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"El silencio es la sílaba más fuerte del sonido."
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Poeta
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SEÑOR, BENDITA SEA TU RESURRECCIÓN.
Señor es tu resurrección la fe del mundo, por la religión o secta que se profese, todos creemos en ti Señor, hoy te pedimos entre tanta adversidad existente, por la hambruna, la violencia, malignidad, envidias, egoísmos y guerras cruentas, que extiendas tus manos colmadas de amor y bendición, ya que el mundo aclama paz y concordia, Señor, fuiste crucificado para la salvación de tus hijos, por manos y mentes incrédulas, sádicas y asesinas, que con el fehaciente arrepentimiento, lloraron por ti, finalmente, Señor levanta al que se arrastra en el fango, al que mata, que hurta, al vicioso, y a todo aquel que precise de una conversión, por ello, te ofrecemos oración tras oración, para el bien de la humanidad, principalmente por aquel que aún no ha nacido, para que las nuevas generaciones, vengan al mundo, faltos de la doble moral, y la iniquidad de acciones, que acabaría con ellos mismos, con el prójimo, con nuestro planeta y el universo mismo, Señor bendita sea tu resurrección.
Mónica Lourdes Avilés Sánchez.
Derechos Reservados. País México.
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Poeta
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IMPOLUTO SER
En la sed perdida de los pastos. ¡Audaz cogorza encarnada!. Viene, viene enternecida el agua. ¡Patrimonio bondadoso!. Por la arena tocando. ¡Mayestática!. Una fresca campana. ¡Implorando!. Ser saciada. ¡Salubre!.Impoluto. Dolor. Del recuerdo perfumado. La fruta se dilata. ¡En la pupila qué llueve!. Al resquicio restaurando. ¡En las caderas qué fluye!. Hélice hercúlea hermoseada. ¡En las calderas qué fragua!. Dilatándose. Escurriéndose. Impoluto. Exponente. En el mar que moja sus dedos. En los labios de selvas nuevas. Sed, sed... ¡Cómo quieras!. Sed agua... ¡Cómo fuego!. Sed viento. ¡Como aliento!.
_¡Sed la sed misma!_ Del agua ardiente gozosa. Sed la mano en cada dedo. ___ ¡Al pié de la montaña! ___ Misteriosa silla paralela fluyendo. ¡Del ser suspendido del sí!. ___ ¡Y más allá del no!. ___ Sed el pasto mismo, césped div ino encarnado. En el agua ardiente del polvo. ¡Sediento!
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Exterioridades...
Cabalga el alba la tarde tenue. en la silueta que duerme. al horizonte qué acecha. los topacios qué recuerdan. de la lluvia de cristales. ¡Tenues rosales en su sed!.
En el frío del ensueño derretido, cuando el infinito es nombrado, en la estatua del fuego intacto, por la frescura del hielo mudo, entre la espuma del grito roto. ¡Cuando la sonrisa es escombro!.
Ex Terior Idad Es
Cabalga. El espejo silencioso. Invisibles. Superficies. Del reflejo. ¡Suspendido!.
Ex Terior Idad Es
En el fuego. Pintor del aliento. En los náuticos orígenes. ¡Trémulas burbujas!. En los gestos diestros. ¡Cáscaras cabalga!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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A.S.O.M.B.R.A.D.A.
En la sombra del aire rosado, espera. ¡Disciplinadamente!. La mañana, costumbre, indispensable. ¡Del agua qué teme medirle!. Los pedazos de noche sencilla. En el rostro de moribunda colmena. En los alados cereales de panes. En la sombra la luz aprende, la hora de la traslúcida muerte, la carga amarga del menosprecio. Encendido el paisaje adormecido. En la angustia fósil del pecho. En la luna prisionera del ojo. Por la vertiente de vidrios masticados.
En la sombra crepitan los grises. ¡Corrosivos elefantes herreros!. De la sed inundada del tejado. Cuando el césped emborracha el viento. Cuando la luna cultiva alfileres. En el vino, camino, al enigma. ¡Desfilando los anhelos desvestidos! ¡Asombrada, oh sí, asombrada, asombrada!. Por todo eso que la ignorancia permite. ¡Con el perdón!. Seguro, infalible, sombreado. ¡Qué a la pólvora hace añicos!. Y viento al tiempo. ¡En el edén!. ¡Qué quiere!. Parecer lo que no es. Por el amor, sí, por el amor. ¡Sí, sí!. ¡Qué nunca aún se ha dicho de ninguno!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Não devemos ficar pensando em coisas ruins... Também não devemos ficar esperando por coisas ruins.
Mas não devemos achar que a "coisa" está distante de nós...
Porque, quando menos esperamos, escutamos a sua voz.
A.J. Cardiais imagem: google
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Poeta
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AGUDA CAÍDA
Agu Daca Ida.
En la noche que duerme demasiado plácida. En la tarde que se rasca el sol. El último pincel entusiasmado. Cuando. Se pone nerviosa la mañana. Al fondo. Afilar de unas pestañas años. Después. De una.
Agua Daca Ida
Del crustáceo. Observando la vidriera. En la rutina inquietante. En la cilíndrica mirada. En la bebida camisa. Del terreno. Estampado pantalón. Del tobillo. ¡Violento colchón!.
Por Esa Agu Daca Ida Está
El sendero de la noche medio desnudo, golpendo el suelo del claro opuesto, apropiado a la frente estrecha, en la ropa de las luces cortas, incluyendo las balas boca arriba, en la espalda del buen papel, en el invierno impresionado, y las sonrisas bajo el hielo, en la imagen del instante.
Por Esa Agu Daca Ida Está
Un amanecer cauteloso. Un gris interminable. ¡Qué empezó a buscar en la mirada!. Un sabor disfrazado de rojo. Un anochecer en la ribera. Entre los zapatos del sofá. ¡Tambores, bocinas y campanillas!. En la noche qué desayuna el día. Y al sol qué no calienta igual.
¡Es así, la aguda caída aguda, es así!.
Dicen: Como hurgándose las ranas el rostro, que se hizo pedazos el tiempo, encaramado en la desprevenida. ¡Cremallera!... Porqué la tentación, llovía fuerte... En el mejor alumno, de la suerte... En las pestañas, pausadas... Capaces de detener, la mirada... En la cintura de las uñas. ¡Martirizando su lujuria algodonosa!.
Ates, antes, antes. De La gu da ca ida, ida, ida.
Por ser insensata. En la máquina. Insensata. De pasos. Laterales Y reverencias.
¡Ahora, ya está, en la dormida noche pálida!. La luna. Del espejo. Después. De la caída. Aguda y fragmentada entre los restos reflejada.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Quien no ama no vive, y el que no vive es como un fantasma que sòlo aterroriza a los que viven. El que odia desconoce el amor, y anda perdido en la tenebrosa oscuridad. El que ama es como una luz que ilumina en la oscuridad.
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Poeta
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El Poeta es un comunicador de la Sociedad, que marca a cada persona con sus profundos versos, y tocar el alma del Lector.
El Poeta con su letra ayuda al desprotegido, porque necesita de su cariñoso amparo.
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Poeta
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IMPÁVIDO SOLAZ
Es Cuando El Invierno Pierde Las Hojas... En la nieve del otoño sin raíces. En el fuego qué hiela obscuro. Y recoge flores del polvo, en las espinas de ilusiones, dónde las ausencias se clavan, como anclas entre las noches.
Y La Humedad Crece Como Una Lágrima Infinita ¡Impávido solaz!. Del mirar azul tortuga, que dejó a mitad el viento, el cisne zurdo, el cuervo calvo.
¡Impávido!. Más allá de la palabra no dicha. Solaz. En la jornada sin comienzo. ¡Impávido!. Entre las cosas qué no cambian. Solaz. En la injusticia ignorada. ¡Impávido!. Entre los laberintos qué se ocultan. Solaz. Más allá del tiempo al acabarse.
Es Cuando La Primavera Pierde Los Colores... Del espejo acomplejado, en la punta del agujero, donde está, la pluma sonriente, donde está, la mano clamando. Por el río que al miedo ahoga, el lago sumergido en el desprecio, de la vida qué carece de consciencia.
¡Sin pensar!___¿Qué se pierde, al perder el miedo a perder?. ¡Perder!___Hasta no poder más, el miedo a perder. ¿Qué se gana?___ ¡Sin ganar!. Y Sin Actuar ¿Qué se cambia?___ Del impávido solaz.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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