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“De morena . . . morenaco.”
Dio su diaria perorata estulta, infeliz, ingrata, siempre pensando en sí mismo Andrés habló del clasismo.
En su tono lento menso, lo contrario de lo intenso, en su lerdo hablar destello se puso la soga al cuello.
Lo traicionó el subconsciente, un naco peje se siente; naco: vulgar significa mal gusto lo identifica.
Sin civismo o urbanidad, indígena sin dignidad, bajo de escasos recursos, jodido, así, sin discursos.
Este aspecto aquí destaco: Amlo confesó ser naco, que los nacos son la moda, en la “chusma” se acomoda.
Él se lo ha ganado a pulso en su monólogo insulso bien “de a pechito” se puso, dio a los vocablos tal uso.
Que no se enojen los chairos, ya miro ardidos a varios, yo no califico a López aunque se den muchos topes.
Él solo, pues, se define cual naco se autodefine, jamás a nadie desmiento se los juro yo no miento.
Se le hace el engrudo bola, Andrés solito se inmola al proclamarse fiel naco debió decir morenaco.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Ciudad de México, a 28 de septiembre del 2022 Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
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Poeta
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AYERESDEMAÑANA
Allí, dónde los recuerdos transitan, las épocas prolíficas, los episodios infames. Entre los vaivenes, apartados. Ayeresdemañana apartados.
Apartados de las olas, las calamidades, sangres personajes de los sonidos, donde chocan enfrentados los infiernos. ¡Hay seres qué vivieron alguna vez!.
Transitando, transitando, los recuerdos, antagónicas las risas y los besos. Épocas de sueños.
Episodios. marginales. Entre los Ayeresdemañana. ¡De pronto, llegando tarde!. Al abrir una mañana, media luna. El día, del blanco ropaje del paisaje, de novelas inundadas, simultáneas. Ahí, allí, hay, ay, ya, demasiado en exceso.
Bocanadas obscuras, ingenuas espumas en rebanadas, turbación doblada peligrosa. ¡Hoy en venta del vacío ayer!.
Con las manchas luminosas de los cielos en brasas. ...Demañanayeres... En las tradiciones inaccesibles. En los finales del origen.
En las narraciones indefinidas en los mitos remotos... ¡Demañanayeres!.
El amor de fábulas y cristales, valles, fuentes, flores tibias, muslos firmes.
El recuerdo. En la ceniza del reloj, del pequeño mundo, del momento inmenso, en el anónimo desánimo.
En los ayeresdemañana hay. ¡Demañanayeres!. Hay allí un ahí...¡Un ahí, donde el ahí!
Es un ahí. Donde la voz del pueblo perdió el sentido,
los hechos la borraron bajo tierra, la profundidad de los indefensos,
en la materia informe del desorden. Ahí, ningún significado importa el hombre, ni la vida, la verdad, el honor y la familia. Ahí, los recuerdos escriben, y borran la memoria, la falsa historia, la riqueza inútil, hipócrita, incrustada de vacío.
Entre éstos... Ayeresdemañana ¡Se prosigue descubriendo los vacíos!. Y los mismos culpables se proclaman inocentes, y los ayunos meditan todas las cucharas.
¡Dónde pródiga la vida derrama muerte!. Y Ahí es aquí, en cada recuerdo, y Aquí es ahí a diario, y Aquí es aquí. ¡A propósito!. Y Ahí es ahí. De muchos sabido, ayer y mañana. Ayeres que vendrán sin sus mañanas, mañanas legendarias sin calendarios.
¡El tiempo sacudido entre dos eternidades!. Túneles de puerta, ventanas de laberintos. Ayer Es De Mañana. ¡Ya demasiado tarde, infinita noche!.Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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