Debemos respetar a nuestros mayores por encima de todo, con la finalidad de vivir y llegar a ser tan viejo como ellos. Tienen que haber sido, valientes , fuertes y buenos luchadores enfrentándose a situaciones duras... Entiendo, que somos muchos los que aspiramos a ser como ellos. Nunca debemos permitir que a nuestros mayores les falte nada básico y primordial. Debemos amarlos profundamente por la sencilla razón, de que son nuestros padres.
Sólo pasaba pensando en llegar a casa después de una ardua jornada, para verte, abrazarte y besarte. Era hermoso el volver a estar juntos después de tantas horas. Después te pedía que me prepararas un tintíco, mientras me aseaba y perfumaba para ti. Hablar de cosas triviales, ocurrencias del día, era obligatorio pues, entonces jugábamos con nuestras miradas y con palabras de doble sentido, de esas que se dicen los que se aman, en la intimidad de su hogar, ¡Cómo nos gustaban esos jueguitos de seducción! Así conversando la pasión iba creciendo por dentro y después de varias tocadas de manos y otras debilidades más, apurábamos el tintíco, que ya se enfriaba de tanto y tanto tocarnos.
Que me des a beber con tu boca, te pedía, sentándote en mis piernas, ese café parador. Esa era la manera de seducirte y hacerte sentir amada. También un pretexto para irnos quitando la ropa.
Tú: ¡uy… qué calor hace mi amor! Yo: Si amor ¿Quieres que te quite la blusa? Tú: Mmjum..!! – me decías con tu boca pegada en la mía. Yo: mmmm… (Ya no podía decir nada, pero despegando mi boca de la tuya. Tocaba tu piel y tu cuerpo se estremecía, cuando cariñoso besaba las dos blancas palomas que en tu pecho dormían, pero sonrientes despertaban.) Tus grandes ojos claros ya estaban chinitos de pasión, la ropa tirada por el suelo, el tintico a medio terminar, pero las ganas de amarnos con locura nos ganaban. El amor no daba tiempo para llegar a la habitación y creo que el sofá de la sala nos jalaba, pues después de algunas horas, ahí despertábamos. Nada más que para dirigirnos a la alcoba, la noche aguardaba.
En tu conciencia Figura mi nombre marcado En el resplandor de toda piel De mujer, de sirena Que riega los mares Con toda su belleza Natural, intima, desprevenida.
El libro, es una obra llena de amores, de ciencias y sentimientos Es un papel pergamino cargado de colores, de frescuras y conocimientos Manuscrito pintado, que lleva olores, escritos y descubrimientos Es el pensamiento del hombre, de su inteligencia con argumentos Fuente inagotable de cultura, de riquezas y tratamientos Es lo más hermoso tenerlo entre las manos, abierto, lleno de estrellas y reconocimientos
El libro, es una nube cargada de ciencias y comprensiones Es un compendio de sabiduría, llena de datos, estadísticas e informaciones Es el saber de la educación, con talentos llenos de investigaciones Lleva un propósito de raciocinio y reflexión, atiborrado de satisfacciones
Desde las antiguas civilizaciones, el hombre ha utilizado la escritura En pinturas rupestres, tallas en piedra y huesos de sus criaturas Narraciones, que quedaron grabadas en generaciones de sus aventuras En huesos, marfil, papiros, en cueros de animales y sus armaduras En paredes, en cuevas de jeroglíficos, de colores de sus hermosuras
Los libros son selvas de árboles, el saber de sus hojas conseguidos Es una antorcha del saber, cuando se abre a los sentidos Es un volcán, que erupciona imaginación y sapiencia compartidos Es un nevado, que permanece de sus hojas sin abrir congelado
El libro es un riachuelo cristalino, de saberes despertado Es una fuente, es un cráter, lleno de energías y propósitos visitados Es un huracán, que lleva prisa para abrirlo de imaginaciones soñados Vendaval, que no da tregua en sus conocimientos de gustos deseado
El libro es un placer, es una alegría, que comparte sonrisas, quereres y amores Abren y cierran ventanas y puertas del ingenio, que inundan escritores Libros de poetas, con sus bellas poesías y versos encantadores De científicos, de historiadores, de novelistas, de narradores De cuentos y leyendas, de fantasmas, de éxitos premios de sus autores Se apaga la vida de un árbol, del aire puro de la naturaleza Y se abre un libro, para engrandecer la ciencia y su inteligencia
No hagas de su vida un libro sin abrir, esperando el día para deleitarlo Tal vez el tiempo ha pasado por encima y en la vejez no hay espacio para cultivarlo Ni las fuerzas necesarias para abrirlo y se perderás las bellezas que no quisiste descubrir Que esperaron en los libros hermosos y en sus manos permanecieron dormidos sin abrir Y de aquellos amigos que se quedaron de sus saludos y abrazos sin compartir
No sabe el corazón de condiciones, sabio en pasión y en emociones, de viejas sensaciones se alimenta, es terco, radical y latiendo atormenta, hasta la locura puede amarlo todo, galopar desbocado cual corcel loco. Un solitario lobo ajeno a las razones, un mar embravecido o generoso.
Amor sin techo, sin puertas ni barreras, amor desesperado envuelto en la marea, de canas adornado o voraz como un fiera, amor transcendental y apasionado, amor sin Luna y Sol, entre tinieblas. Amor furioso, celoso impenitente cuando se une a la afilada mente , gigante poderoso, derriba las fronteras.
Abraza el corazón al inocente y al desvalido sin dudar se ofrece, crece el latido si el sentimiento crece, se agranda al contemplar como amanece. Su voz es el tañer de una campana, golpeando el campanario de su pecho, es más puro el amor cuando está lleno, de ternura y pasión siempre latiendo.
En desacompasada letanía late inmerso, en un universo de penas y alegrías y a veces, queda preso en la armonía, en los compases de lejanos recuerdos. Transita en los lugares más recónditos, sin miedo y sin pudor, su latir vibra, como ebrio bailarín baila y se alivia, en las sábanas de su deseo insatisfecho.
Corazón enarbolando su desprecio, ajado en su interior como un pellejo, odio interior prestado sin remedio, por envidias y celos, terror y miedos. Eterno vagabundo, errante por el mundo, viajero impenitente en un leve equilibrio, sin mediar condición a otros sigue, a otro corazón inmerso en su delirio.
Rebelde corazón que se alimenta, de amor y de pasión, de magia y de quimeras, como un acordeón se ensancha y mengua, de sobresaltos y de locuras tiembla, como en un vendaval una pavesa. Amor, que sin piedad, al corazón abrazas, con la fuerza de un dragón, que en llamas habla, órgano musical cuyas notas se alteran.
De sangre corazón o de madera, de amor forjado o esculpido en piedra.
El trabajo que he hecho lo he hecho porque estaba jugando. Si hubiera sido trabajo no lo habría hecho.¿Quién fue el que dijo: bienaventurada la persona que ha encontrado su trabajo? Quien fuera tenía la idea correcta en mente. Ten en cuenta, que dijo su trabajo, no el trabajo de otro.El verdadero trabajo propio de una persona, es un juego. Maldita la persona que ha encontrado el trabajo de otro y no puede perderlo. Cuando hablamos de los grandes trabajadores del mundo, en realidad nos referimos a los grandes jugadores del mundo. Aquellos que sudan y gimen bajo el cansado peso del trabajo que tienen, no pueden esperar hacer algo grande. ¿Cómo podrían cuando sus almas son el fermento de la rebelión contra el trabajo de sus manos y mente? El producto de la esclavitud, intelectual o física, nunca puede ser grande.
Yo entiendo el enojo que tienen tus ojos ante esa partida que sin despedida se llevó tus sueños dejando despojos esperanzas perdidas.
Humedecen las lágrimas tus tersas mejillas tu rostro angustiado denota desidia demanda respuestas a inconclusas preguntas que su obstinada soberbia logró interrumpir con meras excusas.
No teman tus ojos calmar el enojo secar tus mejillas borrar de tu rostro sensaciones de angustia porque pronto vendrán nuevas experiencias.
Brillarán más grandes vivaces, curiosos como tantos otros que al cruzar destinos siguiendo algún sendero encontrarán ...el amor ...el amor verdadero.
En la nívea tersura de tu piel de seda, con el ígneo fuego de mi boca quisiera, escribir beso a beso mi última historia, hasta colmar nuestros ansias de amor.
Ya no hay más luz en mi vida que el fulgor de tus grandes ojos claros, con la dulzura de tu mirar has conseguido borrar de mi, las cicatrices de lobo herido.
Paz y calma has traído a mi corazón, que hoy te escribe con gran ilusión, en espera que de tu boca, deseo de dioses, aparezca un susurro diciendo que: ¡Si!
Me dejaré arrastrar por el hado esta vez, Pondré mi vida en sus manos, pues avizoro Un rayo crucial de esperanza, contigo, Sé que saldré de la penumbra a la luz.
ABRÁZAME YA. Siento miedo en este tiempo, Ansió el calor de tu cuerpo, Una soledad que causa temores, Esperando solo un abrazo de oso. La cruel distancia por la pandemia, Es una tormenta fría, que si hiere, Las fibras de mi alma esta apenada, y solo deseo sentir tus abrazos. Apachúrrame junto a tu cuerpo, Para ser el más feliz de los mortales, Quiero un tierno amor duradero, Para que sean el tónico de mi vida. En estas noches frías de invierno, Como añoro amanecer contigo, Abrazados entre sabanas de seda, Vibrando nuestros ansiosos labios. Deseo sentir tus pétalos en flor, atrapado con el listón de tus brazos, abrazos para estar en tu regazo, Miles de caricias que se dilatan. Abrázame y no me reproches nada, Solo deseo perderme en tus brazos, Para sentir el calor de tu bello cuerpo, Y aspirar la fragancia de tus poros.
Contigo descubrí el amor que hay en mi corazón, pensaba que sólo era tu voz lo que me daba color, pero también mi respiración. ahora regresas como una ola que se rompe a la orilla en la arena y regresa al mar, así mismo yo te quise esperar, imaginé este momento muchas veces, pero ahora no se si de verdad lo quiero, regresas, pero por ti, ya que no eres la misma sin mi, y aún que yo se que me duele decirte que yo no regresó, lo hago por ti por que tenemos que aprender a vivir separados, sólos, así como llegamos a este mundo, y como así mismo nos iremos, sólos y sin nadie. te quiero demasiado para mentirte y ser honesto me gusta, tal vez este mundo te asusta pero créeme que tendrás buenos días, tristezas y alegrías, y si en algún momento puedo apoyarte en algo, por que no? Siempre es bueno volver a encontrarse con alguien tan especial. AlcoN