Tú eres la rima que nunca termina; los imperfectibles versos que nunca dejo de escribir, porque no encuentro las palabras que terminen de nombrarte.
Busco entre fonemas la dulzura de tu voz, miles de metáforas me confunden, pero solo elijo aquellas que me marcan tu ritmo y me hablan de lo intenso de tu amor.
No importa si los versos no se ajustan a la métrica y no puedo formar un soneto, solo quiero aquellos versos que… libres se decanten y te muestren… mi adoración.
Ha sido todo tan rápido Esta noche la he visto La he tocado, besado y cogido de la mano No me lo creía, era imposible No sé qué buscaba Pero no paraba Me dio la mano y salimos al patio La lágrima caía mientras oía Te ha costado verlo He intentado volver No he podido, estaba dormido pero La he tocado, besado y cogido de la mano
M.
Lo más de lo más, mientras dormía. Luego la triste realidad.
Buenos días vida Buenos momentos Siempre con la familia Son los mejores,ví un ruiseñor cantar justo cuando mi papá llegó de trabajar,mi mamá hacia la comida y yo juntos con mis hermanos jugábamos con los monitos.
Este poema se lo dedico a mi papá Raul Macías Cuarenta y a mi familia y a todas las familias del mundo que luchan por salir adelante en este mundo.
De perlas y corales, la playa de mi corazón, Se ha vuelto a cubrir, Un rumor de olas esperado, con el viento Llega y el alma se me agita…
Esperando que de ese verde mar, color De la esperanza, Aparezcas tú como un chorro de agua dulce, Para saciar mi sed de espera.
Todo puede suceder cuando la magia del amor, tiende su vara y guarda, Los secretos en la sonrisa de la luna, Trocando en alegrías las tristezas.
Tú que me has pintado azul el horizonte y Quitado las espinas del camino, Tú la vida en tus poemas me has devuelto y Ya te quiero mía, aunque nunca lo serás.
Mar y distancia de mis brazos te separan, mas Como nada hay imposible para el amor, A tu encuentro ha marchado, llevándote mi voz Mis caricias y mis versos.
Vida hay después de la muerte; tus manos me lo dijeron en aquella madrugada mientras rozabas mi cuello y plasmabas en mi rostro tus caricias y tu beso. Desde lejano horizonte he recibido el consuelo y desperté en plenitud y de tu placer bebiendo. Hay un amor grande y álmico que se extiende en el secreto hasta mi alma en soledad. No hay barrera en este encuentro; tú sentiste mi oración y te acercaste certero tan benigno y suavemente para acariciarme en sueños; y me agradeció tu ser por mi clamor y mi ruego. Desde entonces sé que hay vida; que el espíritu es eterno, mi caro amigo y hermano que has descorrido ese velo que injusto nos separaba. Hoy por tanto te agradezco.
Este poema lo escribí después de tener una experiencia espiritual con el cantante Camilo Sesto....cuando tenía pocos días de haber partido de este mundo.
Hace mucho que nuestros cómplices de antaño Nos abandonaron, El sol dejó en el cielo densos nubarrones Y en los ojos, aguacero.
Esa luna llena del milagroso mes de Octubre, Que presta nos acompañó, Hasta la alcoba de mi casa para contemplar, Tu fase de niña a mujer, se ha ido.
La noche está vacía, sin estrellas en el firmamento, Solo Venus de nosotros no se olvida, A la distancia brilla el astro Con una sonrisa roja, igual que tus sublimes labios.
Un día más a tu lado para poder amarte, para poder mirarme En tus grandes ojos tiernos, Para seguir de ti enamorado, acariciando la plata Fina de tu larga cabellera.