Poemas de amor : Musitando roncos versos |
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La memoria será siempre el paredón ineluctable,
imposible de ocultar, ignorar, peor aún borrar… y allí en las brasas de recuerdos y sensaciones, siempre, por siempre, vamos a suspirar y soñar, pretendiendo que las quimeras no interrumpieron las ansias, pasión, deseos, los sentidos, la ternura… Y precisamente por esa memoria viva, vibrante, es que no puedo dejar de musitar roncos versos, que vayan con esta suerte de voraz ansiedad, que no tiene visos de calma, que lacera y ahoga, que abre abismos aun entre la masa y la algarabía, abismos de soledad, de agudo frío, de orfandad… Ojalá que supiera y pudiera tener respuestas, para saber qué hacer, con esta ausencia terrible y nuestros detalles… titilando como suplicio, como la luna o nuestras sombras fundidas, la ansiedad o el vivo registro de mis sentidos, con esta arrechera inaudita que no cesa… hiere, es que nos tatuamos con saña y todo el frenesí… cada segundo, piel, gemido, miradas, bocas… No sé… cómo dar vuelta al tiempo y eternizar, quizás mejor… morir después de amarte… ¡sí!, tan solo dejar que se pierda toda la fuerza, con la cordura, el hálito de vida, las esperanzas, que brotaron como catarata, desde que nos juntó un atardecer, miradas cruzadas y el ansiado beso. No sé… |
Poeta
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