De su pluma surgían versados poemas Manuscritos y notas como granos de arena Le acompañaban sus musas cada cual en su tema Y en un estante guardaba poemarios Y emblemas Nunca vieron la luz aquellos viejos poemas Se perdieron en las olas entre el mar y la arena Si tan siquiera un verso hubiese leído ella La mayor de las musas la reina la estrella
A través del cristal del universo Que separa el cielo de la tierra, Sobre la luna, yo puedo divisarte Caminando sonriente, con tu vestido Blanco y tu pelo color de las estrellas.
Ahora que estás cerca del cielo, Pienso que tu alegría ha de ser más, Escuchando la música celestial que los Latidos de mí corazón, hicieran para ti, en Tiempos que ya, de tu memoria se borraron.
Yo no estoy triste, porque puedo Disfrutar tan bien de tus alegrías, Al final, Eso era lo que yo quería, Mi alma goza contigo, con cada paso Que das, cuando atrevida pisas las nubes Y asomas tu cara, niña de ojos morenos.
San Jerónimo bendito vengo a ti, te necesito, mi existencia se desarma quiero encomendarte el alma.
Santo Patrón de Janitzio ando al pie del precipicio no he comprendido la vida, ¿cuál es su justa medida?
Docto Señor de la Biblia ¿tal desgracia quién concilia? ¿sin fe, con desesperanza, la paz interna se alcanza?
Soy fiel siervo, el más pequeño, anhelo cumplir mi sueño busco amor desesperado, dime, ¿cuento con tu amparo?
Miro la naturaleza tú cuidas esta grandeza, cuando navego en el lago pienso . . . ¿cuál será mi pago.
Para encontrarme contigo merezco duro castigo?, lacerado sangro inerte llego hincado a conocerte.
En tu templo fortaleza mi ser entero te reza, ojalá que me escucharas y a mi corazón le hablaras.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Isla de Janitzio, Pátzcuaro, Michoacán, México, a 05 de agosto del 2012 Dedicado al Señor Leonel Calderón López Reg. SEP Indautor No. 03-2013-051712171201-14
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Ahora que te canto desde esta voz que tiene mundos desnudos de ti y trajes del color de tus ojos. Y una corbata solida llena de miedos de que me olvides y un acto definitivo de elegancia que quiere ser forma de encerrarte.
no tengo cementos consolidados ni bolígrafos para escribirte y las melancolías dan las horas justas. Esos minutos que me someten a la cadencia y a la espada de querer tu miel. Esas horas nacidas de pie y que a veces, y casi siempre, no puedo evitar, son obscenas en mi pensamiento. Atrevimientos de la memoria que son perpetuos en la necesidad de poseerte.
Ahora que hay un ruido y un rodar sobre estas sabanas que me torturan… es que pasas todos los días a mi lado y dejas un viento que derrama aceites. Dejas aromas de ángeles despiertos que son vigilantes de esta cornisa de besos que espera la lluvia de los tuyos. Hay cintas de deseo y te vas por la calle moviendo el aire desordenado de tu cuerpo y mis ojos se hacen invierno. Hay lentitud en tus pasos y me pregunto de que vale si mirándote me dejas la herencia de verte y locamente se extiende tu figura sobre los sueños que me han de venir. Y la salmuera de mi nombre te llama… Te llama y tú sigues calle arriba Y a mí me dejas con el deseo nupcial de tenerte y viudos mis labios por morderte nombrándote.[/left]
Con lengua de flores de un abril frondoso con todo en las uñas de arañar un foso... Y el azahar de sombra de jazmín de broche y al cantar delirios y el amor es noche....
Porque sos quien me da muchas esperanzas las ganas, la visión, los sueños, la calma porque sos grande e infinita alegría mis profundos anhelos noche y día.
Porque me das amor de forma intensa porque tus besos a mi piel entregas volviendo mi llanto en ventura densa y tus caricias en mi cuerpo impregnas.
Porque sos el aroma a cielo inmaculado más la sonrisa y la mirada discreta y el ejemplo del amor abnegado.
Porque sos el tiempo de amar sin etiquetas y el trino de pájaros sincronizados… Porque así sos… Vida colmando mi vida.
Naciste en la villa Naciste mujer Naciste bonita Naciste sin padre.
¿Quién te protegerá Leve flor naciente de las fauces De la precarización? ¿Quién te protegerá de Todos los abusos Habidos y por haber Tanto fuera como dentro de tu mundo?
Por ser villera, bonita mujer Y sin padre a tener?
¿Quién?
¿Serás niña madre Orgullosa de ti e incipiente luz En la maternidad inducida por los hechos?
¿Y tú? nacido en la villa Varón y sin padre también
¿Quién habrá de protegerte Hoy día, nacido en la villa Sin posibles resabios De la conciencia Sesentista?
Serás explotado con un futuro De sudor y exigua paga. Y sospechado De todas las calamidades posibles. Porque Pandora cambió de tinaja Son los nacidos en las villas Los nuevos desesperanzados Porque la esperanza Sólo nace en una sola palabra Y realizada en otros espacios.
En blanco y sin vida alguna, yacían las hojas abandonadas sobre el viejo escritorio que lucía una gruesa capa de polvo.
Tristes y resignadas aguardaban el olvido cruel y definitivo, tiñendo sus almas de amarillento dolor; entregándose a una que otra telaraña.
Una noche la inspirada pluma llegó, rescatándolas con bellas y sentidas letras, borrando así todas sus arrugas y penurias; dándoles sentido a su existencia.
El "buen día", retumba como un disparo asesino y me preparo para salir al mundo con los dientes apretados en la única batalla que nos ha de tocar en esta, la mismísima vida cansina.