“En la enseñanza, . . . el más diestro.”
Al fiel Maestro que la educación profesa, honesto mentor que a la sociedad interesa, al que acude al aula lleno de emoción, para el que la docencia es su religión.
Al que se prepara, leal a su libro de texto, persiguiendo conocimiento sin pretexto, al ser humano lleno de ética, valores, que hace del saber, la ciencia, sus primores.
Al que orienta sin cortapisa o componenda, al que sin represión a colegiales enmienda porque con la disciplina bien se hermana, para el que no hay ningún fin de semana.
Al que no comprende marchas ni plantones, ya que piensa que existen otras soluciones para los peores problemas, mayúsculos, negándose a abandonar a sus discípulos.
Al comprometido con las juventudes, a las que transmite todas sus virtudes sin envidia alguna, en pos del futuro, presagio divino de un mundo seguro.
A ese Profesor rindo tributo, pleitesía, porque su labor, plena de sabiduría, colma las necesidades de una patria a la que, digna y culturalmente, idolatra.
Señor Profesor, de alumnos aliado, a la formación, a la instrucción, afiliado, adalid, prócer de amor, sentimiento, que abreva de la vida entendimiento.
De verdadera vocación, apostolado, ideal misión que deja todo de lado por la enseñanza ilustre, honrado Maestro, los estudiantes lo adoptamos . . . nuestro.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Ciudad de México, a 15 de mayo del 2018 Dedicado a mi más admirado Profesor, Don José Agustín Antú Cantú (QEPD) Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
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Poeta
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