Poemas de amor :  AQUELLA, LA LUISA MÍA.
Te voy a escribir en versos
lo que quisiera decirte en prosa,
te mandaré también una rosa
más allá del universo.
En este mundo tan disperso
donde a través de los años,
pasan los cumpleaños
sin ver a un ser querido,
culpable de haber yo tenido
todos mis desengaños.

Quiero decirte primero
para que entiendas mejor,
que todavía guardo el olor
de cuando era pionero.
Y aunque te vayas al extranjero
yo voy a estar siempre aquí,
acordándome de ti
como en aquel cuarto grado,
y sin saber aún si fui amado
no te puedo arrancar de mi.

Tú has sido todo para mí
y por mucho que no me creas,
te digo esto para que veas
lo que he sufrido por ti
Pero el destino es así
y no se puede cambiar,
por eso tengo que aceptar
las cosas como ahora son,
quizás fue solo una ilusión
que no he podido arrancar.

Tantos años esperando
por esta oportunidad,
que me hiciera realidad
lo que yo estaba buscando.
Y aunque ahora estoy llorando
y no por felicidad,
es culpa de la maldad
de nuestra naturaleza,
y de toda su braveza
y de la infelicidad.

Qué injusto es el destino
con los que saben amar,
primero me permitió hablar
y luego me dejo en el camino.
es verdad que lo esperado vino,
y en un momento oportuno,
pero fue como un desayuno,
para percibir tu olor
porque de lo que es el sabor
no me quedó ninguno.

A mí me pasó igual
y no te lo quise decir,
porque lo quise vivir
y no me interpretes mal.
Una foto no es real
como te dije en una ocasión,
que la primera impresión
no es siempre la que vale,
y si lo crees así, dale
y arráncame de tu corazón.

Quizás se murió la ilusión
aquella que nació en ti,
pero después que yo te vi
me vino una nueva emoción.
Y tomé la decisión
de darme una oportunidad,
para saber si es realidad
lo que aún estoy sintiendo,
y dejar de estar sufriendo
por algo que no es verdad.

Ya sé que te gustó mi voz
igual que me pasó a mí,
y voy a creer en ti
que nos pasó lo mismo a los dos.
Te lo digo a viva voz
que ya me puedo morir,
después que pude vivir
lo que a mí me está pasando,
y aunque pueda estar llorando;
voy a tratar de reír.

Ahora me pongo a pensar
después de lo sucedido,
que mejor hubiera sido
todo esto, un despertar,
para no tener que pasar
por este, tan mal momento.
A pesar, de que no me arrepiento
de haberte, otra vez tenido,
por el tiempo que haya sido
ocupando mi pensamiento.

He vuelto de nuevo al comienzo
de esta larga impaciencia,
con una mejor conciencia
por lo que ahora yo pienso.
Cambiarme para un nuevo lienzo
y comenzar a pintar,
pero antes, sepultar
toda esta terrible agonía,
y dejar, La Luisa mía
oculta en el mismo lugar.

Lo último que yo te digo
abriendo mi corazón,
gracias por tu comprensión
y acéptame como un amigo.
Aquí yo tengo testigo
de lo que siento por ti,
qué lástima para mí
que tu no sientas lo mismo,
yo seguiré en mi abismo
siempre, esperándote a ti.

Trataré en todo momento
de encontrar en otra mujer,
lo que de ti, no pude tener
y créeme que lo lamento.
Pero de nada me arrepiento
porque todo fue muy bonito,
y aunque también fue poquito
y me destrozó por dentro,
me alivió mi sufrimiento
como si fuera un chiquito.

Por lo menos, me quedó la emoción,
y el tono de tu voz, dulce y fresca,
créeme, que aunque ya no lo parezca
seguirás siendo aquella ilusión
que guardo en mi corazón
para, por si acaso un día
tú quieras, buscar otra vía
tal vez pueda suceder,
que quieras volver a ser
aquella, La Luisa mía.
Poeta

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