|
Nada Para Fazer
A cena se passa na Argentina, no ano de 1910.
Cena Única
Uma sala decorada com cores vermelhas berrantes. Em dois sofás estão sentadas Aline e Amanda. Elas estão totalmente entediadas.
Aline- Mais um dia na pasmaceira, hein, Amanda?
Amanda- Pois é. Mais um dia sem nada para fazer.
Aline- Creio que vamos achar algo para fazer.
Amanda- Não creio nisso. Não tem nada mesmo para fazer.
Aline- Devíamos ir ao parque, não acha?
Amanda- Não. Hoje está um péssimo dia para ir ao parque.
Aline- Ah, não fale assim, você sabe o quanto o parque está todo dia belo e agradável.
Amanda- Isso na sua concepção. Na minha todas as terças-feiras aquele parque é horrível.
Aline- Vou chamar Emerenciana para nos trazer alguns biscoitos. O que acha?
Amanda- Acho uma boa ideia.
Aline pega um sininho e começa a tocá-lo insistentemente. Emerenciana, a criada, aparece na sala.
Emerenciana- Sim, senhora?
Aline- Traga-nos aqueles biscoitos amanteigados, por favor.
Emerenciana faz uma mesura e sai.
Amanda- E como vai o seu relacionamento com o Josh?
Aline- Péssimo. Eu e ele estamos brigando feito cão e gato.
Amanda- Você precisa ser menos agressiva e um pouco mais compreensiva, Aline.
Aline- Eu sei. Eu tento ser assim, mas eu não consigo.
Amanda- Ah, consegue, claro que consegue. Você precisa se esforçar mais.
Aline- Mas e você e seu namorado?
Amanda- Ele viajou. Eu já tinha te contado isso?
Aline- Acho que sim. Não me lembro bem. Viajou pra onde?
Amanda- Portugal. Não me lembro a cidade.
Aline- Tomara que ele não fique lá por muito tempo, não é mesmo?
Amanda- Sim, também espero...
Aline- Já sei o que podemos fazer.
Amanda- O que?
Aline- Podemos fuçar um pouco no quarto do meu irmão. Ele também está viajando e queria ver o que tem dentro do quarto dele.
Amanda(levanta do sofá)- Excelente ideia, Aline! Vamos logo.
Aline se levanta do sofá. Ela e Amanda sobem uma escada. Ouvimos as duas conversando e rindo. O pano desce rapidamente.
Fim
|
Poeta
|
|
Al presente, si en mis manos sostengo las gavillas las del hortelano, de sus siembras, en los caminos que brindan alimentos;
Al presente, próximo a todos cuyos rostros distingo consciente de sus labores en los marcos de sus esfuerzos;
Al presente, cercano a los aljibes al agua que brinda el sustento ese sagrado elemento que nutre santifica y resguarda los surcos de la tierra y su esencia, puedo comprender el mensaje de las manos amigas de quienes comparten el pan y las mesas de sus corazones, extendiendo el vino como saludo, celebrando el triunfo la dura labor por la cosecha, por la dicha de sentirse vivos esperanzados en el porvenir de sus sueños en un mundo avaro y mezquino que no puede ni podrá jamás contra el ímpetu de las buenas almas.
|
Poeta
|
|
Un corazón inmenso en dos piernas limitadas Una piel como pétalos de rosa en un manto estrellado Unos tubos comunicantes atravesando un gusano sideral Un brillante reflectando al sol dentro de una caja de cartón Unos ojos de miel para engullirte en el caos Una lengua de fuego desparramando mil sabores Una consciencia dormida en un ahogo ácido Un tiempo que derrapa en unas manos inespertas El clamor de unir por amor blancos y negros La música calma el dolor de no ser un uno perfecto y solo un beso nos sacia la sed que tenemos El gigante comulga con el enano que lleva dentro pues solo puede sentir con él Amarse única respuesta para no morir de inanición Mirarse desde hondanadas tan profundas para imitar a los ríos que llegan al mar Solo en el compromiso de regalarse al otro La vida aparece con toda su confusión y hace brillar su esplendor
06/11/2021 ©Dikia
|
Poeta
|
|
“Voz digna . . . de fonoteca.”
El Monumental de luto hay silencio en absoluto, su micrófono se apaga, bocinas no dicen nada.
Ha muerto Sánchez Orozco hombre afable nunca tosco de palabra tersa fina, reposada, paulatina.
Locutor televisivo de tono suave expresivo, que del arte fiel gustaba, pues, pintando se extasiaba.
El “Perraco” le decían, así, muy bien lo conocían sus amigos entrañables por sus modales afables.
Voz digna de fonoteca ha enmudecido el Azteca, ya dejó de hablar Melquiades, estas no son nimiedades.
Cuando el Coloso se cimbre extrañaremos su timbre: “¡gol, anotado por Negrete!”, ¿quién portará su escudete?
Melquiades Sánchez Orozco don, talento, reconozco “La Voz del Estadio Azteca” que Dios en el cielo . . . beca.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Ciudad de México, a 05 de noviembre del 2018 Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
|
Poeta
|
|
Tú con tus colores pintas mi cielo de tantos colores, lo pintas con esos colores que me enamoran, pero el color mas hermoso es el de tu tierna sonrisa, pues con tu sonrisa pintas mi universo de colores, esos colores llenos de vida, das alegría a mi vida, con tus colores mi universo deja de ser opaco para llenarse de vida.
Tus colores le dan vida a mis letras grises, mis versos llenos de vida gracias al color de tu alma, por cada verso que te escribo es un beso que me debes, quisiera probar los colores de tus labios, para que pintes mi alma con tus bellos colores y cambies mi color gris, por esos colores llenos de vida.
Quiero navegar por tus colores, para que a si pueda entender que la vida está llena de infinidad de colores, pero los que me llenan de vida son tus colores, píntame en mi cuerpo aquel lienzo que tanto anhelas, cúbreme con tus colores, píntame a tu antojo, solo deja intacto mi corazón.
Pinta mi alma como esos colores que la enamoran, déjame entrar al color de tus ojos, para enamorarme cada vez mas de ti, no me dejes en mi mundo gris, en abrazo píntame de tus colores, ponme esa marca tuya para que ya no me vaya y quede enamorado de ti por toda la eternidad.
Si las preguntas nos separan, lo que nos une es una canción, aquella canción que rima con tus colores, pinta mi guitarra para que salgan de ella canciones coloridas que logren enamorarte, cubre aquel color gris de mi cielo y píntalo de los colores mas hermosos que salen de tu alma.
Píntame las llaves de tu alma, para que yo pueda entrar y pueda dejarme llevar por tus colores, invítame a pintar como si fuéramos dos niños jugando con los colores de la vida, dame aquel beso que tanto anhelas para que nos pintemos de todos los colores y entendamos que esto es amor verdadero.
|
Poeta
|
|
O Mosteiro Secreto
A cena se passa em Nottingham, no ano de 1954.
Cena Única
Um mosteiro obscuro, escuro e com uma atmosfera de mistério e segredo. Há três monges conversando entre si. Um deles se chama Addison, um rapaz de pele branca, olhos verdes e alto. Outro deles se chama Aldan e o terceiro se chama Aldric .
Aldric- Você tem certeza, Addison, que nosso mosteiro continua totalmente secreto?
Addison- Tenho plena certeza, meu amigo. Nosso mosteiro não é conhecido por ninguém.
Aldan- Já não é conhecido desde sua fundação nos anos de 1930.
Aldric- Mas estou totalmente preocupado que ele possa ser descoberto.
Addison- Acho bem improvável. Estamos em um lugar distante da cidade e ninguém vem por esse lugar.
Aldric- Sabe, eu não acho que vamos passar muito tempo mais encobertos.
Addison- Por que acha isso?
Aldric- Porque lugares nunca ficam escondidos. Sempre são descobertos.
Aldan- Não esse. E se for descoberto, podemos dizer que não é um mosteiro que se dedica as artes da magia e bruxaria.
Aldric- Não podemos dizer isso. Tudo aqui prova o contrário. Os livros que temos, os símbolos que fizemos nas salas, as pessoas que estão aqui.
Addison- Tem razão. Já pensei que deveríamos nos mudar para um lugar bem menos conhecido.
Aldric- Não podemos fazer isso também. Este lugar tem a energia correta para fazermos nossos rituais.
Aldan- Sempre podemos achar um lugar correto, Aldric.
Aldric- Não sei se conseguiria me acostumar a outro lugar que não Nottingham. Aqui parece ser a melhor cidade da Inglaterra.
Addison- E de fato é. Mas podemos nos mudar se nossa segurança assim o desejar.
Aldan- Outro lugar seria realmente uma boa ideia. Este lugar para mim é pequeno e pouco aconchegante.
Aldric- Preciso parar de pensar que vamos ser descobertos. Eu estou ficando paranóico com isso.
Addison- Claro, quantos padres e monges realmente se dedicam a bruxaria dentro da Igreja Católica?
Aldric- Já quis parar de fazer tudo isso, mas sei que não consigo.
Aldan- É realmente viciante, não?
Aldric- Sim, não tem como parar.
Um monge entra e fala no ouvido de Aldric.
Aldric- Temos que ir. Precisamos fazer o nosso ritual do dia.
Aldan- Ótimo. Já estava sentindo falta de um bom ritual.
Aldric, Aldan e Addison saem pela direita. Ouvimos os pássaros cantando. O pano desce lentamente.
Fim
|
Poeta
|
|
“Por Dios que vales la pena . . .”
Eres muy dulce, Tecuena, como toda la “miel buena”, bendita seas, Tecuena, donde quise a mi morena.
Pareces un sombrerito que flotando está en el lago, figura de panquecito de las olas empalago.
Remando voy a tu encuentro quiero evitar la congoja en las aguas, ya, me adentro, visitarte se me antoja.
Las ondas en ti convergen, burbujeantes te oxigenan, espumas que se sumergen poco a poco se serenan.
Todos los peces te adoran, trucha, charal celestial, en lo profundo bien mora pescado blanco imperial.
Andan bogando las naves, altas montañas cercanas, al trinar, concierto de aves, el viento hace caravanas.
Sopla, silbando, resopla, cuatro puntos cardinales de norte a sur, como copla, lo envidian algunos mares.
De los volcanes provienes, a Pátzcuaro perteneces, p’urhépechas son tus genes isleños, . . . te los mereces.
Una cruz, allá, en la cima, al frente queda Janitzio, Yunuén, Pacanda, te estiman, el aprecio es beneficio.
Que las nubes se desgajen aguaceros bañen rostros, que las gotas siempre bajen Tecuenita es de nosotros.
Quisiera pisar el muelle tu farito me enternece, que este amor por ti se selle guía mi lancha que se mece.
Duraznos, chile perón, capulines, las guayabas, chayotes, verde limón, níspero, higueras, granadas.
Aguacates, verde lima, chirimoyas, fiel carrizo, en Michoacán, huerta fina, porque Dios así lo quiso.
Hoy, que tienes tirolesa que emerja la economía, demuéstrale tu grandeza al turismo día con día.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda Isla Tecuena, Lago de Pátzcuaro, Michoacán de Ocampo, México, julio del 2014 Dedicado al Profesor, Federico Morales López Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
|
Poeta
|
|
O Médico Inexperiente
A cena se passa em São Paulo. Data: 1991.
Cena Única
Um consultório bem arrumado com um esqueleto do lado esquerdo da mesa do médico. Três médicos chamados Aurélio, Athos e Ary estão conversando distraidamente.
Aurélio- Eu me sinto tão inexperiente na carreira de médico, meus amigos.
Athos- Mas você já tem quase dez anos, Aurélio. Não deveria se sentir inexperiente com todo esse tempo de serviço.
Aurélio- Mas é uma insegurança interna, sabe. Eu estou sempre lendo alguma coisa que deveria saber de cor.
Ary- Mas isso todo médico faz.
Aurélio- Mas eu faço a cada dez minutos. É chato até.
Athos- Talvez seja apenas uma fase que você está passando.
Ary- Ou está se cobrando demais uma perfeição que sabe que não existe.
Aurélio- Talvez. Eu não sei. Eu sei que eu sou um médico inexperiente.
Ary e Athos se entreolham como que dizendo: Devemos realmente responder isso?
Ary- Sabe, eu acho que a cada dia a medicina se reinventa. Então podemos ser considerados cada um de nós: Médicos inexperientes.
Aurélio- Acha mesmo isso?
Ary- Com certeza.(Olhar de ajuda para Athos).
Athos- Sim, eu também acho isso, Aurélio.
Aurélio- Vocês são ótimos amigos. Estão sempre me deixando animado e confiante comigo mesmo.
Ary- Sabemos como é se sentir inseguro com o que se faz.
Athos- Sim, realmente sabemos.
Aurélio- Eu sou assim apenas com minha profissão.
Athos- Mas a profissão é o aspecto principal de nossas vidas. Eu creio, quero crer, que mais um ou dois anos, e você perde totalmente essa insegurança.
Ary- Sim, nós...
Neste momento ouvimos uma voz chamando os doutores Ary, Aurélio e Athos para se apresentarem na enfermaria principal.
Athos- Vamos ao trabalho, meu caro doutor Aurélio, é praticando que você realmente vai perder essa insegurança.
Athos, Ary e Aurélio saem do consultório. Ouvimos barulho de choro ao longe. O pano desce rapidamente.
Fim
|
Poeta
|
|
A Morte de Beethoven
Curta-Metragem I
Fade in:
Créditos iniciais
Os créditos mostram diversos momentos na vida de Beethoven. Da infância à velhice. A Nona Sinfonia toca enquanto essas cenas são mostradas.
Cena 1. Casa de Beethoven em Viena. Int. Noite
Letreiro: 23 de Março de 1827
Beethoven está sentado em uma mesa. Há um garrafa de vinho tomada pela metade e uma taça de vinho vazia. Beethoven está compondo. Vemos o lugar totalmente caótico, como ele sempre preferiu.
Corta para:
Cena 2. Casa de Beethoven em Viena. Int.Noite
Passaram-se três dias. É o dia da morte de Beethoven. Dia 26 de março de 1827. Beethoven está deitado a uma cama. Perto da cama estão Schuppnzigh, Diabelli, Schindler, Lichnowsy, ferdinand Hiller.
Schuppanzigh- Acalme, herr maestro. Logo o senhor estará caminhando por essa cabeça novamente compondo mais belas músicas de seu repertório.
Beethoven(Fraco)- Não tenho tanta certeza.
Diabelli- Sim, meu amigo, você estará diante de multidões tocando como nunca antes.
Beethoven(sorriso fraco)- Não, eu estou indo para junto de Nosso Deus. Eu sei disso(Beethoven respira com dificuldade).
Schindler- Maestro, por favor, não fique com medo. Você sairá dessas como já saiu de outras.
Beethoven- Não seja estúpido, Schindler, eu sei que estou morrendo.
Lichnowsky- Se morreres, meu amigo, a música ficará orfã por muitos séculos.
Beethoven- Outros virão que terão mais paciência com o gosto estranho dos vienenses e alemães. Eu tenho certeza que eu com meu jeito rude serei esquecido.
Diabelli- Em absoluto, maestro! Vossa música é a melhor de toda a Europa.
Beethoven- Foi. Não é mais. Eu me conformo em passar para a posteridade como um músico brilhante, mas que perdeu seu maior dom: A audição.
Hiller- Talvez, maestro, isso foi necessário para que você se esforçasse ainda mais para se tornar o que tu és hoje.
Beethoven- Sim, Hiller, eu realmente acho que o Todo Poderoso colocou essa surdez em mim como uma alavanca para o meu sucesso.
Schindler- Mestre, se precisa de algo, é só nos dizer, que faremos.
Beethoven- Não quero nada. Eu pretendo apenas fruir esses últimos momentos que estou vivo.
Vemos os amigos de Beethoven preocupados e não querendo chorar.
Corta para:
Cena 3. Arredores de Viena. Ext. Noite
Vemos que começa a trovejar e chover uma chuva fina. Há poucas pessoas na rua.
Cena 4. Casa de Beethoven.Quarto: Duas horas depois.Ext. Noite
Vemos Beethoven começar a exalar seus últimos suspiros.
Beethoven- A comédia acabou.
Beethoven morre diante dos olhares dos amigos, que já começam a chorar.
Corta para:
Centro de Viena. Ext. Dia
O caixão de Beethoven é acompanhado por um grande número de pessoas.
Corta para:
Cemitério Währing. Ext. Dia
Vemos o caixão de Beethoven sendo baixado à sepultura e algumas pessoas acompanham. Uma delas é seu fiel discípulo Anton Schindler.
Schindler- Não te esquecerei, maestro, e não deixarei que sua obra seja atacada por filisteus nojentos.
Schindler começa a se afastar do cemitério. Ele entra em uma carruagem e se distancia do cemitério. Ouvimos barulho de pessoas no cemitério.
Créditos Finais
Fim
|
Poeta
|
|
Cierro mis ojos y pretendo escuchar en acetato sencillo, como lluvia ligera y entre susurros... nuestras promesas, que ambiciosas apuntaron sin dudar, al para siempre, aquel que va arrancar ilusiones innúmeras, suspiros sin fin…
Cierro mis ojos buscando tu sonrisa, que desborda de alegría mi alma… cobija con su púber energía mis días, que revientan de primavera y magia, en cada lugar e instante de esta vida, que es otra junto a ti, por ti, para ti…
Cierro mis ojos… mientras te beso… porque no quiero ningún otro sentido, que distraiga el disfrute de tu corola, el explorar esa fuente de delicias y comulgar entre bocas, más felicidad, la que esculpimos, la que soñamos…
Hoy quise abrir mis ojos y ver los tuyos, cerrados también, inspirados también, ensoñadores, tras aquellas bellas cortinas, de pestañas en fuga, que atrapan e invitan, a volar, entre la imaginación y el delirio, de amarnos más allá de lo imaginable…
|
Poeta
|
|