|
O amor é uma chama que precisa ser cuidada e alimentada pelos amantes.
Quando cada um procura conservá-lo, ele dura.
Mas quando é um só fazendo “este serviço”, a pessoa acaba se cansando, cochilando e deixando esta chama apagar.
A.J. Cardiais 19/02/2013
|
Poeta
|
|
Cae el telón vetusto, no lo miro ni lo pienso, si con nada lograré alcanzarlo. ¡Ni tan siquiera puedo caminar con el de nuevo; tremendo susto me han causado esas huellas soltadas! Llenas las marcas, mojadas, escurriéndose en la existencia misma, disipadas en el sereno, deshaciéndose con el viento… Una prolongada conclusión de un umbral sin aparecerse hasta el final. Nunca se termina de alcanzar, y el telón de seguido repite… ¡Y todo se rehace tantas veces! Provocando extensa locura; ¡y esta interrumpida cordura cambia las cosas al revés! Encuadrando un circo vicioso dentro de la armadura, en donde nada fluye, y ausencia versátil solo le ves.
Julio Medina 4 de octubre del 2016
|
Poeta
|
|
Lá vem o homem com sua tecnologia avançada transformando o tudo em nada...
Entram com sua tecnologia na mata, e conforme o próprio nome: MATA, a mãe Natureza que o protege... E assim se torna um herege.
A.J. Cardiais
|
Poeta
|
|
¿Cuántas hojas debe dejar caer el árbol para hacerte saber que no somos eternos? ¿Cuántos árboles quieres ver nacer para darte cuenta de que sí? Y si...tu verdad o la mía o la de cualquier otro basta para hacer claudicar los huecos que espaciaban los lugares frecuentes que no frecuentábamos ya, o para quitarle la inmortalidad a juramentos efímeros que dejamos de jurar, entonces basta un silencio para terminar lo que no queríamos terminar. Es una situación enfermiza, dices, y yo enfermo cada mes no de situaciones, pero sí de vida. No te sientas culpable, es normal, porque lo que terminaste por decir, o por callar, habla más que lo que dejé de callar yo o de hablar. La araña le dijo a la mosca que fuese, y que tejería prendas para ella y mantos para su amistad, y la mosca traía con ella toda la mierda que encontró las horas pasadas, que, para la mosca, pudiera ser la mitad de su vida, y la araña esperó y esperó hasta que la mosca se decidió a ir, y entonces tejió las prendas que cubrían a la mosca de toda la mierda por venir, y tejió un manto para que su amistad estuviera latente. Cuanto más tejía la araña, más amor crecía en la mosca, cuanto más amor había en la mosca, menos teleraña quedaba en la araña. No puedes cubrir toda la mierda con telaraña, ni puedes tener toda la telaraña con solo amor porque No hay nada que el amor no pueda pero tampoco hay mucho que sí. me quedé dormido en sollozos que dejaron tus suspiros en algún lugar de mi cabeza y por dentro el frío recorre cada rincón de mi flacucho cuerpecillo, y tú sigues marchando en marchas que no se ejecutan, y sigues en busca de sueños que mi mierda no te dejaba cumplir. Estamos sucios los dos y no sentimos nada ¿verdad que no? Entonces que vuelen los pajarillos, que vuelen, porque ni yo claudico ni tú te dejas matar.
|
Poeta
|
|
Los amantes se dan la mano en la plaza, y sus caderas se mueven al ritmo de su aroma, amor. Se presume entonces que el amor ya tiene fragancia, se percibe después el olor de su final. Los besos, las sonrisas, los momentos, y cada pareja tiene fotos en su mente, fotos añejas y fotos que se prolongan hasta finales infinitos. Infinitos, solíamos ser, infinitos y finitos terminamos, si por ti o por mí o por agentes ajenos hemos de desertar, que el paraíso se extinga y el desierto no nos haga esperar. Lo siento y te siento... Pero no basta sentir por dentro, ni sobra demostrar por fuera, porque si por fuera ahora estás adentro, que por dentro no has de querer salir, y si te saco o te sacan o me sacan a mí, que quede en ti o en mí, y que un <<lo siento>> no nos haga fingir. Cansados, estamos cansados de seguir, pero si paramos ¿en dónde habremos de parar? Si te conocí en martes o en domingo queda igual, que si esto se acaba nunca y que nunca sea el final. No hay un "te amo y soy feliz sin ti" porque un <<sin ti>> y un <<feliz>> no cabe en mi cabeza tan repleta de ti, y si he de mostrar que calentaste aquél tipo febril, lo diré, y no fueron tus piernas quienes me hicieron así. Y yo te amo, pero no eres feliz sin ti, y sin ti me amo pero me odio mucho más que el <<tú.. sin mí.>>
|
Poeta
|
|
Se acabó, repítelo, se acabó ¿Y qué mierda significa? Terminamos, y has dejado las hojas tiradas en el colchón, y su almohada no amortigua la caída, nada sube ni nada termina por quedarse pero termina otra vez. Y es que soy un ser vacío, te diste cuenta al fin, no me importas ni te importo, no nos importamos ni le importamos al mundo, y al amanecer saldrá el sol y a la atardecer se irá otra vez, te sumergiré de nuevo en la oscuridad que la puta luz de luna no alcanza a iluminar, y tú estarás en bares con cadeneros y en restaurantes donde sirven pato a la parrilla, aunque seas vegetariana, aunque delires de pobreza, aunque finjas soledad, te llenarás de gente, tan vacía como la que dices que tengo, tan vacía como tu tristeza. No hace falta recordar, no hace falta irse para irse de verdad, ni irse para fingir que no estás, ni quedarse para fingir que sí. Te dedico, la sonata en piano que tocan mis dedos cada vez que recurro a tu presencia inmóvil de mi mente. Te dedico, una risa fingida cada que recorro lugares en los que no te veré pisar jamás. Te dedico, el humo de mi cigarro muriendo entre mi anular y dedo medio, junto con mis ojos fijos en la nada que volviste eterna. Te dedico, una última canción, un último juego de xbox, una última madrugada triste y otra feliz, una última risa y carcajada, un último suspiro cuando las palabras no decían nada, un último llamado del pasado abril, un último abrazo a tu cuerpo invisible a los ojos, un último biombo para cubrir tu alegría disipada entre dientes, un último poema y un último adiós.
|
Poeta
|
|
Ventas con yerros
Muchos querían un hijo mejor. Uno tienen respirando. Muchos se pierden por el desierto ahora. Del lunes nublado años ignorando.
Los vi decir, al final de la escalera, deshojando al hielo sus ojos. No, ya no, por favor el pez se seca. Con la paz y las carretas muerta. Muchos querían a los gusanos. Muchos al oro adoran. Muchos, muchos, alfileres retuercen.
Subí al bajar el sol asombrado. Y vi velas sin barcos en caballos. Desgajando al olvido flores de piedra. Girasoles abogados, y rostros en grietas. Id, buscad, los caimanes saben el camino. Ellos al morir, saben recoger cenizas.
Saben que no saben, de viernes con hambre. En los ataúdes, hojalatas destejen camareros, del camarón arrastrando cada corriente. Nadie debe huir, con la carne del eclipse en las ventanas, llenando una copa cada lágrima.
Espero, pues, al diminuto crimen sin traje. En el mar con los témpanos. En las ortigas, y en las cicutas. En los desfiladeros y buitres Rendijas decoren máscaras. Que sin sueño ensillen las moscas . Que los sapos sepan de cepas nocturnas.
¡Qué el fango desclave faroles!. ¡Qué los helados queden sin guano!. ¡Qué haya pezuñas acribillando espadas!. ¡Qué no sobrevivan huevos en la garganta.
Así, la corbata puede ser falda. En el volcán al vestir su corcho. Con enjambres donde algodonan huesos. Aunque cada tambor cruce muslos magro. Y una tortuga vuele bajo la puerta. Por descuido de la manzana mojada delante. ¡Ay de todos!, ¡ay de silencios! ¡Ay de miles!. Aquí, allá, más con menos, todos sufren. Nadie, nadie sangra. Del alma prostituyendo al aliento.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|
Poeta
|
|
mi esqueleto que apenas puede mantenerse erguido como una fogata clama noche a noche saliendo de su pesadilla a otro sueño por la médula celeste de sus palabras oseas clama porque quiere perpetuarse solo para acender por las escaleras tendidas en el mundo del pantano y cada costilla es el tendido eléctrico del pentagrama anhelante de notas esa música que finiquita las torturas que le pone mute al silencio para exaltar las odas limpias de su cuerpo en cada sol mayor que mira y minado estaba el campo sin batallas herido el hombre por la luz de luciérnagas tan kamicases como un suicida sin causa aquel resplandor de sus ojos detrás del antifaz que la cobija detrás de cada parpadeo esta su visión que no quiere morir sin haber percibido el amor ya sin la vaina triste de sus temores mi esqueleto quiere enterrarse en su cuerpo pretende ese mausoleo de piel joven como una fuente que inaugura sus aguas la soledad solo existe cuando desaparece en el sombrero de prestidigitador de su misterio conocido como alma por llamarlo de alguna manera solamente ella le puso cimientos a este espejismo le puso un welcome a ese mi castillo en el aire a ese precipicio disfrazado de parnaso a esa vereda que busca una calle una compañía para bajar a sus pies descalzos como una rosa en la osada tarea de llevar sus pétalos por el mundo salva esta noche apagando todas las bombillas en ese hostal de estrellas infinitas donde solo se necesita una manta de abrazos para el frío una almohada de sus biceps sosteniendo el cuello de una cabeza que no quiere sentar cabeza sería una pena el homicidio de sus tristezas un sicario al que pago para que la mantenga viva como si solo fueran imprescindibles todos sus poros por donde ingreso como cavernícola redimido a evolucionar para ser su viento ese ser al que solo puedes sentirlo en mitad de una tormenta en ese mar alocado del infinito.
|
Poeta
|
|
Uma criancinha que nunca tinha visto uma galinha, corre gritando a mãe...
Ela diz, esbaforida: minha mãe, venha ver um bicho que você nunca viu na sua vida!
A.J. Cardiais 13/02/2013
|
Poeta
|
|
abrí los párpados y al verla como si el universo hubiera alumbrado unas alas desprovistas de ángel una luna esperando un sol que suspenda su eterna noche al verla claramente en esa luz supe lo equivocado que había vivido creyendo que mis ojos si conocían el mundo que mis manos sabían lo que era otra piel que el corazón también latía dentro del pecho que el poder viste mujeres para no liquidarnos en la contemplación obstinada y era verdad sin certeza era praxis absolutamente viva era sueño salido de otro sueño como el corazón esencial de muñeca rusa el universo quedaba justificado en sus ojos y era la noche sin remedio si parpadeaba ya sin querer ver nada como entre nubes ella lucha suavemente para mantener el vaso de algodón que contiene sus vísceras y su sangre su aliento de aire delicado se resiste locamente para anclarse al mundo y no naufragar entre los astros que la reclaman completa porque han desplazado al sol para otorgarle su merecido centro en la silla de la balanza de la justicia esta sentada ella hermosa y sola y del otro lado que se eleva hasta perderse en el desequilibrio que dilata la cadena la luna ruborizada porque su hija la desplaza sin quererlo toda...
|
Poeta
|
|