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Ayer te amé… Con toda el alma mía. A tu lado, en mis días, no faltó nunca el sol. Hermosa la luna, brillaba serena. Y un lucero encendido, cantaba de amor.
¡Ay! Que dulce mi vida, el sabor de tus besos. Tus caricias las llevo, impregnada en la piel. Y tú aroma sutil, es fragancia bendita. de jardín florecido, en gladiolos de amor.
Cuando cae la tarde, en brillantes colores. Y el gorrión ya no canta, sus canciones de amor. mi alma se agita, en latidos a raudales. Al saber que te amo… Tanto; y más que ayer
f.n.h.a.
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Poeta
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Esta noche vamos a encender la flama, esa hoguera insaciable que incendia la pasión. Esa llama es una ardiente tentación, con deseo intenso te reclama.
Juntos explorar los secretos de la intimidad, descubrir el sendero del placer y la lujuria. Saquear tu inocencia con la fuerza de mi furia, para llenarte de amor y así calmar la ansiedad.
Dame el candor de tu cuerpo exquisito, quiero desnudar la piel y despertar mi locura. Regálame esta noche para saciarme de ternura, devorando la sensualidad al navegar en tu infinito.
Julio Medina 21 de diciembre del 2010
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Es en la frontera del cielo que los buenos se confrontan, y es en total barredura que las escobas se encuentran,
pero, sin nunca dejar de soltar las piaçabas, que hacen "ensuciar" la limpieza del piso.
El cal de la tierra, claro cuna de la vida, el cielo y la tierra, dulce ilusión perdida.
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Vuelan abejas, agitación en la colmena, burbuja de miel!
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Será momento de hablarle a Dios pues ha corrido la tinta, como ríos, grabando en papeles las caras de miles desaparecidos… y nunca se hizo presente. ¿Cuándo será el momento? que de una mirada al huerto para que vea tanto niño muerto que no pidieron venir, ni morir sin alimento. Herodes que persiguió a Cristo hoy se hace llamar presidente, los esbirros se reúnen con el clero… y los Herodes con el papa. Será momento de hacerle ver que los pobres no nacen mas en pesebres, ni tienen dónde nacer, que no hay escuelas ni hospitales y se mueren de hambre y enfermedades antes de hablar, o de llegar a entender.
¡Si!... Mientras el pueblo se muere de hambre... ellos, los líderes, trafican en contubernio… armas, comida, vestidos… medicinas; el negro destino se viste de blanco con un besamanos al santo padre. ¡Se acaba el agua!... en lenguaje de babel claman que el pobre no se bañe ni tome agua, para que el rico riegue sus amplios jardines, lave sus carros y bañe a sus perros. Será momento de decir… ¡basta! que las escrituras no llenan ni enseñan nada, centenares de veces corregidas… mentiras que se dan por verdaderas. ¡¡¡Dios, Si vas a venir, no esperes mil años más!!! los revolucionarios, ya no son proclamados santos; ya no tienen por destino los altares, ni sueñan con dormir en el vaticano.
Carcome la vida tanta injusticia vista, dicen ¡no! al aborto, mientras amparan la pedofilia; Será momento de hacerle ver que la vida del pobre… vale menos, que la del perro de un rico.
Delalma http://ligcueva.blogspot.com
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Ayer contraías matrimonio en el altar, amor eterno le jurabas. Te escuché decir cuanto le amabas no me pude contener y comencé a llorar.
Corrí desesperado. ¡Cómo un loco! Sentía que se me acababa la vida. No es sangre lo que derrama mi herida, es tristeza la que me consume poco a poco.
Ahora te pienso rendida en otros brazos entregando el amor que una vez fue mío. Al no poder llorar más tan solo me río, las carcajadas acompañan mi fracaso.
Julio Medina
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¿Cómo acabar de morir sin sentir que estás en mí? te siento aquí, tus palabras duelen pero no matan. ¡Cuánto yo más quisiera que éste no sea el fin! es el amor que te tengo, el que me ata. Púas de acero atraviesan mis sienes me lacera el alma el haberte perdido porque en mi mente vas y vienes, y a mi vida... ya no encuentro sentido. No será una lágrima que mi mejilla deslice, ni dos minutos que mis ojos lloren… me he condenado a quererte más allá de la muerte, no lo dudes amor... ¡Siempre te esperaré! Delalma Miércoles, 29 de septiembre de 2010 http://ligcueva.blogspot.com
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Ven amada mía, caminemos de la mano salgamos como dos enamorados porque es así que estamos desde que nos encontramos. Que sepa la gente que todo es mentira que no es como ellos dicen… que tú me has engañado, con otro querer. Tómame del brazo y levanta la cabeza deja de llorar y no les hagas caso, yo se que tú me quieres y me amas como siempre deja que murmuren, es cosa de la gente. Tu eres mía solamente, mi fiel esposa mi amor… mi vida entera. Vamos… crucemos esa puerta deja la vergüenza que a mí no me interesa. Ven amada mía aférrate a mi brazo mira que nos miran tus ojos que lo digan míralos de frente y deja que mascullen. Seca ya esas lágrimas que no quiero pensar vamos a pasear y no es para llorar yo te creo, estoy contigo para todo lo que quieras. Delalma Sábado, 09 de octubre de 2010 http://ligcueva.blogspot.com
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Perdido en la furia de un día de sol, no miro la pénuria, pero veo el pañol que estalla mi alma, de manera sutil, me invade la calma, perforante buril.
Quiero por fin ser feliz, pero la felicidad es surto, que tiene muy plazo corto, que el tiempo no dice.
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Helada tundra fuerza opresiva del mal, cuerpo carnal.
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