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Me negué a ser un esclavo, levanté al cielo mis manos y separé del suelo los clavos, el grillete en mi muñeca me causó dolor, se acompañó con una mueca y un cambio de color en mi rostro, aun con las cadenas pero ya sin retenciones, dejé detrás mis penas y recordé mis convicciones, avancé hacia delante casi cojeando, y ¿Cómo podría no hacerlo si llevaba tanto tiempo sin caminar? Llevaba tanto tiempo sin avanzar, encadenado a un pasado que no podía olvidar, encadenado a una voz que no volvería a escuchar.
El sol me golpeaba la cara, estaba brillando, si, el sol volvió a salir para mí y hace tanto no lo hacía, llevaba varios meses en oscuridad y en agonía, pero todo había cambiado, había hallado la fuerza, ahora podía mover las piernas, podía correr, pero más importante que eso, mi mente y mi alma se habían recuperado, una vez más podía volar, una vez más podía surcar los cielos montado en mis sueños y usando de alas mis poemas, una vez más me elevaba el aleteo de mis versos y me tranquilizaba el tacto de mi pluma.
Me sentía un ángel, o quizás lo era, no lo sé, por un momento olvide el tiempo y su movimiento, por un momento solo importaba como me fundía con el viento, por un momento solo importaba mi sonrisa, mi sentimiento, y es curioso, podía volar sin pensarlo, y podía brillar a pesar de la oscuridad en mi interior; no, no era un ángel, ni lo soy, ni lo seré, por un instante lo había olvidado pero no era la primera vez que volaba, lo había hecho antes, tantas veces que no era nuevo, pero si hermoso como siempre.
Soy un dragón y ese día puede recordarlo, por eso brillaba a pesar de mi oscuridad, por sentía un calor en mi interior que me inundaba al volar, era el calor de mi llama que me llenaba de nuevo, era el valor de mi pluma que me alcanzaba una vez más, era la caricia de mis letras que otra vez me hacía sentir, y me sentí libre, el magma que había en mi diafragma derritió aquellas cadenas que ya no podían atarme, la llama de mi alma iluminaba un camino hacia adelante, y la lluvia comenzaba a caer, junto con una noche y una oscuridad que quería conocer.
Oscuridad, frío, humedad, eso me ofrecía la noche, la otra mitad de mi ser, una parte que debía tener en cuenta, una experiencia violenta, una noche la fría, la humedad de mis ojos hace tanto, el dolor que provocaba el llanto, el desencanto, el olvido que me había embargado, la parte que me había atado pero ahora me recordaba como volar, la parte que había odiado, pero que aprendería a amar, la parte de mí que me hacía ser yo, esa oscuridad en mi interior que hacía más fuerte el brillo de mi llama, la lagrima en mi corazón con que se desahogaba mi alma, el viento que hace tiempo había impulsado mis alas, el recuerdo de mil momentos y un solo, el recuerdo del primer vuelo y el ultimo soplo, el recuerdo del primer amor lastimero y hermoso.
Un recuerdo que me recordó como volar.
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Poeta
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A gente cai,
A gente levanta...
As vezes é pai
As vezes é criança...
A gente inventa
Uma mudança.
Inventa uma fé,
Inventa uma festa...
Inventa um arco
Do triunfo na floresta.
A gente caminha
Por uma trilha aberta,
Que joga poeira do destino
Em nossa testa.
A gente protesta:
Viver é ruim!
Viver não presta...
Viver é fogo!
Viver é água!
Viver é gozo...
Viver não é mágoa.
A.J. Cardiais
02.03.2012
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Poeta
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En la parte inferior del ombligo
Usted tiene para mí un placer
Un volumen que encaja ...
Todo en la mano
Es dentro de mí
Una parte de su cuerpo
Alcance, la quema
Hilarante, pero el amor
Encantador, yo aquí
Una espontánea viene
Una salida rápida
Eso me hace el amor delirante
Aunque no es continua, no
Voy a ir en busca de otro amor, sí.
Varenka Fátima Araujo
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Poeta
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Madre que expulsa todo hijo de días de la luz
Nunca deje a sus hijos sin comida
La madre tierra que registra las marcas de paso a paso
Liderando a todos por caminos diferentes
Madre de dar a todos un puñado de tierra
Nunca reclamó los derechos.
La madre tierra llora constantemente por el mundo subterráneo
La codicia de algunos niños, desconcertante
La madre tierra va a recibir a los niños, joyas prestadas
Que un día volver a su refugio para siempre.
Varenka Fátima Araujo
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Poeta
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Bailar descalzo en la casa y la calle
Giro sin la preocupación de técnicos
No te preocupes por bailar en la calle
La etapa de este elemento escénico
Con todo el cuerpo iluminado de vidrio
Jarrón en busca de agua, equilibrar
Bengala, cuerpo firme iluminado
Pandeiro toque que marca el ritmo
[img width=300]http://3.bp.blogspot.com/-rqA6licv71c/Tra1CpFFSII/AAAAAAAAASY/VU0lGimhP_M/s1600/Foto-0149vv.jpg[/img]
Objetos de gente de danza del vientre
Así que suelta, se practica en Occidente
El ritmo y la sensualidad en la gente
El baile que marcó mi vida
Que se baila en todas las edades
Todavía Danza para la vida
Varenka Fátima Araujo
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Poeta
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La danza del vientre, soy una mujer de Isis
Yo bailo como un buen bailarín
Dedicar el ritual de la diosa Isis
En la fe religiosa, su madre una bailarina
Ondulaciones abdominales, de la cadera
Imitando a las contracciones del parto
Mano de ritmo golpes en la cadera
Mostrando la fertilidad en el nacimiento
Con la mano moviendo la palanca
Entre sus dedos, haciendo malabarismos
Coloque las pechugas y levante a Dios
A mi alrededor hermosas bailarinas!
Bailó con un bastón en el hombro
En una perfecta comunión con Dios!
Varenka Fátima Araujo
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Poeta
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ARISTAS DE ARLEQUÍN
Por la vida filamentos ásperos.
Latidos del trigo.
En los después de agramados desmanes.
¡Arlequinesco vivir del grillete!.
Al morir desde nacer aristas.
Investidos muchos. ¡Solo ver!.
La escultura de lo vivo. (Qué ya no es).
La pintura de lo extraño. (Qué no engaña).
La música de lo lejano. Hila, hilo.
La danza de lo figurado.
Y
La letra.
¡Oh!. La letra, donde la figura.
Cesó y la gente, hila y pierde polvo.
El ser del arlequín.
Tigre, a veces, dices.
Trigo, a veces, de noche.
¡Mejores sueños tarde llegan!.
Entre la sombra muda,
y el espíritu desnudo.
¡Arlequinesco sentimiento vígil!.
Al uno, abismos, va sembrando.
Y al otro, las nubes va nevando.
Añublo, mal rosado del trigal.
Arriscado del existirse verdadero.
Ártico y desértico.
Artífice de auténticas quimeras.
Aristas del vivirse. ¡Arlequinado redondo!.
Por la vida.
Hecha de cuadritos.
Y de vidrios. Los mares son de rojo tintos.
Arlequín, arlequín, arlequín.
La causa nueva desea.
Alegre. Donde dura y muere esquí.
Vaporizado toda hirviente nieve.
La lengua.
Puede ser mil veces mal acabada.
¿Pero, la consciencia, genuina, cuándo?.
Aristas de mañanas y de tardes.
Teatro, trágico y genuino.
De papeles recorría la mano fría.
Media hectárea sigilosa.
¡En tres junglas del ya nunca desear!.
Un poco más.
Complicada.
La creación reluciente de los cuadros.
¡Corredores!.
¡Dónde los minutos faltan!.
En la lista.
Roja de antesalas. Anudando, mariposas.
¡En la máquina, maqui__nafer vorosa!.
Soprano labios penas.
¡Qué apenada, nada la tarde, de malas!.
Noticias.
Arista aguja ahora.
Alfil, alfiler, del arlequín.
¡Cómo aquél desajedrezado ad-her-eso!.
Sanguíneos gusanos de noticias.
Durante largas fantasías.
En el___Crucero___Desviado.
Digno disfraz del único remedio.
¡Dónde la razón fracasa!.
¿Confín acaso?___¿Acaso tiene caso ya?.
En el___Aquél___Aquéllo...Otro más allá.
¡Confín de las fáciles preguntas!.
Ilusión demasiado.
Confundida, refugio transitorio.
¡Rostro, rastro, arrastrado!.
Rostro.
Formal de las distancias.
¡Huecos sucesos!.
Tocamos.
El cuerpo qué conocemos.
Demasiado para decirlo.
En el amor también.
Arlequinesco azulado enrojecido reverdeciendo,
pajarracos retorcidos lameplatos, manada, pocilga, habitantes,
concluyentes del desastre.
Con la razón empantanada.
Demasiado...
Para decirse, desvestirse, desnudarse.
¡Al abrigo de la tierra!.
Galopando. Sobre. La cumbre.
¡Del torbellino lumbre!.
Sí.
Alguna vez, las palabras...¡Se agotan y se secan!. En la pared del ruido.
El arlequín de mil aristas.
¡Templado se ha de lo adverso!.
Del inverso reverso de las cosas.
Del rudo ruido ruin rugoso.
La piel observa del silencio.
La noche hiel del ojo. ¿Cómo?.
¡Más jamás hay, en no decirlo!.
Y nunca cuando menos hay.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Yo me entrego totalmente a bailar
Yo soy movimientos muy ligeros
Para los dioses es que bailo
Arte divino! Yo levanto mi espíritu
En la extensión de una bailarina
Mis brazos y las manos entre los velos
Transparencia en el uso a la ligera
Con varios colores con un encanto!
Durante el juego de baile de un velo
Desplazamiento equilibrado en las curvas
Me imagino que tomó el velo
Eso es parte de mi armario
Esta intención se mantiene
No se dará a conocer, el misterio
Varenka Fátima Araujo
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Poeta
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Sonhou ser craque de bola,
doutorado na escola,
vida menos infeliz.
Conviveu sempre por perto
com o vício a céu aberto
feito um torpe chamariz.
Viu o sonho ser desfeito
com um flagrante perfeito:
muito crak na sacola.
Hoje vive enclausurado
com o peito amargurado
e ninguém lhe dá mais bola.
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Poeta
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La fotografía es una lectura ligera y visual. El mundo en que vivimos es la luz y el amor. 12 de agosto en la ACB, recibió de manos del Dr. Luiz Barreto, una foto de mi padre, ahora degradado, pero sigue siendo clara. En la graduación representan un economista, alrededor de tu cabeza era un casco de la luz en sus ojos como la Mona Lisa penetra en mi alma.
En el cajón de la memoria, las páginas de nuestro libro. Indelebles tus sabias palabras, papá. ¡Ah! Papá tuvo la sensibilidad de la piel, tan profundamente sentias no se arrepiente. Un psicólogo nacido. Con su voz empostada cantavas Malagueña, siempre ha sido una admiradora tuya.
Papá, mi amigo, ya que puse algo en la mesa para que yo baile, aplausos. Los venciadas batallas con tu inteligencia, tu lado ensinavas lucha. Todas las lecciones han sido asimiladas y valiente! Como las perlas en las conchas del mar.
Padre Chaginhas, mi hermano en nuestra comunión, las conversaciones inolvidables. Siempre fuiste de mi lado, no me abandones. Sólo que esta despedida a la tierra de buena esperanza. Convencidos de que usted era el mejor padre, amigo y hermano. Chagas Francisco de Araujo. Mi padre, estoy seguro de que las personas en el mundo mejor. Paz
Varenka Fátima Araujo
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Poeta
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