Desearía tener un ángel, de aquellos que no conocen la mentira y que son calor en la ventisca, o refrescante brisa cuando el sol agobia, desearía tener un ángel que no conociera el engaño de ningún tamaño y curara los daños que infligen los años a corazones desprotegidos que dan todo sin temer a los conflictos, desearía tener un ángel que sea valor cuando el temor de mi corazón se apodera, y sea esperanza cuando la constancia no sea suficiente para cumplir mis metas, desearía tener un ángel de aquellos que pueden traer con sus alas tranquilidad a las almas de aquellos que pueden verlos, desearía tener un ángel, escucharlo, conocerlo, desearía tener un ángel de aquellos que cuando has perdido el camino te iluminan uno nuevo y que si quieres escapar te ayudaran a recorrer el mundo entero, desearía tener un ángel que sea oído fiel cuando esta realidad cruel me llene de tristeza, que me dé palabras de apoyo y me ayude a salir de ese escoyo con su entereza, desearía tener un ángel, de esos que en el momento en que te falta el aliento ponen el suyo en tu garganta para mantener la llama de tu vida intacta, desearía tener un ángel de aquellos que velan tus sueños para que estos no acaben al despertar, de aquellos que cuidan de ti hasta el final y en sus alas te transportan al edén cuando las cosas no van bien, desearía tener un ángel que cuando me sienta satisfecho con mi huella me eleve a las estrellas, para que en el firmamento disfrute de la eternidad por un momento, pero se han extinguido de la faz de la tierra, han muerto poco a poco en cada guerra, sacrificándose uno a uno para que el humano no sea destruido por el camino que ha elegido, y aunque somos muchos los que lloramos su ausencia aún nos queda su esencia en personas que brillan tanto como ellos
