Crónicas : Crónicas de vos "cuando comencé a pensarte" |
|
---|---|
Un par de noches atrás mientras mi mamá preparaba la cena; salí al patio y me dedique por largo rato a contemplar las estrellas; esos pequeños, a nuestra percepción, puntitos blancos en lo alto. Las observaba y no podía evitar pensar en cuan extraordinario es todo lo que nos hacen sentir, sí lo que nos hacen sentir.
Sabemos que no nos escuchan, y aún así a veces les hablamos, sabemos que su existencia no depende de la nuestra u viceversa, y aún así su ausencia en la oscuridad de la noche significaría para muchos una gran tristeza. Tan insignificantes desde arriba, solo existen, y nosotros muchas veces, tantas noches las observamos buscando un poco de fe de aliento o cuantas otras veces las relacionamos con un ser querido que ya no está. Personalmente las he observado muchas veces y puedo decirte que me provoca melancolía, nostalgia, sí porque puedo verlas pero al mismo tiempo las siento lejos e inalcanzables; tan apartadas y tan perfectas, sé que están allí pero por más que lo desee no puedo acercarme, y la distancia tantas veces es insoportable. Tantas otras veces me pregunto si se percatarán de mi existencia, si su luz podrá verme. Y una y otra vez me respondo ..."No seas tan inocente, es un fenómeno natural; hermoso, bello, pero al fin y al cabo es algo suspendido en algún lugar de la oscura inmensidad; el tiempo va a pasar y ella seguirá existiendo tal como hasta ahora"... ¿Qué haré ahora que tanto las aprecio si de un día a otro solo dejaran de brillar? ... Gran pregunta... Y mi respuesta más sincera es: "No sé qué pasará ese día, seguramente una parte de mí, una gran parte de mí, se ira con ellas. Por todas las veces que las observe, que las contemple pensando inocentemente que tal vez algún día su brillo fuera diferente. Por las tantas veces que luego de parpadear las seguí observando anhelando estar a su lado, a su nivel. Y por todas aquellas veces que ni siquiera pude sostenerles la mirada. Me hacen sentir tan pequeña, en ocasiones deseo ser indiferente a ello, tan incapaz, de pensar aunque sea, algún día podré sostenerlas en mis manos; ocasionalmente siento que aunque pudiese hacerlo, sostenerlas, el calor y el amor con el que desearía res guardarlas no les sería suficiente, no les bastaría; Y a pesar de eso su brillo también me hace sentir gigante, fuerte y llena de fe; porque puedo verlas desde abajo y sentir que pase lo que pase conmigo siempre, siempre Brillaran y para mi corazón ese es el mayor consuelo. |
Poeta
|
Un escrito de particular ternura, que toma como referencia la observación del firmamento estrellado. En parte me recuerda la historia de ese filósofo griego que cayó en un pozo por su insistencia en caminar contemplando a la luna. Nos produce a veces ese nivel de distracción y encanto el cielo en la noche. De grata lectura ha sido.
Un gran saludo.
Gus