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Escondido en las estrellas y abrazándose a las sombras,
va cantando fuerte el viento por su camino de hojas.
va cantando que te amo
y que tu amor me solaza,
le está contando a la luna,
de nuestro amor y esperanza.
Y me he parado en mi ventana a escuchar su cantata...
¡como suenan los mariachis!
¡que dulce el son de guitarra!
que lindo susurra el viento, su hermosa serenata.
Más allá, en la distancia y escondida entre las nubes,
una luminosa estrella me guiña sus ojos.
Me cautiva con su encanto,
¡que hermosa existencia!
va arropada por la noche, vestida de plata y sombras.
A mis espaldas una voz, que me anuncia su presencia,
sus finas manos me acarician,
¡es mi estrella que está cerca!
Y me habla al oído para decirme que me quiere,
y me habla despacito, cual suspiro enamorado.
Es mi dulce mariposa, candelilla encendida,
que en concierto de grillos, va cantando... te amo.
he cerrado mis ojos ante la humedad de sus labios,
los he sentido tan suaves como pétalos de rosas,
que me envuelve en su aroma y me seduce su fragancia.
Y se agolpa la noche en el cristal de mi ventana,
se despiden las estrellas,
¡pronto florecerá el alba!
Y se conjugan nuestros cuerpos,
a causa del frío viento.
Mientras... nos arropa la noche... y nos viste de plata y sombras.
f.n.h.a.
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Poeta
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