Poemas : L.A.P.I.D.I.F.I.C.A.D.O. |
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L.A.P.I.D.I.F.I.C.A.D.O. ¡Dame!. Silencio, los labios de tus ecos, a veces, te veo, en la piel, quejándote, flor, en espera, de lo que pudo ser, después, sobre las alas de mil pretextos, dentro de la edad, olvidados, en el perfume de la noche, aguda, del agua que me duele, arenosa, en el espejo escondida, sombría, por la ausencia del mundo, magro, amarga larga viveza demorada cautelosamente indiscreta hoy. ¡Dame!. Despacio, los relámpagos de asombro, del cuarto, saliente, resbalando, infinitas, mil ausencias, apodícticas, dudosas, estés donde estés, incierto, seguro, en la madrugada por los tejados herida por el verde de los pinos llorando el río, por la estéril catarata, del trigo confundido por la noche, al despertar, sobresaltado, reseco, el eco, por el impulso, perdido, extraviado, en la paz quemada, inexistente, solo, creída precipitadamente, meditada en serio. Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez |
Poeta
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Don JoelFortunato, un poema que me ha provocado imágenes fuertes de un espíritu intranquilo al cual la realidad del presente lo desengaña, un gusto pasar le envío un gran saludo con el respeto de siempre
Sutil, certero, de lectura interpretativa fina. ¡ Gracias estimado poeta Catriel !. Un gran gusto saber de su lectura. Reciba mi amistad y respeto. Mil gracias por su presencia aquí.
Me proyecta una imagen de un fuerte anhelo que no pudo concretarse, algo que se echa de menos y casi se reprocha. Un interesante poema, de texto fuerte en su forma de llegar. Le dejo mi cordial saludo de siempre para usted.
Gus
De su atención y agudo comentario le doy gracias, estimado Gustavo. Ciertamente un anhelo ( o muchos) están inmersos en el intratexto que usted ha interpretado cuidadosamente. Un gran gusto es contar con su valiosa presencia siempre amable y fina. ¡ Gracias por todo ello!. Saludos y mi amistad le reitero.