Tengo un doble corazón
que no puedo controlar,
uno sediento de amor
y el otro quiere soledad.

De un lado vienen ilusiones,
pero el otro las va a rechazar…
Este repetido corazón
atormentará mi pensar,
hasta que el alma decida
cual de los dos va a quedar.

Dentro de un mundo sin cielo
en donde nada sucede,
uno sentido de celos,
y el otro ni un solo dedo mueve.

Con estos dos corazones
ya ni sé que voy hacer,
uno dándome razones,
y el otro sigue en el ayer.

Muchos me tildan de loco
dicen que esto no puede pasar,
aunque yo, no lo creía tampoco,
y la realidad no se hizo tardar.

Tengo un doble corazón
que me dieron sin razón,
uno quiere felicidad,
y el otro clama soledad.

Julio Medina
25 de febrero del 2014