Poemas :  Reencarnar
Si reencarnara, podría convertirme en una blanca paloma, mas mi plumaje sería más puro que mi alma y mi existencia sería hipócrita, podría también convertirme en alguna ave marina que sobrevolara aquella agua salina, tomando solo los peces que necesita para vivir y viendo a tanta gente partir alejándose de su patria y de su gente, podría convertirme en una flor de vida efímera y figura hermosa, y el inspirar al pintor sensible sería suficiente para que mis paso corto por este mundo se sintiera completo, podría quizá convertirme en un árbol frondoso que viviese cientos de años, viendo como el tiempo cambia todo a mi alrededor, y como el humano evoluciona a un ritmo veloz, como la vida se desarrolla sin detenerse, para sentirme en paz tras brindarle un poco de amigable sombra al viajero cansado, al ciervo herido, o a la pequeña flor que se encuentra creciendo, podría encontrarme en el cuerpo de un escurridizo pez de rio, ajeno al aire pero conocido del agua, pues en ella habitaría, en ella nacería y moriría, podría también renacer como un oso, mi hogar el bosque, mi entorno el aire, y mi deleite ir a alimentarme al rio y sentir la caricia del agua en mi cuerpo, o ser una serpiente y vivir escondida, saliendo de mi camuflaje solo para cazar o para atacar al sentir necesario comenzar una ofensiva, vivir en la húmeda selva entre raíces de árboles en constante paz conmigo mismo, sin duda todas estas existencias me ofrecerían deleites pero ninguno seria mayor al de ser humano, al de amar a una mujer o aun hermano, al de tomar a un hijo de la mano y guiarlo con responsabilidad, al de tomar mis sueños en mis manos y hacerlos realidad, ninguno como el de caminar por la ciudad esperando que a donde vaya pueda encontrar aunque sea solo un momento de efímera felicidad, al de plasmar mi sentir en un poema y mi vida en un papel, al de hacer de la no rendición mi lema y dar todo por ser aquel que fue capaz de tatuar sus versos en su piel con tan solo recitarlos, al de leer el alma de un escritor en su obra y encontrar en ella el salvador que me saca de las sombras, y sí, quizá como animal o vegetal no conocería el dolor espiritual, sin embargo, no cambiaría por ello mi humanidad, pues si bien está arraigado a la naturaleza humana el sufrir es gracias a esta humanidad que puedo encontrar la felicidad en una efímera sonrisa con los que me rodean o en los poemas que otros han escrito con sus sentimientos y hasta mi llegan
Poeta

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