Veintiocho de diciembre, conmemoración pagano-religiosa, en sus celebraciones En honor y gloria de infantes, por sus dolores y desesperaciones Por sus llantos, sus lágrimas, por sus gritos y por sus ejecuciones Dia de los inocentes, los niños de Belén, en sus nobles resignaciones
Historia que ha corrido con sus mitos, verdades y sus leyendas Desde hace dos mil años se les recuerda a esas masacres horrendas Asesinato de niños inocentes, que los arrancaron de sus humildes viviendas Soldados romanos, valientes con infantes, sin que nadie los defienda
Cuenta la historia y la biblia, de un rey malvado y sanguinario Rey Herodes I el Grande, vasallo del Imperio Romano y un alto funcionario Temido, sagaz y asesino, de sueños malvados imaginarios Celoso hasta de su familia, veía en el niño Jesús a su adversario Cruel e iracundo, envió a los tres reyes magos con un mensaje temerario José alentado en sueños, tomó al niño y a María y huyó a escondidas por caminos legendarios Se refugiaron en Egipto, en casas humildes que les brindaron sus vecindarios
Desde la edad Media, otra fiesta se fusionó con la de los inocentes Celebración pagana, “fiesta de los locos”, jocosa de bailes y risas sorprendentes De clérigos jóvenes, burlándose de obispos y papas sin ningún inconveniente Con indumentarias estrafalarias y canciones sarcásticas y carcajadas sonrientes “fiesta de locos” con procesiones de inconformidad, de maltratos como picados de serpientes Con bromas que les hacían a los incautos, de mentes ausentes
Fiesta de los santos inocentes, de leyendas y narraciones fabulosas De creencias, rezos e imaginaciones, de danzas macabras misteriosas De burlas, de dichos, de reírse sin intención de molestar, siendo generosos y graciosos Cambiar azúcar por sal, de comidas apetitosas sospechosas Lanzando noticias falsas, de clamores asombrosas y dolorosas Entregar y dar regalos en cajas vacías, de expectativas maliciosas Adelantar la hora del reloj, de retrasos de angustias sudorosas Billete pegado al piso, de caídas y burlas vergonzosas Baño ocupado, de esfínteres que aprietan de ganas angustiosas Llamadas falsas de aquellos amores furtivos, de burlas caprichosas Caíste por inocente, te dejaste engañar de chanzas peligrosas Dia de los santos inocentes, fiesta religiosa maravillosa y algo misteriosa
“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga diciembre 28-2020
Desde el latente corazón, sabe el latido, del sentido y la pena, late según el son del sentimiento, del importante matiz de su latencia. Y es su latir, una melódica o alocada canción, que sobresalta o serena.
Turgente corazón, que se desboca o frena, en el pecho sus golpes, ensancha la emoción, y es tanta la pasión cuando golpea, que infla las venas, en su ímpetu arrollador, y sale al exterior cuando el amor llega.
Corazón, que latiendo se condena, al impulso irrefrenable de la vida, late apaciblemente, o se sale del pecho en su carrera. Es tanta la emoción, cuando se altera, que hasta nace el sudor, la lágrima se licua y se desvela, a las mejillas, llega la pasión.
Corazón de algodón o de madera, grosero o sutil, libra o condena, son sus latidos como sentencias, o voces que anuncian el perdón, de tal manera, que es juez o sanador, que alivia o impertérrito desprecia, sabe también, de hambres y miserias.
Ardiente corazón, que ríe y llora, acompasados gritos cuando afloran, armónicos latidos que perdonan. Sabe de fantasías el corazón, que sin saberlo se enamora, y es tan voluble su canción, que, a veces, quiere reírse y llora, pero enseguida, se aprende la canción.
Latente corazón, que en su mazmorra, va de la realidad a la ficción, a veces, se amodorra, más, casi siempre, se abre al exterior, y es el amor que se acomoda, a cada latido, de su febril canción.
El corazón me ha dicho que lejos de ti no puede vivir Que no le haga mas al cuento y que no me atenga a mi suerte Que no puede pasar un día mas sin verte, es por ti que late Me ha dicho que te busque, que no aguanta más sin ti.
Mi corazón me dice que te necesita y que te necesito Que para el eres su luz su faro, me grita que te busque Quiere fundirse en un abrazo contigo, para sentir el latir de tu corazón Me dijo síguela, síguela a donde vaya, me dijo síguela que la extraño.
El insiste que no puede vivir ni un día más sin verte Necesita verte de nuevo, para darle sentido a sus latidos No quiere morir de amor, quiere saber que esta vivo y que late por ti Mi corazón te extraña, me dijo que está muriendo por ti.
Yo me hice el desentendido, y al corazón ignoré Ya que yo no se amar, pero el me repitió que sin ti se muere Me insistió que de ti está enamorado, que te siga por que se muere Sonó tan sincero, que aquí me tienes muy enamorado de ti, Nadia.
El impulso de los guijarros salteadores de caminos Entrecortada hierba estaba escondido el mirlo Achuchaba el trueno el relampago crispaba el cielo alimentando el heno
Pulsamine el envierno de cabalgatas austeras por los tiempos venideros con costosos encierros Encasilladas ausencias de pretroyanos piromanos En ciernes de su piel pagana encienden incienso al alba Descendientes de centollos descendiendo por el agua
Cruel nada nada en la nave del posible Inmaculado destino Precoz disimulo del alguacil del inframundo Chismorreaba de como mostrar la daga alejando tesoros de la ambicionada inmortalidad Hiel sin hiel Aguaceros de miel en espera de un crujir parpadeante del vivir ajeno
Acuestate niño con ajo y pereguil en las nalgas Auyentando corvos y corzos que maizales desean Tonos embriagadores claman tu quehacer No les escuches por tu bien que solo envidian tus pies como un ciempiés con puas para introducir en tu piel para arrebatarte tu sien con el elixir de un mentor ciego de poder
Virgencita del Rosario, tu ahuehuete tan centenario, los niños, la vieja hacienda, un ayer que bien se enmienda.
Noble Guerrero Chimalli de cantera, real teocalli, reconoce, acepta la obra del mexiquense que te honra.
Has sufrido tempestades, polvaredas, lodazales, ¡ahora, tienes firme progreso, que no haya retroceso!
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Municipio de Chimalhuacán, Estado de México, México, a 09 de noviembre del 2012 Reg. SEP Indautor No. 03-2013-051712171201-14
Sangran las manos, del hábil artesano, fibrosas las ideas, artesanales sueños, labrados en la roca, artísticos recuerdos, con los cinceles mágicos, de sus goces auténticos.
Entre cuerdas fantásticas, los dedos se entrelazan, dando sonido al mundo, que al sentimiento alcanza. La armonía que solloza, entre los sueños cósmicos, cual alma levitando, en las humanas notas.
Ha visitado el mago, a la indecisa mente, y ha dejado la magia, en la perlada frente. La armoniosa cosecha, que de sus manos sale, un manantial que nace, de sanadoras músicas.
Arranca del sentido, los acordes del tiempo, que al sentir se diluye, entre los sentimientos, una lágrima rueda, una perla sonora, un amor sin fronteras, en las mágicas notas.
El alma se desgarra, se conmueve y se apena, desprendiendo la esencia, que de sus manos mana, y la paz deslizándose, sobre la piel desnuda. Directo a las entrañas, el amor vive y muda.
Las olas musicales, acarician el alma, y el sentimiento fluye, armoniosa cascada, va arrancando los versos, que escondidos estaban, temerosos soñando, cada nota una lágrima.
De amor el artesano, sus manos ha esculpido, en sus ojos de lienzo, ha pintado su aliento, ha dibujado el tiempo, con la sombra a su lado.
Las estrellas me hablan de ti De lo hermosa que eres, que me anime a hablarte Me hablan de tu hermosa sonrisa Me describen lo bonita que eres.
Las estrellas que cada noche te miran Enamoradas de tu alma, me cuentan de ti De tus sentimientos puros, insisten en que te hable Pero es que yo, no se amar.
Ellas me dicen que no pierda el tiempo Que debería hablarte y decirte mis sentimientos Pero el temor a ti, me detiene Miedo de pensar, que no te guste lo que siento.
Las estrellas enamoradas de tu brillar Me reclaman, por no confesarte lo que siento Yo no se que hacer y es que tu Haces que yo pierda la razón, con solo pensarte, Nadia.
Con respeto, amor fraterno, con permiso del Eterno, estoy trazando una franja para llegar a Comanja.
Pueblo de paz por principio integrado al Municipio Coeneo de la Libertad por el que tiene lealtad.
Salvaré estorbo o zanja deseo llegar a Comanja fiel comunidad pujante que solo ve hacia adelante.
Tierra sagrada soporte de la zona centro norte denominada Meseta P’urhépecha, de alma inquieta.
Linda región michoacana que a los vecinos hermana; hoy, el tiempo no me alcanza me urge llegar a Comanja.
Que está rodeada por cerros legendarios todos ellos custodios de su pasado de su presente porfiado.
Ya diviso las colinas, arena, grava, divinas, de aquel de La Calabaza mole añeja que me abraza.
Guardo aprecio por Mazkuta y Huaracha, sin que haya disputa, bien venero a San Miguel, Kupambam cima, vergel.
Siento, ahí, cariños muy míos, miro aquellos sembradíos de maíz, con fe, esperanza, ansío llegar a Comanja.
Rinconcito del encanto de un hospitalario manto que, al turista visitante, cubre con trato importante.
Que caminos tan hermosos quiero visitar los pozos, los pozos de la barranca, esta idea nadie me arranca.
Voy cargado de alabanza debo llegar a Camanja pa’ ver al Santo Patrono que está posado en su trono.
Mi San Juan Evangelista divino apóstol altruista, discípulo el más amado de Jesús nuestro adorado.
Juro hincarme en frente de él humilde . . . sin ningún oropel entonar sus mañanitas, rezarle en misas benditas.
Con felicidad a ultranza ya voy llegando a Camanja, pretendo pasar las fiestas bailando a ritmo de Orquestas.
Muero por comer churipo, chapatas, uchepo bien rico, tomar atole, mi charanda, porque Dios así lo manda.
Gracias, bienaventuranza, por fin llegué hasta Comanja lugar de sombras, comales, donde se alivian los males.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Comanja, Municipio de Coeneo de la Libertad, Michoacán de Ocampo, México, a 26 de diciembre del 2017 Dedicado al Señor Profesor José Nieves Razo Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
Lejos del calor y del abrazo, distancia que separa la cordura, metro y medio, o la total distancia, la inmensa eternidad de la locura.
Palabras inalámbricas huidizas, digitales imágenes que vibran. Se ha adueñado del tiempo, la malvada y maléfica. Una sombra chinesca, pletórica de dudas.
No importa el nombre, ni el color, ni la raza, ni el acento siquiera, volátiles palabras. No importan los ropajes, ni vestimenta alguna, ni importa la estatura, ni el color del cabello, ni las manos huesudas.
En la audaz singladura, se ha quedado en el centro, en el profundo núcleo, en el vértice opuesto, en el abismo lóbrego, en el íntimo instinto, en el leal sentimiento, se ha quedado la vida, replegada hacia adentro.
No hay banderas ni símbolos, ni furiosas trompetas, ni siquiera un suspiro, ni una voz que se altera. Una esperanza asoma, llamando tras la puerta, con los nudillos rotos, con el alma dispuesta.
Tengo esa duda, de que pasara si tu lees lo que escribo Me queda esa duda, de que pasara si tu te enteras de lo que siento Tengo esa duda, de poderte hablar por primera vez de mis poemas Esos poemas que solo los escribo, pensando en ti.
Me gustaría saber lo que pensarías, si leyeras mis poemas Quisiera saber, si tengo esperanza de hablar contigo Me muero de ganas de saber si te gusta lo que lees Quiero saber, si mi esperanza es buena y tiene cura.
Se que no soy el mejor poeta, ni el mejor escritor Pero es la primera vez que le escribo a alguien, y lo hago con el alma Quizás al leerlos nunca me hables, pero solo te pido una cosa No te enojes lo que he escrito lo hice con mucho cariño.
No lo tomes a mal, mis versos son sinceros Al escribir en lo único que pienso en ti Y es cuando logro escribir, tu eres la razón Eso lo comprendí a la perfección, espero no te molestes.
Solo pido que me comprendas y si tengo algo de esperanza, házmela saber.