Felicidad pseudolumínica
En el lugar, del tremedal vivero, del pantagruélico suspiro de una sonrisa hubiera roto todas los trenes en la central, privilegiada, de los libros endulzados con miel, de repetida reimpresión del aderezo y barricada de vergüenza.
Por que la preceptiva que inmanente habita todo inocente hereje.
Por aquéllo del sistema de las convenciones con los ardientes labios, de la cláusula dolosa desinteresada orgía.
Por estéticos y dominantes que hayan sido los sueños de amantes, desparramados, desperdigados, en la insipidez, fosforescencia, en la separación de una violenta tempestad amor desnudo, paradigmáticos discursos, de lágrimas de tintas enamorada, dónde se mueven siempre los frutos del honor amalgamado, en el terreno de lo provisional y lo mutable.
La consecuencia más perceptible, pasión pasiva, de la distancia en escalones, corrosivo anverso, de ese mágico y brumoso amor , césped, huésped, áspid hasta el límite latidos codiciados de las posibilidades, cardinales, ordinales y del extrañamiento informal enriquecido, del morirse a medias.
Pararrayos Entrerrenglón, Elegíaco y Dionísiaco. Solo Luz....¡Licht, luce, lumiére, light!.
¡Luz imperfecta!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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