Restos del naufragio van quedando, flotando entre las vidas sin saberlo, ignorantes los fragmentos indelebles, entre sueños y apócrifos recuerdos. La aurora se ha quedado ensimismada, contemplando atónita al sujeto, el sujeto que navega entre dos aguas, entre mares de dudas y de aciertos, cabizbajo o erigido como un cedro.
No comprende el necio lo que pasa, sumido en verborreas y desacuerdos, más sigue cual lacayo letanías, cediendo dignidades y derechos. Ya asoma la verdad en aquel cerro, de hojarascas cubierta y de deshechos, con ojos de razón y sin desprecio, inmersa en el olvido como un sueño.
El verso convertido en melodía, ha vuelto a recordar lo que es auténtico, marcando pertinaz sus sintonías, en su lento devenir pero certero, o en el rápido suspiro, que es la chispa, que enciende la verdad como un lucero, entre rescoldos aparentemente muertos, el verso así desvela la mentira.
Los restos van quedando sumergidos, partículas arrancadas de los sueños, esquirlas del pasado en el olvido, de hechos, de matices y de gestos. Un carnaval de sueños redivivos, el veloz carrusel de un torbellino, ahíto de promesas y de mitos, de rescoldos de unos fuegos fenecidos.
Llega el poder, a inhóspitos lugares, se cuela en impensables orificios, en las mentes distraídas, a raudales, envueltas en ropajes de oro fino, en vidas transitorias y aplazadas, de palabras que nunca dicen nada. A la vida el poder haciendo ojales, que abrochan sin decoro a otras ideas.
Un largo devenir de sentimientos, de los miedos la vidas se alimentan, haciendo poderoso a quien los crea, un largo suceder de pensamientos, preñados de consignas y etiquetas. Un lento transitar entre reliquias, de sus pasos, un caminar sin tregua, y un largo amanecer que nunca llega.
El amor se va posando cual aurora, en las almas que pululan como sombras, dando luz a los rincones más oscuros, dando calor a los helados huesos, cruzando las fronteras y los muros, las verjas, alambradas y mazmorras, no le frena ni el dolor cuando te toca, ni una pena, un quejido o una condena.
Quizás mis ojos sean parte del paisaje desolado de cada sentimiento quizás en el vacío de mi canto quede alguna mínima esperanza para reencarnar en otra vida y poder volar sin alas y que nunca falten las palabras.
Quizás en este mediodía sobren las manos para acariciar tu cuerpo y en la noche repleta de fantasmas solo sea tu boca la que me invite a pecar en dos instantes tan solo si pudiera si creyera, si muriera seria la pena máxima de este gran olvido.
Adiós año viejo, que nos colmó de dudas y preocupaciones Nos cercenó la libertad y nos arrebató las imaginaciones Año viejo, que nos encerró y nos llenó de caos y confusiones Nos aceleró el corazón y lo puso a latir a mil revoluciones Año viejo, que nos cambió la rutina, llenándola de discusiones Acabó con la armonía, la felicidad y las vacaciones Año viejo, que acrecentó los rezos y a Dios las bendiciones Pasará la historia y lo recordarán las nuevas generaciones Año viejo, que llegó cargado de virus, de aires sin respiraciones Dejó a miles de personas agonizando, sin suspiros en los pulmones Año viejo, que nos cambió la vida, el trabajo, la rutina y otras ocupaciones Nos alejó de familiares, de amores y de otras caricias sin diversiones Año viejo, que escondió a los amigos, sin abrazos, sin anécdotas, ni conversaciones
Llega el nuevo año cargado de esperanzas y de nuevas oportunidades Fuerza positiva del cuerpo y del alma, llegarán con risas y felicidades Feliz año nuevo, con mejores amaneceres en los albores de sus claridades Ha llegado la vacuna, nos vacunaremos por millones y por cantidades Feliz año nuevo, aún con tapabocas y con todas las responsabilidades Vendrá con nuevos bríos, de tecnologías y otras novedades Feliz año nuevo, con calma, con tranquilidad y con la fe de serenidades Que nos arrope con apasionantes amores en las intimidades Feliz año nuevo, que se retome el quehacer diario en las actividades Que siga reinando el amor y la paz, con todas las bondades
Llega un nuevo año llenó de energías, ganas y alegrías vigorosas Volverán los familiares, el júbilo y la gritería serán escandalosas Año nuevo, retornarán los amigos y las integraciones serán afectuosas Estaremos más arrugados, más canosos, pero nuestras amistades siempre serán grandiosas Llega un nuevo año y con Dios, las bendiciones serán todopoderosas Volveremos a ver a la vecina en el balcón, de minifaldas vanidosa Las mañanas y los días, serán de jardines y flores esplendorosas Los rayos de la luna, nos arroparán con emociones y pasiones pegajosas Feliz año nuevo, que se sientan las sonrisas y el jolgorio de saludos y abrazos bulliciosas
Me gusta ver tus lindos ojos, y pensar que tú ves los míos Me gustaría poder sentir tus manos, ver tu sonrisa Poder ver tu alma, a través de tus lindos ojos Me gustaría poder abrazarte, para sentir el calor de tus brazos.
Lo que mas me gusta a mí, es verte sonreír Esa hermosa sonrisa, que a mi enamoro Desde la primera vez que te vi, me gustaría verla de nuevo Quisiera verte de nuevo, para nunca más dejarte ir.
Me gustaría leerte o cantarte todos mis versos Para a si enamorarte, para que no te vayas de nuevo Me gustaría bailar contigo, un vals del amor Y una ves estando juntos bailando, probar tus dulces labios.
Quisiera tomar mi guitarra y cantarte todas las noches Canciones que he escrito, especialmente para ti Versos que escribo con el corazón, todas las noches, para ti Escribirte es lo que mas me gusta a mí, Nadia.
Amores van sonando cada día, envueltos en la magia de su canto, el son de su cantar es melodía, igual que su canción eleva el ánimo. Sus acentos no son la mercancía, que se cambie sin más por el dinero, que en la cálida caricia de su aliento, tan solo es canjeable en armonía.
Amores en la espina y en los pétalos, en la carne de su suave terciopelo, es el esbelto tallo que se yergue, en el reflejo cristalino de su espejo. Los ojos enroscados en su aureola, seduciendo al verse en sus colores, la veraz hermosura hasta en sus formas, o sean plantas carnívoras que devoran.
En las carnes y en el ánimo se inyectan, los amores de pasada que transitan, como alma atormentada así levita, impregnando de pasión como una estela, una estela de placeres y de olores, inmersa en los efluvios de sus venas. Un coro de famélicos temores, hollando cada paso que se aleja.
Amores que flotando se marcharon, entre las nubes de una vida intensa, dejando entretejidas en las manos, el espíritu vital de sus esencias. Se quedaron prendidos en los ojos, en recuerdos bordados de guedejas, desprendidos de sus bellas cabelleras, de la piel de la armadura que se quiebra.
En sus miradas sucumbieron y lloraron, tibias lágrimas que en los ojos se recuerdan, cicatrices que quedaron en los órganos, que palpitan en la sangre y en las venas. Corazones desprendidos de sus pálpitos, soñadores en sus lóbregas cavernas, verdes fueron y transparente fueran, más en espejos, al fin se convirtieran.
Amores de hojalata o de madera, de carne de pasión y de tormentas, amor sin compasión en las mareas, donde airados al corazón atentan, o en la suaves travesías de ese lago, de tranquilas aguas que te mesan. En la mar de los amores ya navegan, en las velas de las risas y las penas.
Veintiocho de diciembre, conmemoración pagano-religiosa, en sus celebraciones En honor y gloria de infantes, por sus dolores y desesperaciones Por sus llantos, sus lágrimas, por sus gritos y por sus ejecuciones Dia de los inocentes, los niños de Belén, en sus nobles resignaciones
Historia que ha corrido con sus mitos, verdades y sus leyendas Desde hace dos mil años se les recuerda a esas masacres horrendas Asesinato de niños inocentes, que los arrancaron de sus humildes viviendas Soldados romanos, valientes con infantes, sin que nadie los defienda
Cuenta la historia y la biblia, de un rey malvado y sanguinario Rey Herodes I el Grande, vasallo del Imperio Romano y un alto funcionario Temido, sagaz y asesino, de sueños malvados imaginarios Celoso hasta de su familia, veía en el niño Jesús a su adversario Cruel e iracundo, envió a los tres reyes magos con un mensaje temerario José alentado en sueños, tomó al niño y a María y huyó a escondidas por caminos legendarios Se refugiaron en Egipto, en casas humildes que les brindaron sus vecindarios
Desde la edad Media, otra fiesta se fusionó con la de los inocentes Celebración pagana, “fiesta de los locos”, jocosa de bailes y risas sorprendentes De clérigos jóvenes, burlándose de obispos y papas sin ningún inconveniente Con indumentarias estrafalarias y canciones sarcásticas y carcajadas sonrientes “fiesta de locos” con procesiones de inconformidad, de maltratos como picados de serpientes Con bromas que les hacían a los incautos, de mentes ausentes
Fiesta de los santos inocentes, de leyendas y narraciones fabulosas De creencias, rezos e imaginaciones, de danzas macabras misteriosas De burlas, de dichos, de reírse sin intención de molestar, siendo generosos y graciosos Cambiar azúcar por sal, de comidas apetitosas sospechosas Lanzando noticias falsas, de clamores asombrosas y dolorosas Entregar y dar regalos en cajas vacías, de expectativas maliciosas Adelantar la hora del reloj, de retrasos de angustias sudorosas Billete pegado al piso, de caídas y burlas vergonzosas Baño ocupado, de esfínteres que aprietan de ganas angustiosas Llamadas falsas de aquellos amores furtivos, de burlas caprichosas Caíste por inocente, te dejaste engañar de chanzas peligrosas Dia de los santos inocentes, fiesta religiosa maravillosa y algo misteriosa
“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga diciembre 28-2020
Desde el latente corazón, sabe el latido, del sentido y la pena, late según el son del sentimiento, del importante matiz de su latencia. Y es su latir, una melódica o alocada canción, que sobresalta o serena.
Turgente corazón, que se desboca o frena, en el pecho sus golpes, ensancha la emoción, y es tanta la pasión cuando golpea, que infla las venas, en su ímpetu arrollador, y sale al exterior cuando el amor llega.
Corazón, que latiendo se condena, al impulso irrefrenable de la vida, late apaciblemente, o se sale del pecho en su carrera. Es tanta la emoción, cuando se altera, que hasta nace el sudor, la lágrima se licua y se desvela, a las mejillas, llega la pasión.
Corazón de algodón o de madera, grosero o sutil, libra o condena, son sus latidos como sentencias, o voces que anuncian el perdón, de tal manera, que es juez o sanador, que alivia o impertérrito desprecia, sabe también, de hambres y miserias.
Ardiente corazón, que ríe y llora, acompasados gritos cuando afloran, armónicos latidos que perdonan. Sabe de fantasías el corazón, que sin saberlo se enamora, y es tan voluble su canción, que, a veces, quiere reírse y llora, pero enseguida, se aprende la canción.
Latente corazón, que en su mazmorra, va de la realidad a la ficción, a veces, se amodorra, más, casi siempre, se abre al exterior, y es el amor que se acomoda, a cada latido, de su febril canción.
El corazón me ha dicho que lejos de ti no puede vivir Que no le haga mas al cuento y que no me atenga a mi suerte Que no puede pasar un día mas sin verte, es por ti que late Me ha dicho que te busque, que no aguanta más sin ti.
Mi corazón me dice que te necesita y que te necesito Que para el eres su luz su faro, me grita que te busque Quiere fundirse en un abrazo contigo, para sentir el latir de tu corazón Me dijo síguela, síguela a donde vaya, me dijo síguela que la extraño.
El insiste que no puede vivir ni un día más sin verte Necesita verte de nuevo, para darle sentido a sus latidos No quiere morir de amor, quiere saber que esta vivo y que late por ti Mi corazón te extraña, me dijo que está muriendo por ti.
Yo me hice el desentendido, y al corazón ignoré Ya que yo no se amar, pero el me repitió que sin ti se muere Me insistió que de ti está enamorado, que te siga por que se muere Sonó tan sincero, que aquí me tienes muy enamorado de ti, Nadia.
Sangran las manos, del hábil artesano, fibrosas las ideas, artesanales sueños, labrados en la roca, artísticos recuerdos, con los cinceles mágicos, de sus goces auténticos.
Entre cuerdas fantásticas, los dedos se entrelazan, dando sonido al mundo, que al sentimiento alcanza. La armonía que solloza, entre los sueños cósmicos, cual alma levitando, en las humanas notas.
Ha visitado el mago, a la indecisa mente, y ha dejado la magia, en la perlada frente. La armoniosa cosecha, que de sus manos sale, un manantial que nace, de sanadoras músicas.
Arranca del sentido, los acordes del tiempo, que al sentir se diluye, entre los sentimientos, una lágrima rueda, una perla sonora, un amor sin fronteras, en las mágicas notas.
El alma se desgarra, se conmueve y se apena, desprendiendo la esencia, que de sus manos mana, y la paz deslizándose, sobre la piel desnuda. Directo a las entrañas, el amor vive y muda.
Las olas musicales, acarician el alma, y el sentimiento fluye, armoniosa cascada, va arrancando los versos, que escondidos estaban, temerosos soñando, cada nota una lágrima.
De amor el artesano, sus manos ha esculpido, en sus ojos de lienzo, ha pintado su aliento, ha dibujado el tiempo, con la sombra a su lado.