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Si pudiera moldear mis ambiciones, ilusiones,
los sueños más profundos, con total certeza,
los encontraría enredados, evolucionando,
bullendo como volcán, como geiser incesante,
iluminando desde aquel lucero que imagino...
radiando desde tus ojos, para encender mis días.
Si pudiera asociar la alegría plena, el ensueño,
los encontraría también tejidos con sobresaltos,
con angustias indescriptibles, con lágrimas,
ceños fruncidos, pero también justificadas risas,
que contigo vibran y se eternizan replicando
como sismo en el corazón, el alma y la memoria.
Si pudiera visionar la trayectoria de tus vuelos,
renunciaría hacerlo, para vivir y disfrutar de hilar
emociones, más risas, ojos húmedos, ansias sin fin,
para desacomodar nudos en la garganta y corazón,
para descargar juntos toda aprensión y estallar
con toda la intensidad, esos instantes eternos...
Ojalá pudiera atrapar más tiempo y espacios,
para interceptar, no importa si destellos,
de tus vuelos, tus raudos pasos y toda tu alegría,
para buscar anhelante como en terapia intensiva,
desaprender, aprender y reaprender la vida, que,
impetuosa se renueva y canta desde ti mi pajarito.
Ojalá pudiera acercar mis roncos versos a tu vera,
cual rezo quedo, como ángel de la guarda bajito,
antesala de sueños, descanso, de pausa esencial,
para contarte como ansío ser rama y nido para ti,
para arrullarte y ser tu fortaleza, castillo de ilusión
y ser aurora, para encontrar en tus ojos, aún más luz.
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Poeta
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