Ni de los poblados el sufrir!.
Sin poder.
¡Ni cambiar todo el dolor fabricado!.
¡Ni el oculto exterminio!.

Nakawé--Nakawé.
Hoy te recuerdo.
Cómo... (Abuela crecimiento grandiosa Huichol).
Cuando el tiempo se perdió entre las noches.
Cómo...
Cuando quitaron garras y colmillos a los guerreros.
Cómo...
Cuando los recuerdos solo duelen.
En
Los hogares desolados.
Indefensos ya mueren, lentamente.

Nakawé
Muchos hay muertos en vida.
Nakawé
Mira, escucha.
Está
Enferma el alma. Y_La consciencia extinta.
Solo.
Mira, escucha.
Ya sólo se ve lo importante.
¡Más allá del cielo!.
En otro sitio.
¡Más allá de las plegarias!.

Estamos.
En el ahuecado vaho.
Estamos.
En la plenitud del tiempo, infame, suspendido.

Nakawé___Nakawé.

Abuela___Crecimiento___Nakawé___¡Espéranos!.
Con la muerte y el renacimiento_ Simultáneos.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de reflexíon :  Magnánimo silencio... (Experimental)
Magnánimo silencio

Por
El
Inédito...Unveröffentlicht, unknown, inédit.
Insólito..Ungewöhnlich, unusual, insolite...
Mag

Ni
Mo...Silencio del fluir hostil.

Un sssilencio por la tierra repartía,
esperanzas de aire, luz y cielo.
A
Las
Pobres
Marionetas del destino embriagadasss.

En el silencio de viejos ataúdes,
inquietantes,
transparentes,
por el día sin sol,
que perdido reposaba,
en la transparencia de la fiel geometría, desconocida,
del espacio curvo, esférico, líquido y vaporoso,
era la transparencia de las divinas memorias,
del sssilencio, enamorado del sonido.

De
La inmóvil luz, azucarada, melodía excepcional.
Del excelso vivir humilde.
Entre la sencillez,
del cielo qué sosegaba cada estrella en su sitio,
el crecimiento de nubes afiladas y nieblas duras,
de las yerbas, adventicias, adversas al invernadero.

Los nichos de la tierra, rezzaban, a donde íbamos,
entre las piedras, escribiendo, unánimes,
bajo la luz, rúbricas retrógradas,
idénticas, al cíclope cuadrumano,
eran piedras, elixir y utopía.

El tiempo desssafío del sauco,
por el minutooo se saciaba,
linóleo de fútiles gránulos,
por el rabo enlocionado.

En el bostezo lleno,
de infinita quietud absorta,
el mundo hastiado se desangra,
sexxxoide mercenario múltiple,
dactilar placer fugazzztt,
vampiro del suspiro,
que se consume,
al mediodía, crispados los papeles,
en las marchitas impresoras,
erotttóxicas y destintadas.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta