VENDAVAL...
Más allá del violín recordaba el arpa,
disgregación pusilánime,
un atigrado bote de hojalata,
separación negligente,
infatigable durante la semana,
la indefensión y el riesgo.
¡Qué recogía de la tarde!
Los momentos.
El mismo vendaval.
¡Desenfrenado del exterminio!.
Primero del cuerpo.
Y luego de cualquier oposición del techo.
Tan suficientes como para perderlos pronto.
En lo pavoroso de miles contra unos cuantos.
Engañados después conviviendo con las balas.
Al rodear la brisa el sudor piadoso.
¿Dónde, y de dónde es este vendaval?.
Es
Del mosquito un pantano pálido.
Es
Del blancor traicionero patio.
Ya será eliminado.
Mientras se cocinan los insecticidas.
Y se cultivan los venenos en las sangres.
Palúdicas con espoleta legitimada por forasteros.
Es
El vendaval. ¡Aval de venda del exterminio!.
Es el amor avecindado, amor oleoso.
De los pobres, acostumbrados al alpiste escuálido.
En la magnanimidad acribillada.
Con el amor oleoso por el subterráneo.
¡Allá demasiado albino en la certeza!.
Con la pasión detonación cementerial.
Pudriendo las mismas aberraciones barnizando,
los lápices, las plumas, la mengua humana clara,
de la frente cordillera desprendida,
en la serenidad curiosa del silencio,
desvalijado irrecuperable por tres.
¡Cuartos del menor antojo crujiendo!.
Todo lo que intermitentes penetran.
¡Disgregando, corrompiendo, barruntando!.
¡Vendaval!.
Aval
De
Venda
Al
Mundo...Exequias, luto, con donaire.
¡Vendaval!.
Aval
De
Venda
Al
Mundo. Cortejo de entierros y velatorios,
con gracia, galanía y majeza. ¡Triunfal engaño!.
Al
Mundo. ¡Ciego o cómplice quién lo sabe nunca!.
Son...
Las fichas rasuradas empacadas.
En las temporadas sin mantequilla.
¡Con todo el través de los abrojos públicos!.
Colgándose del disco muerto frío.
¡De los recios martillazos infusos!.
Abundancia de estulticia.
Sobreproducción de gansada encristalada.
Del
Mismo exterior, engañado o acompañado.
¡Cediendo a la emboscada hervorosa!.
Vendaval.
Del hermano la misma cianodermia avalando.
Al pié de la ventana instalada.
¡La pompa mortecina, el fausto lúgubre!.
[center]Lo mismo putrefacto conmemorando.
El vendaval
Aval
De Venda. ¡Del oprobio escarnio con denuesto!.