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Ni el tiempo que al pasar me repetía que no tendría fin mi desventura será capaz con su palabra oscura de resistir la luz de mi alegría,
ni el espacio que un día y otro día convertía distancia en amargura me apartará de la persona pura que se confunde con mi poesía.
Porque para el Amor que se prolonga por encima de cada sepultura no existe tiempo donde el sol se ponga.
Porque para el Amor omnipotente, que todo lo transforma y transfigura, no existe espacio que no esté presente.
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Poeta
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Tan unidas están nuestras cabezas y tan atados nuestros corazones, ya concertadas las inclinaciones y confundidas las naturalezas,
que nuestros argumentos y razones y nuestras alegrías y tristezas están jugando al ajedrez con piezas iguales en color y proporciones.
En el tablero de la vida vemos empeñados a dos que conocemos, a pesar de que no diferenciamos,
en un juego amoroso que sabemos sin ganador, porque los dos perdemos, sin perdedor, porque los dos ganamos.
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Poeta
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Aquel entendimiento que callaba tiene toda la voz que no tenía, y aquella voluntad que estaba fría tiene todo el calor que le faltaba.
Aquel entendimiento que ignoraba tiene la ciencia de que carecía, y aquella voluntad que no quería tiene el deseo que necesitaba.
Porque para que el uno se levante del sueño en que vivía sumergido es suficiente con que yo te cante.
Porque para que aquella no se muera de la muerte que hubiera padecido es suficiente con que yo te quiera.
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Poeta
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Yo que tengo la voz desparramada, yo que tengo el afecto dividido, yo que sobre las cosas he vivido siempre con la memoria derramada;
yo que fui por la tierra desolada, yo que fui bajo el cielo prometido con el entendimiento repartido y con la voluntad multiplicada;
quiero poner ahora la energía de la memoria, del entendimiento y de la voluntad en armonía
con la Memoria que no olvida nunca con el Entendimiento siempre atento y con la Voluntad que no se trunca.
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Poeta
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Para que el alma viva en armonía, con la materia consuetudinaria y, pagando la deuda originaria, la noche humana se convierta en día;
para que a la pobreza tuya y mía suceda una riqueza extraordinaria y para que la muerte necesaria se vuelva sempiterna lozanía
lo que no tiene iniciación empieza, lo que no tiene espacio se limita, el día se transforma en noche oscura,
se convierte en pobreza la riqueza, el modelo de todo nos imita, el Creador se vuelve criatura.
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Poeta
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El sentido del tiempo se me aclara desde que te ha dejado y me has traído, y el espacio también tiene sentido desde que con sus lenguas nos separa.
El uno tiene ahora canto y cara porque vive de habernos dividido, y el otro no sería conocido si no nos escondiera y alejara.
Desde que somos de la lejanía, el espacio, que apenas existía, existe por habernos separado.
Y el tiempo que discurre hacia la muerte no existe por el tiempo que ha pasado sino por el que falta para verte.
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Poeta
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Inaccesible al viento que suspira por apagar la luz de su cabello, inaccesible al pálido destello de la estrella lejana que la mira.
Inaccesible al agua que delira por llegar a la orilla de su cuello, inaccesible al sol y a todo aquello que alrededor de su persona gira,
la doncella en su mundo de diamante inclina la cabeza lentamente para escuchar en el remoto mundo:
el eco de un latido muy distante, la resonancia de una voz ausente y el sonido de un paso vagabundo.
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Poeta
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Firme en la majestad y en la armonía de su maravillosa arquitectura, cuya seguridad serena y pura es más fuerte que el tiempo y su porfía,
tu casi celestial topografía alza la claridad de su estructura, dando cuerpo de paz y de dulzura al alma de la eterna poesía.
Y hace que, confundidos y abrazados, la letra y el espíritu inflamados unan su voluntad y su poder,
para vivir en el espacio frío y en el tiempo dramático y sombrío con la luz y el calor de un solo ser.
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Poeta
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Si para recobrar lo recobrado debí perder primero lo perdido, si para conseguir lo conseguido tuve que soportar lo soportado,
si para estar ahora enamorado fue menester haber estado herido, tengo por bien sufrido lo sufrido, tengo por bien llorado lo llorado.
Porque después de todo he comprobado que no se goza bien de lo gozado sino después de haberlo padecido.
Porque después de todo he comprendido que lo que el árbol tiene de florido vive de lo que tiene sepultado.
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Poeta
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No digas nada, no preguntes nada. Cuando quieras hablar, quédate mudo: que un silencio sin fin sea tu escudo y al mismo tiempo tu perfecta espada.
No llames si la puerta está cerrada, no llores si el dolor es más agudo, no cantes si el camino es menos rudo, no interrogues sino con la mirada.
Y en la calma profunda y transparente que poco a poco y silenciosamente inundará tu pecho de este modo,
sentirás el latido enamorado con que tu corazón recuperado te irá diciendo todo, todo, todo.
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Poeta
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