POR SER ONIRAMBULANTE
Camina dulces ríos sobre un lago,
al soñarse tranquilamente despierto,
porqué pesa una hora de menos,
cuando así escucha a su noche,
como el descanso por la emoción,
de una flor sin dolor. ¡Ah!.
¡Onirismo del ser ambulante!.
Un sabor sabido a sable suave,
un verse dormido extasiado,
con la paz corriendo ácida,
al pez escurriéndose al sol,
siendo grave falta no poder,
ni sentirlo imaginado humoso.
¡Ambulante onirismo del ser!.
Porqué al parque piensa esconder,
el árbol con el sol lejano,
y la niña con la risa cerca,
en la repisa está colocada,
esta bella pintura viéndose,
al sol lejano en el árbol del parque.
¡Del ser onirismo ambulante!.
Al verse un verso evocando,
la tarde lluviosa inquieta,
en la hoja qué estaba,
tan amarilla del otoño,
como nueva inspiración,
al inicio sólo un trazo.
¡Onirambulante siendo solo!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez