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Cuando no sientas amor por mí
acércate a lo sensible del corazón,
pregúntale si existe alguna razón
para que yo deje de pensar en ti.
Cuando veas nuestro romance desaparecer
como humo fugaz desvaneciéndose en el olvido,
explícale al alma porque no soy correspondido,
si existen motivos para dejarme de querer.
Cuando la dicha de este idilio haya marchado
en la penumbra de una ilusión perdida,
ven junto a mí para sanar esa herida
y regar las flores que se han marchitado.
Cuando tu interior deje de temblar
al respirar el aroma de mi presencia,
no te refugies en el escondite de la ausencia
ven y dile al amor ¡cuánto me quieres amar!
Julio Medina
4 de enero del 2011
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Poeta
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Me asomo a tus ojos, amor,
repaso las sumas y las restas
mientras se consume en mi boca
el rocío de la mañana.
A veces, por un instante
abarco tu imparable ir y venir.
Brillo desatado, intenso,
envuelto a la media luz
de una deshora.
Y escribo.
Escribo forjando la invasión
de un amor en nuestra piel
y entonces, te digo “te amo”
dejándome llevar, envuelta entre letras,
las letras de tantos poemas inundando
mis manos de ébano
reconocidas en la luz deseada
que mira hacia donde nosotros queramos
y orienta las sílabas.
Llega el tiempo de rosas
y te hablo, amor, elegante,
con íntima garganta y su voz,
esa voz que me hizo tan feliz
contando las estrellas en sus aciertos
coronados por los senderos andados.
Me pierdo, de nuevo amor,
en tu tiempo enfurecido
a deshora, y escribo.
Nazco serena entre el mar y su orilla,
ola desatada en tu beso,
en mi brisa, tanta vida
y acaricio la geografía de tu cuerpo
anclada en el vértice que florece al atardecer
para que me oigas amor,
lucero galopando en tus manos.
Y te amo, amor, te amo…
(Mónica López Bordón)
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Poeta
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Así te llamo el rostro de mi alegría
Tu piel hermosa y tu bella sonrisa
Tu mirada penetrante, que siempre me escudriña
El ventanal tu cuerpo donde tu alma se mira
Blanca y transparente como el agua que de la montaña se desliza
La ternura es tu vestido y el amor tu abrigo
La sencillez tu presentación
Aroma a flores el aire que exhalas
Clavel tus labios rojos
Textura de rosas tus manos
Esa sonrisa limpia como la brisa
Y el resplandor hermoso de tu mirada
Han cautivado mis sentidos
Enamorando mi alma
Respiro vida, al saber que me amas
De romance es el tiempo que me declaras
De sueños son tus palabras.
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Poeta
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Al pie de la cañada,
de tu amor, preciso,
en el verde borde
del torrentoso rio.
Glacial el tiempo pasa,
con total indiferencia
olvidando de otros tiempos…
sollozos, en la gramilla seca.
Tú me acostumbraste
así, al amor furtivo…
a los encuentros locos
de amor y despedida.
Serás mi amante siempre
y yo, tu eterna espera
para quitar esas polleras
de tu nacáreo cuerpo.
Delalma
Domingo, 02 de enero de 2011
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Poeta
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¡Hembra naciste,
Así lo dijo el doctor,
De hembra viniste,
Y te parió con dolor…!
Bendito el vientre que te cobijó,
Y en sus entrañas se formó tu ser,
Bendito el día de tu concepción.
Bendita tu divina mujer.
No hay dicha más grande que ser mujer,
Cual bálsamo para curar las heridas,
Causadas en la vida por el duro correr,
Muchos buscando éxito y algunos causas perdidas.
Ser mujer no es poca cosa,
Es un gran cargo y un gran atributo,
Ser la amiga, ser la madre, ser la esposa,
Yo hombre, te rindo tributos.
Lo bello de la vida es nacer sabiendo que contarás con una mujer,
Una mano amiga que te brinda todo, esperando nada,
Más que servir hasta envejecer,
Llevándose la felicidad sabiendo que desempeño un papel de hada.
Me deleito en el elixir de tus besos,
Que son mi vida, que son mi alimento,
Si cuando plantas uno de esos,
Se paraliza mi mundo, me corta el aliento.
Ser mujer es más que ser, es existir,
Con firmes propósitos que motivan su vida,
Dando lo mejor de sí, forjando un mejor porvenir,
Luchando vehemente en cada subida.
Ser mujer a veces es sufrimiento,
A veces la vida contigo es cruel,
Cuando un tonto te causa tormento,
Peor aún si te es infiel.
Hoy orgullosamente exalto la alegría que seas mujer,
Mi más grande amiga, amante y consuelo,
Acariciando tu cabello maravilloso ser,
En mis noches de furor y desvelo.
¡Hay de aquel que te haga sufrir!,
A Dios pido le robe la existencia,
Ningún hombre merece vivir,
Si no es para amarte con loca paciencia.
Mujer, joya preciosa de la creación,
No existe razón para dañarte el corazón,
Tú mereces estar en un camarín rodeada de hombres en adoración,
Quebrantados ante tu belleza, perdiendo la razón.
En la soledad y el silencio ¡calma!,
No preocupes si el tiempo agrieta tu piel,
Pues joven, fuiste fiera en la cama,
Fuiste mujer en tu luna de miel.
Si la muerte de mi lado te roba,
Antes de mi sueño profundo,
Me iré de esta vida en ataúd de caoba,
Sonriendo, satisfecho ¡pues fuiste mi mundo!...
Autores:
Osman Espinoza
[url=http://www.corazonespoeticos.blogspot.com]Edwin Yanes
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Poeta
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[img align=left width=300]https://fbcdn-sphotos-f-a.akamaihd.net/hphotos-ak-ash4/735217_447329141986961_1367277268_n.jpg[/img]Eres mi alma gemela, la dueña de mí ser.
La mujer que me da felicidad, locura y placer.
A quien amo con todo mí ser.
Prometiéndote toda la vida fiel ser.
Eres mi alma gemela, divina creación.
Quiero que sepas que eres la dueña de mi corazón.
La mujer que siempre me llena de pasión.
Con tus ricos besos sabor a melón.
Eres mi alma gemela, bella flor de mi jardín.
Niña de mis ojos, encanto de serafín.
Chiquilla tierna y encantadora, aroma de jazmín.
Quiero contigo compartir hasta que se llegue mi fin.
Eres mi alma gemela, musa de mi inspiración.
Basta con verte para perder la razón.
Volviéndome un loco, pero lleno de emoción.
Dándole un mayor sentido a mi inspiración.
Eres mi alma gemela, electa como mi esposa.
Con belleza sin igual como una mariposa.
A Dios gracias doy por darme una persona tan maravillosa.
Y a ti por haber aceptado ser mi amada esposa.
Por: Edwin Yanes
www.poesiagt.com
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Poeta
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Abrigar el deseo ferviente, de volver a besarte
Es el encanto mismo, que envuelve mis sueños
En la seducción, de todos lo sentidos, al nombrarte
En el espejismo de mis anhelos
La sublimidad de tu presencia, recreada en mi mente
Da brillo a momento mismo en que te pienso
Sacando del baúl de los recuerdos, el calor de tus besos
Aquellos besos, con sabor a cielo
En el espacio que formaban nuestros cuerpos
Con notas, en la musicalidad de un te quiero
Rompiendo cadenas, en el atrevimiento, de unos labios sedientos
Seducidos por tu aliento
Robándole al tiempo, el momento bello de nuestra armonía
En el espejismo de tu presencia y
La devoción que te tengo
Hace Transitoria la soledad,
Cuando vienes en mis recuerdos
Con aquella dalia que adornaba tu pelo y
El trino del gorrión, en el roble de nuestro encuentro
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Poeta
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En esta noche hermosa
Con su luna llena adornada de estrellas
Robando de vez en vez un beso de tu boca
Suspirando por ello
Recibiendo el fresco viento que tu pelo alborota
Y aspirando de la brisa el aroma a vida, alegría y otras cosas
Escuchando a lo lejos el canto de las olas
Recostado tu cuerpo en la arena
Moldeándolo con mis ojos
Con palabras entrecortadas sale un te amo
En esta noche hermosa
A coro con el canto de las olas
Es el clamor que sale de tu boca
Cuando te quemo con mi aliento
Y mis manos recorren tu cuerpo de diosa
En esta noche hermosa
La luna por testigo, y las estrellas curiosas
Me entregaste tus besos cual pétalos de rosas
Con el ruido incesante del romper de las olas
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Poeta
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La noche se entrañando en mi camino
Ayer yo no quería nueva suerte
Después de la expresión más conmovida
El paso se presenta en libertad
Y tanto cuanto pudo imaginar
Marcando los espacios con tal brillo,
E cuando mucho alén de veras brillo,
La vida molda ahora su camino
E cuando se desea imaginar
Ya no concibo más la mala suerte
Y sigo cada luz en libertad
Mi alma de tal forma conmovida.
En cuanto con firmeza conmovida
Allá esa emoción tan fuerte brilla
Osando con ternura libertad
Tramando el corazón claro camino
Y cuando se anuncia nueva suerte
En el futuro quiero imaginar.
En lasitud pudiera imaginar
Las fimbrias en las lunas conmovidas
Alumbran en verdad la inmensa suerte
Y así en mi certeza nuevo brillo
Y sigo con blandura ese camino
Buscando solamente libertad.
Mis pasos en las calles, libertad
Lo patio, tu placer imaginar
El sol, el helianto en mi camino
La historia que se ve hoy conmovida
E así te preguntando busco e brillo
Volviendo a vivir diversa suerte.
Y cuando la expresión molda la suerte
Cambia cada paso en libertad
Y apenas me envolviendo raro brillo
En la dulce mañana imaginar
Mi estrada en la luna conmovida
Expresa en emoción todo el camino,
E sé dese camino, intensa suerte
La noche conmovida, libertad
En cuanto imaginar de ti el brillo.
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Poeta
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Pensando en ti
se emociona el corazón al latir,
desaparece cruento sufrir
y tu nombre invoco dentro de mí.
Ese recuerdo es del alma el aliciente
invade mi ser de regocijo,
al solo pensar en estar contigo
trae alegría a mi presente.
Pensando en ti
desmedido fue el amor que me diste,
innovaste mi interior que estaba triste,
de las amarguras me desprendí.
Resplandeces en el abismal de la memoria
la más hermosa alegoría guardada,
al pensar en ti, doncella amada
con tu querer escribes mi historia.
Julio Medina
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Poeta
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